Megan.

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Al día siguiente Lara le pidió a Leisha que se retirara, que ese día necesitaría estar solo con Megan y que regresara después de 2 horas para recoger a su hermana, Leisha no la cuestionó, solo dejó a su hermana para después irse a casa de Adriana.

Lara le dijo a Megan:

- Repite una vez más, ¿qué quieren hacer?

- Queremos que ese espíritu se largue de nuestra casa, queremos volver a sentirnos a gusto en ella.

- Perfecto y así será. ¿Qué de las cosas que te he enseñado crees que te sirven? - Al Lara decir esto, Megan rápido sacó su diario para ver todo lo que había escrito y sus notas.

- Bueno, creo que podemos contactarnos con Nix mediante un espejo porque los espejos pueden ser portales.

— Bien ¿tu protección?

— No lo sé... amm — hojeaba su diario, había pensado todo pero se ponía nerviosa. — ¡un círculo de sal! Así no puedan afectarnos, además de tener nuestras pulseras y pentagramas con nosotras.

— Bien, encárgate de que tu hermana tenga su piedra, la necesitará antes, durante y después. ¿Qué harás cuando eso finalice? ¿Cómo piensas cerrar esa puerta?

¡Que difícil era! Sentía que hacía pregunta tras pregunta y eso atarantaba a Megan.
— Encenderé una vela negra durante el proceso y otra después justo frente al espejo. Porque la vela negra sirve para protección y absorbe la negatividad. También quisiera usar una blanca durante el ritual, porque se usa durante exorcismos.

— ¿otro detalle?

— usaremos lirios porque se usan en los exorcismos, si algo sale mal, las lanzaremos al espejo, después lo romperemos y quemaremos para purificar si es que llega a salir mal.

— Solo NO lo toquen con su piel por favor mis niñas, y tengan cuidado de no sangrar y que caiga sobre el cristal, sería el peor error que podrían cometer. ¿Cómo podrán comunicarse específicamente con Nix?

— Tendremos que decir su nombre completo, concentrarnos en dónde debe estar (cielo, infierno o purgatorio) una foto y ... un objeto personal de ella.

— Todo está bien, es una idea buena pero ¿cómo lo conseguirán? No sabemos qué sucedió con su familia, eso retrasará el proceso...

— Lo lograremos. Tengo una idea.

Cada que Leisha y Megan se sentían seguras de sí mismas Lara se emocionaba, no podía evitar sonreír al ver a esas dos novatas tan decididas, se sentía orgullosa.

— Me parece perfecto entonces. ¿Cómo comprobarás que es ella?

— Haciendo una pregunta que solo ella sabría responder.

— Un dato más que tienen que descubrir. Megan te recomiendo que lo hagan a las 3:00 am, de ahí en fuera elige el día que quieran.

Claro que Megan ya tenía un día previsto, era octubre. Había un día perfecto.

— Bueno corazón, apruebo tu plan, me siento orgullosa para ser honesta. — Dijo Lara sentada tranquilamente en su sofá viendo la calle por la venta. — deberías decir a tu hermana que venga.

— Cierto. — Megan guardó su diario en su bolso y luego sacó su celular pero una mano la detuvo, la de Lara.

— Oh no querida. No de esa forma, medita y pídele que venga, ahora te toca practicar a ti.

Había pasado un poco más de una hora y Leisha seguía con Adriana. Adriana era una persona dinámica, platicadora y sobre todo risueña. Tal vez por eso eran mejores amigas, ya que de las 2, Leisha solía ser la sería.

Ya que se veían poco se estaban poniendo al tanto de todo, entre risas y gestos de sorpresa, hasta que Leisha sintió algo en su pecho, algo le dolía pero no sabía qué y sus pensamientos iban hacia su hermana, sentía la urgencia de correr hacia ella y ver qué sucedía, que le pasaba, sentía incluso que se sofocaba. Así que eso hizo, dirigirse hacia Megan.

Se despidió de Adriana lo más rápido que pudo, al salir de la casa se giró, espero que Adriana entrara, Leisha en realidad sentía miedo y angustia por su hermana y temía que algo le pasara a Adriana así que sin más, sacó su diario, buscó una runa, y la dibujo muy pequeña en una parte de la casa donde pasaría desapercibida, la runa de protección, para después irse.

Se despidió de Adriana lo más rápido que pudo, al salir de la casa se giró, espero que Adriana entrara, Leisha en realidad sentía miedo y angustia por su hermana y temía que algo le pasara a Adriana así que sin más, sacó su diario, buscó una runa,...

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Llegó los más rápido que pudo a casa de Lara, conforme se acercaba a su hermana se sentía mejor. Al abrir la puerta de la camioneta, Megan abrió la de la casa de Lara para salir a abrazarla de lo más sonriente.

Leisha la abrazó lo más fuerte que pudo.
— ¿Estás bien? ¿Qué sucedió? Sentí algo horrible. — Dijo analizando a su hermana asegurándose que estuviera bien para luego ver confundida a Lara que sonreía demasiado ¿qué era lo gracioso?

— No pasó nada mi niña, tu hermana te pidió que vinieras. Fue una práctica y salió bien.

— ¿Es broma? ¡Casi me infarto cuando venia! — dijo soltando bruscamente a su hermana.

— Eso es lo que me falta mejorar, transmitirte el sentimiento correcto.

Después de eso las dos hermanas se fueron, Megan puso al tanto a su hermana de lo que harían, que papel tomaría cada una. También le dijo la fecha.

— ¿En serio, Meg? ¿Halloween?

—¿Qué tiene de malo? ¡Es noche de brujas! Nuestra noche. No veo problema en eso.

— Tengo un mal presentimiento respecto a esa fecha, siendo honesta.

— No pasará nada. — aunque haya dicho eso, Megan no estaba nada convencida. Algo en su interior le decía que se detuviera, pero la fortaleza más grande de Megan no es su mente, ella se deja llevar, así el cuarzo estuviera encendiendo su lado intuitivo, defensivo, ella haría el ritual el 31 de octubre a las 3:00 am. Cuando la barrera es débil y pueden dañar a su hermana.

— Está bien, solo habrá que esperar y obtener lo que falta. — Dijo Leisha estando menos convencida que Megan.

Cierra bien la puerta.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora