Brainless

Capítulo 12: Desconfianza.

~Narra Áfra~

¿Cómo me ha podido engañar de esa forma? ¿Cómo me voy a fiar de alguien que no ha sido capaz de confiar en el grupo, y ha sido el causante de toda esta Catástrofe? Ha matado a miles de persona de Lakewood, incluyendo a nuestras familias y amigos... Alba y Sergio seguirían con vida aún. Hasta el asqueroso de Berto... ¡No puedo creerlo! ¿¡Me enamoré de él para luego ser traicionada!?

Izan: Me podéis reprochar todo lo que os de la gana. Todas las acciones que he hecho por el grupo son verdaderas. En ningún momento os he abandonado. ¡He dado la vida por vosotros! Me lancé al vacío para rescatar a Lola. He matado a cientos de Caminantes sólo por vuestra supervivencia... *Aprieta el puño con rabia*

Blanca: ¿Pero que dices al respecto de nuestras familias? ¡Mis padres están muertos por tu culpa! *Llora mientras le pega puñetazos con poca fuerza en el brazo izquierdo*.

Afra: ¿Eso era lo que querías decirme la noche que os rescatamos? Mientras hacíamos guardia los dos. ¿Era todo esto?

Izan: En efecto. Quería contártelo a ti, porque eras la única en la que confiaba en ese momento. Ahora sé que debería haberlo contado antes *Me coge la mano*

Ángel: No pasa nada. *Todo el mundo se asombra*

Salma: ¿¡Cómo puedes decir eso, Ángel!? ¡Él y sus juegos para niños nos han metido en esto!

Ángel: No os preocupéis. Saldremos de esta dichosa ciudad, pero antes mataré a la persona responsable de dicha masacre. Y no, no es Izan. Él sólo fue un peón en dicho juego. Te mandaron a construir un arma, y punto. No pensaste las consecuencias. El caso, que todos, dada esta situación, somos ratones de laboratorio. Prueban con nosotros para aplicarlo al resto del mundo. ¿No es así?

Izan: Sí, eso es lo más escalofriante de todo. Quieren lanzar más armas bio-químicas de ese modelo por diferentes zonas del mundo. Venderán vacunas falsas y serán los Reyes del mundo... *Mira hacia abajo*. Lo siento mucho. Si tengo que abandonar al grupo, lo comprenderé.

Afra: Eso ni lo sueñes. *Lo beso*. Eres mi pilar fundamental de este Infierno. Te quiero, y necesito que estés a mi lado.

??: ¡Ayuda, por favor!

Ángel: ¡Vamos a rescatarla! ¡Izan y Álvaro, conmigo! ¡Las demás quedarse aquí para proteger nuestro refugio!

Salma: ¡Entendido! ¡No te preocupes por nosotras! ¡CORRED!

~Narra Izan~

Estaba demasiado preocupado por mi situación actual en el grupo. Sé que no son mala gente y que siempre van a hacer lo correcto... Pero no puedo pensar eso de todos los miembros. Tengo miedo a que me ataque un Zombie y no se preocupen por mí... Estoy realmente asustado.

Seguíamos las voces que emitía la muchacha, y la encontramos en la parte externa del refugio. Rodeada por varios de Ellos, sin tener escapatoria. La única forma era luchar.

Izan: ¡Tranquila, vamos hacía allí!

??: ¡Gracias! *Añade con lágrimas en los ojos y dando golpes a varios Caminantes con un listón grande de madera*

Me abalancé con el bate de béisbol que encontró Afra sobre sus podridos cráneos. Uno me agarró, pero le dí una patada en la mandíbula y más tarde, cuando cayó al suelo, le pisé la cabeza. Ángel iba con una de sus adoradas espadas. Matando a bichos de estos se encontraba como un pez en el agua. Disfrutaba con cada golpe que asestaba. A veces, podía llegar a dar miedo el estado mental que tiene. Muchas personas estarían decaídas, como es el caso de Afra, pero él es diferente. Lucha para sobrevivir. Pero no para propia supervivencia, si no por la del grupo entero. Dejaría su vida allí mismo para salvar la de la chica.