Capítulo 25: La cura.

12 2 0
                                    

~Grupo 1. Narra Álvaro~

Cómo puede ser posible... Alguien a quién le brindé todo mi cariño ha acabado así... Con lo fuerte que eras, seguramente hubieras podido con los dichosos Caminantes.

Álvaro: ¡Dios! ¿Cómo has acabado así, hermano?  

Iris: ¡Quitarme a su hermano de encima! *Da mordiscos sin parar al aire, intentando alcanzarla*

Álvaro: Que a nadie se le ocurra tocarlo. Soy yo el que debe de acabar con su sufrimiento. Se merece una muerte rápida e indolora, aunque dudo que en este estado sienta algo... *Lo miro con tristeza*

Me invaden recuerdos. Aquellas tardes de juegos, entre risas y pequeñas peleas... Aquellas competiciones para saber quién era el mejor en todo... Aquellas acampadas que hacíamos juntos y esas historias de terror por las noches, que me contabas para que me muriera de miedo... Después de todo pienso que eras, eres y serás el mejor hermano que se pueda tener... Gracias por existir y hacerme tan feliz en esta vida. Ojalá pudieras estar aquí conmigo, combatiendo a estos bichos... Compitiendo por a ver quién mata a más de ellos... 

Un sonido metálico interrumpe mis pensamientos, mis recuerdos y todos los sentimientos y emociones que estaba teniendo en apenas unos segundos. Izan había terminado con la vida de mi hermano. Eso me enfureció muchísimo:

Álvaro: ¿¡QUÉ COÑO CREES QUE HAS HECHO, BASTARDO!? *Le asesté un gran puñetazo en la mejilla, tirando la barra de metal que había adquirido al suelo, provocando un gran estruendo metálico*

Iris: Gracias... Izan *Dice jadeando*

Álvaro: ¡He dicho que lo hacía yo! ¡ÉL ERA MI PUTO HERMANO, COMPRENDES?

Iris: ¡Ya basta, Álvaro! Mientras tú estabas paralizado, tu hermano cada vez estaba más cerca de morderme y él me ha salvado! Que coño prefieres: ¿matar tú a tu hermano al cabo de dos horas, cuando se te haya pasado el Shock o que lo mate otro y salvarme a MI la vida? *Me dice con lágrimas en los ojos*

Ángel: Ahí lleva razón Iris. Era o su vida o que tú mataras a tu hermano... Lo siento mucho, Álvaro. *Me rodea con el brazo y me abraza*

Álvaro:  Ángel, tú mejor que nadie puedes comprenderme... ¿Y encima te pones de su lado? 

Ángel: Álvaro, yo... *Izan nos corta*

Izan: Chicos, ¡debemos de salir corriendo YA! Se acerca una Horda de Ellos. ¡Coger lo que podáis y vayámonos! 

Lo miro con desprecio pero sabía que  tenía razón. Debemos de salir de este supermercado cuanto antes. Mi pasado se quedaría atrás, como mi hermano zombificado. Jamás volveré a pensar en el pasado. Es una nueva era y debo preocuparme por las personas que aún continúan con vida. No debo de pensar en nada más. Y sé que Izan ha hecho lo correcto, pero no sé por qué me molesta tanto su presencia... No confío en él plenamente.

Grupo 2. Narra Blanca.

Blanca: ¿Cómo que Izan sabe la cura a todo este mal?

Ou: Él creó dicha arma biológica. Afirmó que todo lo que crea tiene que saber una forma para contrarrestar los efectos. Por ello mi jefe quiere verlo muerto. Quiere beneficiarse con esta arma de una manera muy cruel: expandirla por todo el mundo. Actualmente se halla fabricando más como la que ha atacado Lakewood.

Blanca: ¿Y cómo puede ser eso posible? Deberían querer a Izan vivo para poder crear más, pero es todo lo contrario. Además, tienen a gente trabajando ya en dicho proyecto.

Afra: Mi padre tenía los planos... *Añade con voz temblorosa*

Ou: En efecto. Tu padre trabajó en secreto con nosotros durante unos cuantos de años. Ayudó a Izan en todo lo que pudo. Siento mucho tu pérdida *Le apoya la mano derecha en su hombro*

Afra: Blanca, acompáñame a revisar el perímetro. Ha pasado unas cuantas de horas desde que el otro grupo se marchó. Debemos despejar la zona si es necesario.

Blanca: Por supuesto. Vendremos en un rato. 

Ou: De acuerdo.

Afra y yo salimos de la habitación y ella estaba pensativa, como si algo de verdad la atemorizaba demasiado. Estaba muy intrigada y decidí preguntar:

Blanca: Afra, ¿te encuentras bien?

Afra: El primer día de este infierno, fui a mi casa para ver si estaba todo en perfectas condiciones. Que ilusa era. Me encontré a mi madre siendo devorada y a mi hermano aterrado en un rincón, viéndolo absolutamente todo. Conseguimos rescatarlo pero aún así, el muy idiota entró de nuevo en su habitación para recoger algo, no sé lo que era. Encontró su muerte allí. Yo corrí a rescatarlo pero era demasiado tarde. Entré en estado de Shock y me cargué a todo Caminante que se hallaba en mi morada. Y cuando terminé, encontré unos papeles de mi padre. *Me los enseña* ¿Los reconoces?

Claramente podía reconocerlo. Ese logo, ese nombre... Proyecto Pegasium.

Blanca: Quiere decir que si queremos acabar con toda esta locura, tenemos que llevar a Izan al sitio adecuado, ¿no? Para que de alguna forma, pueda construir el arma que vuelva todo a la normalidad.

Afra: Lo que no consigo entender es... Si él sabe la cura a esto, ¿por qué aún no la ha desarrollado? Hay algo que nos lleva ocultando mucho tiempo, desde que Lakewood se fue a la mierda. *Mira los planos de arriba abajo*






Has llegado al final de las partes publicadas.

⏰ Última actualización: Jul 16, 2017 ⏰

¡Añade esta historia a tu biblioteca para recibir notificaciones sobre nuevas partes!

BrainlessDonde viven las historias. Descúbrelo ahora