Ya era tiempo de volver al sur, Rem estaba muy emocionada de pasar vacaciones juntas, libres frente a nuestras familias, sin universidad. Aún así no podía dejar de pensar en Fernanda, me dolía pensar lo que estaba pasando, pero Fer se había preocupado de todos los detalles de mis pensamientos... Jota me enviaba mensajes diciendo que el la cuidaba y que estaría bien. En su dolor no quería que yo volviera a sufrir.
Con millones de sentimientos volvimos a nuestras casas, se sentía estupendo ser yo misma frente al mundo, mucha gente nos miraba extraño en la calle cuando pasábamos de la mano y Rem provocaba más miradas al besarme. A veces moría de miedo por la homofobia que es muy potente en Chile, pero la mayor parte del tiempo reía. Mi vida era distinta, no por eso mejor ni peor.
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Mientras Rem conducía hacia la playa, las canciones de la radio me hacia pensar en como lo estaba pasando Fernanda, debía superarlo, debía volver a ser yo... pero es difícil cuando sabes que una persona que lo fue todo esta sufriendo, y no haces nada para remediarlo, pero ¿qué podría hacer?.
La playa y la arena junto a Rem me volvía a dar aire para respirar y no pensar ayuda a continuar... Rem demostraba su amor con actos y yo lo sentía, su piel suave con olor a almendra cada vez me provocaba más adicción. En las mañanas ver su vitalidad, su energía que jamás se detenía me provocaba una sonrisa cada que la veía preparándose para salir a correr a la arena, era mucho más de lo que esperaba.
El verano no es mi estación favorita del año, pero la escena que tenía en frente simplemente era perfecta. Playa, arena, cabaña, poca gente, libertad y amor. Comprobé que hay mil facetas del amor, muchas no las viví con Fernanda y las estoy viviendo ahora con Rem, estoy segura que quedan muchas más por descubrir...
-¿puedo preguntarte algo?- me dijo Rem mientras estábamos tiradas en la arena
-por supuesto
-¿qué pasó en tu relación anterior que te hizo tanto daño?
Su pregunta me dejo en blanco por unos momentos
-¿por qué lo dices?
-porque me gustas mucho... y... y siento que tienes miedo a entregarte por completo
-si, es verdad eso del miedo, al principio de lo nuestro tenía mucho más miedo, pero tu querida, eres muy especial y de a poco me haz ido quitando esos temores
-pero no todos
-de a poco se avanza
-tu sabes que te quiero mucho ¿cierto?
-si lo sé, y yo también siento lo mismo por ti
-y... yo te quiero en el presente, no me importa tu pasado, pero si me da rabia que te hayan hecho sufrir
-no tengas rabia, lo importante es que ahora no estoy sufriendo
-créeme que sólo disfrutarás a mi lado
-demuéstralo
-ok, esta noche tendrás la mejor cena romántica de tu vida y luego nos veremos las caras en la habitación
-estoy expectante
-yo que tu me preparo
Cada día con Rem era una locura de juventud y experiencia, ella sólo vivía el día a día y me llevaba a su lado para vivirlo con ella. El brillo de sus ojos es siempre distinto pero con la misma intensidad. Simplemente estaba entre la espada y la pared, recordando a Fernanda, tratando de no sentir culpa y pena... mientras Rem me conquistaba con cada minuto que pasábamos juntas.
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Mi profesora, mi enamorada.
RomanceCuando intentas evitar lo inevitable las cosas se ponen feas. Esta es la historia de Emilia, todo iba bien en su primer año de universidad hasta que tiene un problema con Fernanda, una profesora renombrada. En el camino de buscar soluciones a este r...