XII

11K 490 81
                                    

DANIELLA

-Daniella te presento a mi padre Jackson y mi madrastra Anne.- El hombre me extendió la mano que amablemente acepté mientras que Anne, mi madre, se quedaba de piedra mirándome.

-Pasad por favor.- dijo Jackson. Aidan pasó delante de mí y yo pasé después chocando bruscamente mi hombro con el de Anne.

-¿Cariño estas bien?-escuché que le preguntó a Anne.

Ya estábamos sentados en el salón, Jackson y Aidan solo hablaban de empresas, negocios y algo de mercancías, mientras yo solo miraba con odio a mi madre, ella apartaba la mirada.

-Cariño nos traes algo de beber por favor.-Anne salió de su ensoñación y se levantó del sofá disculpándose.

-¿Te ayudo?-pregunte sonriendo maliciosa

Fruncio el ceño y asintió haciendo un intento de sonrisa.

En la cocina Anne empezó a preparar café, me crucé de brazos y la miré fijamente. Se notaba que estaba nerviosa, sus movimientos eran torpes y le temblaban las manos.

-¿y dime Anne, hace cuanto estas casada con el señor Jackson?- se puso mas nerviosa aún.

- amm, hace...11 años.- Justo cuando me abandonó. Apreté los puños clavandome las uñas en las palmas pero mantuve mi sonrisa incrédula.

-Mi marido me maltrataba y yo... conocí a Jackson en mi trabajo, nos enamoramos...y abandoné a mi marido.- En cierta parte la entiendo, yo hubiera echo lo mismo en su lugar...pero ¡Abandonar a tu propia hija! ¡sangre de tu sangre! Y con ese hijo de puta... Hubiera preferido que me abandonara en un orfanato, incluso era mejor la muerte...

- ¿y no tenias hijos?¿tambien los dejaste tirados?- pregunté con reproche. Ella bajó la cabeza avergonzada y soltó un pesado suspiro.

-Daniella hija, yo lo siento tanto.-levanto su mirada, su rostro estaba lleno de lágrimas. Mis ojos se cristalizaron. No iba a llorar, no derramaría lágrimas por alguien que no se merece nada de mi.

-No, no me llames hija.- la miré con odio.- hace mucho tiempo que deje de tener madre.

Soltó un sollozo mas fuerte. Una lágrima rodó por mi mejilla. La limpié con rapidez. ¡por que tengo que ser tan débil!

No dijo nada, solo lloraba.

-¿Sabes lo que es ser violada por tu propio padre a los 7 años?- ya tenía millones de lágrimas rodando por mis mejillas recordando su asqueroso tacto.- Todos los días me insultaba, me echaba la culpa de que te fueras.-sabia que Jackson y Aidan estaban detrás mia, pero no me importaba.

-Todos los días venía borracho me golpeaba hasta perder la conciencia, cuando no, me violaba. ¿pero sabes que es lo peor? No solo el me violó.- respiré ondo recordando todo.- ¡Ese asqueroso me vendió a un prostíbulo!- le grité estallando.- ¡Me amenazaban, me golpeaban, me violaban!¡Era una cualquiera,una puta! ¡Todos me tocaban y golpeban!- hice una pausa respirando, ya que me estaba hiperventilando.- ¡y tu estabas aquí, viviendo como una reina con el hombre que de verdad amas! ¡tu no tienes pesadillas todas las noches, tu no te intentabas suicidar para que toda esa mierda se acabara!- estaba empezando a faltarme el aire.- Te olvidaste de tu pasado y ¡te olvidaste de tu hija! ¡solo pensaste en ti, en tu bien!¡nunca pensaste en mi, NUNCA ME QUISISTE!- Empezaba a ver todo borroso.

Parpadeé varias veces aclarando mi vista me giré y me tiré a los brazos de Aidan a llorar. Esta sorprendido el sabia parte de mi historia, pero seguro no esperaba que Anne fuera mi madre.

Jackson estaba abrazando a Anne, que lloraba desconsolada en el suelo. Aidan me cogió por los muslos subiendome a su cintura moviéndose hacia el patio. Puse mi cara en su cuello aspirando su aroma y escuchando el sonido del agua caer de una fuente del patio, eso me tranquilizó un poco.

MONSTRUO *EDITANDO*Donde viven las historias. Descúbrelo ahora