Yo Confío En Tí [MLB Fanfic] //TERMINADO//

3.- Visita

- ¡Hija! ¡Tus compañeros llegaron! - se escuchó anunciar a la madre de Marinette.

La chica, al escucharlo, se asomó por la escalera.

Su vista pasó por todas partes... Hasta llegar a él.

Aquel rostro perfecto... Sus cabellos rubios y sus ojos verde esmeralda... Eso simplemente aceleraba el corazón de la chica. Una distracción no sería malo... ¿Verdad?

- ¡Suban! - dijo, cuando se estaba dando cuenta de que sus mejillas estaban enrojecidas de tanto mirar al rubio.

Los tres chicos subieron las escaleras hasta el cuarto de la chica, mientras los padres de Marinette miraban conformes. Les encantaba ver que su hija tuviera tan buenos amigos que se preocuparan por ella.

- ¡Que bueno que recordaste sacar todas las fotos de Adrien! - dijo en susurro la morena a la peliazul al pasar junto a ella. Esta solo le lanzó una mirada nerviosa.

- Bueno... ¡Bienvenidos a mi cuarto! - anunció la peliazul - Aunque creo que Nino es el único que no ha venido..  - agregó luego.

- ¿Yo? ¿Y que hay de Adrien? - reclamó este.

- Bueno... - se sonrojo la peliazul. Alya en seguida rió por el comentario del chico y la sonrisa nerviosa de la peliazul.

- Yo vine antes, Nino , ¿Recuerdas? Para practicar videojuegos... - trató de hacer memoria el rubio a su amigo.

- Ah... - dijo el chico, ya recordando - Videojuegos se le llaman ahora... - agregó con una sonrisa pícara. Alya rió en seguida, ya se imaginaba como estaba el rostro de su amiga.

Adrien y Marinette se sonrojaron, aunque esta última mas notoriamente.

- Sus rostros lo dicen todo... - agregó Nino, subiendo las manos para mostrar inocencia.

- Ya basta, Nino... Si solo jugamos videojuegos y luego comimos algo en el parque... Luego llegó The Gamer y ahí quedó todo. No le des mas vueltas al asunto, por favor. - dijo el rubio, levemente sonrojado. No estaba acostumbrado a que lo molestaran con chicas a menos que fuera Chloé.

- Y quizá que comieron... - la risa de Alya fué mas notoria. El rostro de Marinette estaba totalmente encedido... ¿Qué a Nino no se le puede apagar?

- Ya basta Nino... Ademas estamos aquí para saber como se siente Marinette... ¿No es así, Marinette? - dijo Adrien.

El rubio fijó la vista en la peliazul, para en seguida toparse con aquellos ojos azul cielo...

No es que sintiera algo por la chica, pero... No estaba acostumbrado a mirar a una chica de ojos tan... ¿Llamativos?...

Si llamativos, esa era la palabra. Nada mas podía hacer que el chico sintiera un leve rubor en su rostro, ¿verdad? Solo el hecho de que no estaba acostumbrado a mirar a una chica de ojos tan llamativos.

Nino miró a Alya de manera cómplicé... El moreno tenía que decir algo sobre eso...

- ¡El amor se siente en el aire! - dijo a modo de burla. En seguida, Adrien y Marinette fijaron sus miradas a otro lado del cuarto. Sin duda, se habían quedado hipnotizados en la mirada del otro, a pesar de que uno lo negaba rotundamente.

- ¡Hey, Nino! - golpeó Adrien levemente el hombro de su amigo - ¿Qué te dió con molestarme el día de hoy con Marinette... ¡Ah, Claro! Ya entiendo... Es para no dejar que yo te moleste con Alya, ¿Verdad? - observó pícaro el rubio al moreno. Este solo se sonrojó levemente, para luego acercarse a la morena.

- La verdad... Creo que ni a ella ni a mi nos molesta que nos emparejen... - dijo Nino, apoyandose tranquilo en el hombro de Alya.

- Nino... Todavia no se lo ibamos a decir.... - dijo Alya entre dientes. Adrien y Marinette los miraron algo perplejos...

- Decir... ¿Qué, exactamente? - dijo la peliazul.

Alya suspiró, negando con la cabeza.

- Siepre tienes que arruinarlo todo... ¿No es así, Nino? - dijo Alya a Nino.

- Oh, vamos. Si no lo soltamos, igual se darian cuenta - se defendió este.

- ¡Solo díganlo de una vez! - interrumpió la peliazul.

- Esta bien... Nino y yo estamos saliendo. - dijo la morena tranquila.

Adrien y Marinette los miraron confundidos.

- ¿Eso era todo? - preguntó el rubio. Ahora, Alya y Nino eran los confundidos.

- Creo que eso ya lo sabiamos - dijo la peliazul, aclarando lo que su perfecto compañero había dicho anteriormente.

Alya y Nino los miraron aún mas confundidos...

- ¡Vamos! Si se les nota a la distancia! Ahora que realmente lo admitieron, solo podrán ser mas libres en "Su Amor"... - dijo el rubio arqueando una ceja. Marinette volvió a reir... Extrañamente, ese comportamiento del rubio le parecia familiar.

Tan coqueto... Era... Lindo.

- Bueno... Ya lo saben. Pero aun no nos dicen que pasa entre ustedes dos... ¿Eh? - dijo Nino, para volver a molestar a su amigo.

Marinette se sonrojó nuevamente... Adrien tambien, y mas notoriamente de como se había sonrojado hasta ahora.

- ¿Por qué crees que pasó algo entre nosotros, Nino? - preguntó el rubio, rascando nerviosamente su cabellera.

- Tal vez lo pregunta porque ambos se sonrojan cuando los molestamos - dijo Alya, quien en seguida recibió una mirada de odio de Marinette. ¿Ella tambien iba a empezar?

- Yo en mi defensa puedo decir que... No estoy muy acostumbrado a que me molesten con chicas - dijo el rubio cabisbajo - y tal vez a Marinette le pasa lo mismo - agregó.

- Si... Claro - dijeron ambos morenos rodando los ojos. Marinette les lanzó una mirada de odio a los dos.

- Hey, Marinette... Te estamos ayudando, deberías agradecernos - soltó Nino.

A Marinette ya le sudaba el rostro... ¿Es que esos dos no se podían callar en ningún momento?

Adrien levantó la cabeza, para mirar confundido a Marinette.

- Ayudarte... ¿Con qué? - preguntó el rubio

Esta solo le dedicó una sonrisa timida.

- Oh vaya, miren la hora... ¿Y si vamos por unos helados? - dijo la peliazul, dirigiendose rapidamente hacia las escaleras.

- No es mala ¡Auch! - dijo Nino, recibiendo un golpe de Alya. La idea era que Marinette se le declarara a Adrien, no ir por helados.

Entre miradas, Alya comprendió que Marinette no estaba lista aún.

- Esta bien... Vamos por helados - respondió. Se sentía mal porque su amiga no podía decirle lo que sentía a Adrien... Pero si no estaba preparada aún, ella respetaría su decisión.

Despues de todo, cuando se trata de Marinette, nunca se sabe.