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*Narra Tauro*

Cáncer y yo estábamos con el carro de las compras buscando la puta Nutella que ella me prometió. Ya estaba comenzaba a desesperarme. Tauro necesita su hermosa Nutella. HERMOSAAA NUTELLA, VEN AQUÍ, POR FAVOR. Olvida las veces que te insulté porque no había más contenido dentro del frasco... TÚ SABES QUE TE AMO. 

_Bueno, Tau, la compramos otro día. No hay_ dijo Cáncer. Una señora pasó con TRES FRASCOS de Nutella en su carro. Me acerqué para preguntarle dónde había más. 

_Perdón, me llevé los últimos_ dijo la señora con una mueca. 

Mi boca se abrió exageradamente. Me quedé cerca de la señora. Tenía un plan maligno, lo sé. Jijiji. Cuando la puta señora que se llevó mi Nutella se alejó del carro, corrí hacia éste y agarré los TRES frascos de Nutella y los puse en mi carro. Game over señora mala, ladrona. Cáncer me miró, apoyó una mano en mi hombro y suspiró. 

_Sabes que este tipo de cosas no me gustan_ dijo y pestañeó varias veces_, pero me enorgulleces. ¡Todo por la Nutella! Ahora, vamos, se va a dar cuenta. 

Asentí rápidamente y salimos corriendo hasta la caja registradora. ¿Quién va a llorar ahora, señora?, ¿tú o yo? Este es el estilo de Tau... Sigan los pasos de Tau. No, mentira, no lo hagan por su propio bien. Tengan su mente sana y salva. Por favor. 

*Narra Aries* 

Escuchaba música en la habitación, tranquilo, con Escorpio de acompañante, que estaba leyendo un libro. De la nada, muy de fondo, se escucha un grito escandaloso. Ese grito fue de un hombre, sin embargo, sonó como si fuera de Piscis, o Libra, o alguna de las chicas. Me saqué los auriculares y fui corriendo hacia abajo con Escorpio pisándome los talones. 

_¡Nooo!_ Gritó Acuario entre risas, seguida de ella, Piscis, que carcajeaba junto a Ofiuco. 

_¿Eh? ¿Qué hacen?_ Preguntó Escorpio, con una vena que empezaba a marcarse en su cuello. 

_¿No es obvio?_ Preguntó Piscis con los brazos cruzados_. Hablamos con Ofiuco. 

_¿Ofiuco gritó?_ Pregunté. Piscis asintió. Bufé, pensé que habían entrado a robar o algo así, y no, fue el estúpido del chico éste. 

_Acuario, no está permitido hablar con él. 

_Cierra tu boca, Escorpio, soy mayor de edad y puedo hacer lo que se me cante_ dijo Acuario, se levantó y subió algo enojada. 

Si hay algo que Acuario odie, es que digan lo que tiene que hacer. Para ser más exactos, que no la dejen ser independiente. Miré a Escorpio con una sonrisa de lado y subí a mi habitación... Bueno, la habitación de todos. 

*Narra Leo*

Ya estaba luciéndome, como de costumbre. Tenía un traje de baño nuevo y no dudaría en no probarlo, además, quiero que Géminis sea la primera en verlo. Me acerqué a ella, que hablaba con Libra felizmente, y la rodeé con mis brazos. Me miró y arqueó una ceja, tratando de descifrar lo que yo quería. 

_Hola, Gem. 

_Ammm, hola_ dijo Géminis y miró a Libra. Siguió hablando con ella. 

_¿No notas un cambio?_ Pregunté, y le di una rápida mirada a mi traje de baño. 

_No_ dijo sin mirarme. 

Me la quedé mirando, algo indignado. Me di vuelta y noté a Virgo sonriéndome divertido. Se estaba burlando de mí. NADIE. SE. BURLA. DE MÍ. Me acerqué a él y lo miré fijamente, tratando de intimidarlo con la mirada. 

_Justo en el ego_ dijo Virgo y comenzó a reír. 

_¡Claro que no!_ Grité y algunos me miraron_. Estaba actuando. 

_No lo creo_ dijo sonriente_. Acepta que ella no te prestará atención. 

_Se está haciendo_ dijo Sagitario que apareció de la nada. 

_¿Cómo lo sabes? 

_Jelouuu_ dijo y miró al cielo_. Mejor amigo de toda la laif de Gem. 

_¡Te dije que estaba actuando! 

Sonreí triunfante y fui a la piscina con los demás. Feliz, así estaba. Nadie rechaza al rey. 

*Narra Virgo*

_Es mentira, ¿no? 

_Sí_ dijo Sagitario sonriente_. A Géminis no le agrada mucho, pero ya sabes, divertirse un poco no hace daño. 

_No, para nada_ dije con una sonrisa. Choqué los puños con Sagi y seguí escuchando música. 

Escuché ruido en la entrada. Fui hacia allí y vi a Escorpio golpeando todos lo muebles y a Ofiuco con un golpe en el ojo izquierdo. Miré a Piscis, que estaba en la esquina de un sillón diciéndole cosas a Escorpio para que se calme. 

_¿Qué pasa?_ Pregunté algo enojado. 

_¡Mira la puta foto que me mostró este hijo de puta!_ Agarró el celular de Ofiuco y me mostró una foto que me dejó con la boca abierta. Acuario. Ofiuco. No puede ser. 

_Ya está_ dije y miré a Ofiuco_. Ya no puedes estar aquí. 

_¡Tauro me dejó!

_¡La casa no es sólo de Tauro!_ Grité y me acerqué a él_, ¡fue la gota que colmó el vaso! Te lo dije, Ofiuco. Te dije que no te metas con las personas equivocadas, otra vez. No me escuchaste. Ahora, te vas. 

Ofiuco me miró suplicante, negué y agarré sus pocas cosas. Se las tiré al cuerpo y abrí la puerta de entrada y lo lancé a la calle. Estaba furioso. Y si yo lo estaba, imagínense a Escorpio. Cerré la puerta y miré a Escorpio, me acerqué a él y lo agarré de los hombros. Lo senté en el sillón  y Piscis pasó su brazo por su hombro. 

_¿Quieres que llame a Acuario?_ Preguntó Piscis. Escorpio asintió_. Ya vengo. 

_Yo... Lo siento_ dije con la vista gacha_. Hiciste bien en darle ese golpe. 

_Lo sé_ dijo, y su calma no había llegado_. Se lo tenía merecido, ese hijo de puta. 

Agarré el celular de Ofiuco otra vez más. No, no se lo di y no pensaba dárselo. Quería revisarlo. Miré la foto nuevamente. Acuario y Ofiuco besándose, ¿quién lo diría? Lo dejé en la mesa de centro cuando vi a Acuario con Piscis bajar las escaleras. Escorpio no la miraba, ni de reojo. Me fui junto a Piscis y les advertí a todos que ambos tenían que hablar. Sé que los gritos no tardarán en llegar. 

Y... Ya llegaron. 

_¿Saben? Es mejor que salgamos un rato. Vayamos a la playa, no sé, pero es un ambiente bastante tenso. 

Todos asentimos ante la idea de Capricornio y salimos saltando la pequeña valla que cubría el patio. Qué lío que se le va a venir a Acuario. Y me dan escalofríos pensarlo, sabiendo cómo es Escorpio. 

La Vida De Los SignosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora