Había pasado ya una semana desde que a Elena se hizo la biopsia y hoy tocaba recoger los resultados.
Llegaron al hospital Ángela, Elena y Samuel y fueron directamente a la consulta del médico. Cuando entraron el médico les estaba esperando les hizo sentarse y comenzó a hablar:
-Buenos días como te has seguido encontrando Elena.
-Pues he seguido regular algunos mareos, vómitos y algún que otro desmayo.
-Doctor tiene ya los resultados de mi sobrina.
-Si los tengo y (se queda callado...)
-Y que doctor, preguntó Samuel
-Como les iba diciendo que tengo los resultados y el tumor no es malo pero no se puede operar porque aún es muy chico.
-Eso quiere decir que me voy a morir.
-No vas a morirte Elena porque esperaremos a que crezca un poco y entonces procederemos a quitarlo.
-Tengo que vivir con eso en mi cabeza y sufriendo esos mareos.
-Si Elena pero te mandaremos unas pastillas para evitar los mareos.
Los tres salieron de la consulta y se marcharon hacia la casa donde les esperaba Lucía.
Lucía al escuchar la puerta se levantó deprisa y fue a su encuentro y nada más ver a Elena le preguntó:
-Dime sólo si es malo Elena.
-No es malo Lucía pero no me lo pueden quitar aún.
Lucía al escuchar que no era malo se tiro a abrazar a Elena.
-Yo lo sabía que no era grave y además bicho malo nunca muere no es así Elena (dijo Lucía riéndose)
-Tendrás Elena para mucho tiempo.
-Hola papá y mamá perdón por no deciros nada.
-Menos mal que se ha dado cuenta que estábamos aquí.
-Si me di cuenta sólo que me interesaba más saber lo que tiene Elena. Y ahora os tengo una noticia y que a papá no le va a gustar.
-¿Qué ha pasado Lucía? Preguntaron Samuel y Ángela a la vez.
-A ver no es grave pero se trata de Mónica y quitar esas caras que no le ha pasado nada ella está perfectamente ahora duerme como un bebé.
-Entonces que ha pasado, dijo Elena.
-Ella ha dicho su primera palabra.
-¿Ha dicho papá?
-Más quisiera tú tito su primera palabra ha sido mi nombre dijo Elena a que si Lucía.
-Jajajaja dijo mi nombre para eso me llevo más tiempo con ella que ustedes además erais muy pesados con enseñarle decir papá o Elena.
-Eso no vale yo soy su papá y quería que me nombrara primero.
-La vida es tan injusta y ahora te tocará esperar que te llame papá.El tiempo iba pasando y todo estaba volviendo a la normalidad. Tanto Elena como Lucía seguían con sus estudios. La pequeña Mónica seguía siendo la alegría de la casa y sus padres eran los más felices de todo porque habían formado esa linda familia.
Había llegado el cumpleaños de la pequeña y tanto Lucía como Elena estaban organizando la fiesta porque querían que todo saliese muy bien y así fue todos los presentes se lo pasaron muy bien.
Elena seguía teniendo mareos pero ya no eran tan constantes y seguía siendo la niña que siempre fue haciendo bromas y sobretodo siendo la niña cotilla que todos conocían.
Una tarde estaba en el parque con Lucía e intentó sonsacarle información:
-Lucía anda dime quien te gusta.
-No me gusta nadie ya lo sabes.
-Yo se que te gusta Lucas pero no me lo quieres decir.
-Ese presumido no me gusta.
-Pero tu a él si le gustas ¿deberías darle una oportunidad y conocerlo más?
-¿Yo darle una oportunidad? Y para que quiero yo hacer eso.
-Hija es para conocerlo.
-Ya lo conozco y tengo suficiente con lo poco que se de él.
-¿Cómo es él?
-Se cree el que más por ser guapo y estar bueno, es un arrogante porque cree saberlo todo, es un cobarde al meterse con los más débiles y encima se cree un creído porque según él todas tienen que ir detrás de él.
-Vaya veo que te has fijado en él.
-Y yo sólo iría detrás de él pero no para besarle los pies sino para darles unos buenos cosquis para que se le quitase las tonterías.
-Jajajaja eso no me lo perdería por nada del mundo.
Con todos ustedes Lucía Balboa jajajaja,dijo Elena a toda voz en el parque.
-Elena tú estas loca de remate mejor le digo a mamá que te vaya buscando plaza en un manicomio.
-Anda mira si allí viene el que suspira por ti. Esto se pone interesante.
-Ya lo que me faltaba por hoy encima que tengo que aguantar a una loca ahora viene el creído este pero sabes vamos a reírnos un rato a su costa.
-Oye lo de loca ¿no será por mi no?
-No lo decía por tu tía de Alemania jajaja no te digo y claro que es por ti hay otra persona loca cerca de mi.
-Me caes mal Lucía y no estoy loca sólo un poco cogida de la cabeza pero loca del todo no.
-Pero me quieres aunque te caiga mal ¿a que sí?
Elena iba a contestarle cuando Lucas se acercó y empezó a hablar:
-Hola chicas guapas.
-Hola Lucas, respondió Elena.
-Y tú Lucía no saludas a este chico guapo.
-Cuando vea a ese chico guapo entonces lo saludare pero como no está me tocará saludarte a ti. Hola Lucas, dijo Lucía con una sonrisa en la cara.
-Eso me ha dolido Lucía no te doy pena.
-Sinceramente no me la das.
Elena observaba sin decir ni pío y deseando reírse.
-Eres cruel conmigo guapa. Yo sólo quiero salir contigo y conocerte.
-Pues yo contigo no así que buscaste a otra tonta que te siga el rollo porque yo paso de ti.
-Me gustas tú y llegará el día que estés loquita por este cuerpecito.
-Pues yo soy tu y me voy sentando porque te vas a cansar de esperarme.
Además ya tengo quien me guste y perdóname decirte que ese no eres tú.
-¿Quién es ese tipo?
-Y a ti que te importa.
-Si me importa y mucho tu tienes que salir conmigo no con otro tonto.
-Aquí el único tonto que veo yo eres tú Lucas, sabes ya me aburriste y me cansé de ver tu cara fea así que me voy a otro sitio donde no haya gente como tú. ¿Te vienes Elena?
-Si me voy contigo.
Cuando estaba por irse Lucas la agarró del brazo y la beso cosa que cogió de sorpresa a Lucía pero cuando pudo reaccionar se separó de él y cuando vio que sonreía dijo:
-Besos mejores me han dado pero ahora me toca a mi darte algo que nunca olvidaras. ¿Puedes cerrar los ojos Lucas?
Este creyéndose que iba a ser besado cerró los ojos y Lucía con una sonrisa en la cara, le hizo una seña a Elena para que no dijese nada, entonces con toda tranquilidad le dio tal cachetada que hasta le dolió la mano y cuando este se llevó su mano a la cara le dijo Lucía:
-Vuelve a besarme sin mi permiso y te las verás de nuevo con mi mano imbécil.
Elena se estaba partiendo de risa viendo tal escena y le dijo a Lucas:
-Ay Luquitas yo soy tú y no me vuelvo a acercar más a Lucía sino te quieres quedar sin tu bella carita.
-Ja que graciosa Elena.
-Elena te vienes o te quedas con esté.
-Yo me voy contigo verás cuando se lo cuente a todos en la casa.
-Ni se te ocurra hacerlo porque nos castigará mi papá.
-Que va el tito Samuel se alegrará y todo ¿Qué te apuestas? Te tiene que doler la mano no Lucía.
-Si me duele un poco pero me he quedado agusto la verdad.
Elena y Lucía se fueron para su casa riéndose de lo que había sucedido. Mientras el pobre Lucas se había quedado sin poder hablar pero eso si con una buena cachetada en la cara. Cuando hubieron llegado a la casa fueron recibidas por una Mónica gateando y Lucía al verla se agachó y la cogió en brazos y le dijo:
-¿Dónde vas pequeña?
-Lucía no te va a entender.
-Mi niña si me entiende a que si
-Uia, dijo Mónica.
-Anda mira la enana a ver Mónica di Elena.
-Uia.
-No insistas Elena sólo dice Uia.
-Bueno entramos o nos vamos a quedar aquí hasta mañana y titos os tengo que contar algo.
-Elena ni se te ocurra contarles Elena.
-¿Contarnos el que Elena? Preguntó Samuel.
-Sólo es que a Lucía le han besado.
-¿Cómo que te han besado Lucía?, dijo Samuel alterado.
-Tú no podías mantener esa boca de cotilla cerrada Elena. Y papá no te pongas así porque se llevó lo suyo.
-A ver Lucía explícate porque no me estoy enterando de nada.
-Estábamos está cotilla y yo en el parque hablando de nuestras cosas y se acercó Lucas que es compañero nuestro y se puso a hablarnos pero como no me cae bien me iba a venir a casa y ese tonto me agarró del brazo y me beso, cuando me repuse con toda tranquilidad le dije que le iba a dar algo que nunca olvidaría y fue entonces que mire a Elena le sonríe y le pegue una cachetada a Lucas.
-Jajajaja esa es mi chica y muy bien hecho Lucía.
-Tendríais que ver la cara al pobre Lucas todo el cachete colorao y pensaba que Lucía le iba a besar y sin embargo se llevó otra cosa, dijo Elena riéndose.
-Ya no creo que se me acerqué más.
-Pobre Lucas y seguramente siga enamorado de Lucía.
-Lucía ¿le pegaste a uno que está enamorado de ti?,preguntó Ángela.
-Mamá que él este enamorado de mi no quiere decir que yo lo este de él y eso nunca pasará.
-Pues yo me alegro que le hayas cacheteado a ese niño yo le hubiese dado una patada en los huevos, dijo Samuel.
-Samuel como puedes decirle eso a las niñas.
-Descuida mamá que no lo haré pero como lo vuelva a hacer tomaré la idea de papá.
Todos se echaron a reír y siguieron como si nada hubiese pasado y se pusieron a jugar con la pequeña Mónica.
Las semanas pasaban y los exámenes finales se acercaban por eso Elena y Lucía dedicaban el tiempo a estudiar y eran contadas las ocasiones en las que salían y cuando lo hacían era para ir al parque con los compañeros de clase incluido Lucas aunque esté les hablaba poco sobretodo a Lucía. Entre todos estaban organizando la fiesta para celebrar que se acababan los exámenes y que pronto empezarían una nueva etapa.
Los exámenes habían acabado y ahora tocaba disfrutar de la fiesta y después las vacaciones de verano para cargar las pilas.
En aquella fiesta habría muchas sorpresas y encuentros inesperados pero aún Elena y Lucía tenían el permiso de Samuel que se negaba dejarlas ir sabiendo que allí habría chicos pero Elena era la encargada de convencerle y un día que lo vio de buen humor fue a hablar con él:
-¿Quién es el tito más guapo del mundo?
-Yo, pero de nada te va a valer tus piropos ya que mi respuesta es no.
-¿Pero si aún no te he preguntado nada?
-Yo se lo que vas pedirme ya que llevas días detrás mía y mi respuesta sigue siendo la misma.
-Oju tito que malaje eres y para lo que sepas ya no eres el tito más guapo del mundo ya que eres muy feo.
-Pero aunque sea feo o guapo tu me sigues queriendo pero la respuesta es no.
-Eso que te quiero habrá que verlo pero si nos deja ir a la fiesta te querré hasta el infinito y más allá.
-Yo se que me quieres pero creo que ya sabes la respuesta.
-Acabarás aceptando ya lo verás.
-Eso lo dudo princesa.
-Ya no soy tu princesa lo seré otra vez cuando aceptes que vayamos a esa fiesta mientras tanto para usted soy Elena y me voy porque me cansé de ver tu fea cara.
Elena se fue de mal humor con su tío porque aún no lo había convencido así que le dirá a Lucía que lo intente y sino ya verían que hacer pero a la fiesta iban si o si. Fue en busca de Lucía que estaba en su habitación leyendo y cuando está la vio entrar le dijo:
-Te ha dicho que no a que si.
- Tú papá es un cabezón dice que no siempre.
-Ya sabes que acabará aceptando y como es contigo cuando te pones pesada pidiéndole algo.
-Oye no soy pesada sólo quiero ir a la fiesta que para eso hemos estudiado mucho y aprobado todo con muy buena notas para que el soquete de tu papá se niegue. ¿Tú no quieres ir Lucía?
-Depende.
-¿Cómo que depende? Hija explícate que no te entiendo.
-Pues que torpe eres. Quiero ir por una parte para estar con todos porque posiblemente ya no nos veremos tanto como antes pero por otra no quiero encontrarme con Lucas porque desde ese día que le di la cachetada ha estado muy raro conmigo.
-Lucas no te hará nada y si lo hace ya sabes defenderte jajaja. ¿Por que no convences a tú papá?
-Y ¿Por qué crees que si se lo pido yo aceptará?
- Él no te niega nada.
-Bueno yo lo intentaré y si dice que no pues nos quedamos sin fiesta.
-Ja como diga que no me escapo y me voy a la fiesta.
-Ni se te ocurra hacer eso porque como se de cuenta estarás castigada hasta el día que te cases.
-Eso seguro y cualquiera lo convence con lo cabezón que es para quitarme el castigo.
-Bueno voy a ir a hablar con él deséame suerte.
Lucía salió de su habitación y fue en busca de su papá que estaba en el patio jugando con Mónica. Se acercó a él y empezó a hablarle:
-Papá tengo que hablar contigo puedes ahora o no.
-Claro que si princesa.
-¿Por qué no nos deja ir a la fiesta?
-Porque en esa fiesta habrá chicos y sobretodo ese tal Lucas.
-Pero sabes que esa no es razón para negarte ya que tanto en el instituto, en la universidad o en el trabajo que tengamos habrás chicos y te aseguro yo que no nos portaremos mal y tampoco vendremos tarde.
-Y Lucas que pasará con él.
-Ese no me preocupa papá desde lo ocurrido no me ha vuelto a hablar y ya sabes que me se defender.
-¿Prometes cuidar a la loca de Elena?
-Cuidaré de nuestra loca favorita.
-Oye que yo no estoy loca, dijo Elena que estaba escondida.
-Loca y cotilla hija lo tienes todo, le dijo Lucía riéndose.
-¿Ha aceptado el señor?
-¿El señor? Dijo Ángela que acababa de llegar.
-Ohh tita querida cuanto te he echado de menos. Aquí el señor presente es decir tu esposo no nos deja ir a la fiesta.
-¿Por eso le llamas señor? Y Samuel no habíamos quedado tú y yo el otro día que si irían a la fiesta que se lo habían ganado por sus buenas notas.
-Ah ¿Qué ya habías decidido dejarnos ir y me has tenido todos estos días detrás tuya para convencerte?
-Con ustedes dos no se puede sois dos niños chicos.
-Es el tito que le gusta hacerme rabiar.
-Pero ya vuelvo a ser tito y no señor así que vuelvo a ganar yo.El día de la fiesta había llegado y ambas ya estaban listas para irse pero antes de salir Samuel les dijo:
-Os quiero aquí como mucho a la una de la noche os estaré esperando despierto y nada de alcohol, tabaco o drogas y por supuesto nada de chicos.
-Pues si que nos prohíbes cosas tito ¿quieres que nos pongamos el hábito de monja y el cinturón de castidad?
-No sería mala idea esa tengo que conseguirme uno para cada una de vosotras tres.
-En serio papá y tú Elena no le des ideas hija cierra por una vez tu boca.
-No le hagáis caso a Samuel e iros ya y pasarlo muy bien pero con cuidado vale.
-Adiós tita adiós feíto, le dijo Elena sacándole la lengua.
-Adiós papá y adiós mamá. No os preocupéis yo la cuido.
-Deja esa cara Samuel no les pasará nada y que tal si nosotros montamos nuestra pequeña fiesta privada aprovechando que estas dos cotillas no están y Mónica duerme.
-Eso ya me va gustando más.
La pareja subió hacía su dormitorio para empezar su fiesta privada.
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Un Regalo Para Lucía
HumorLucía y Elena se conocieron a los siete años de edad y entre ellas nació una amistad verdadera que duraría para siempre ambas son la una para la otra pero dicha amistad se verá truncada por la muerte de Elena dejando a su bebé a cargo de Lucía. L...