Para Alex que su hija no quiera conocer a su verdadera madre era un alivio pero también conocía muy bien a esa mujer y sabía que no se iba a quedar quieta porque aunque la niña no le importarse en absoluto si le interesaba conseguir todo lo que él poseía pero no iba a consentirle que lastimase a la niña pero tampoco que se metiese en su relación con Lucía así que tenía que estar alerta porque de esa mujer se podría esperar todo.
Ya había pasado una semana desde que Paula supo que su madre verdadera estaba en la misma ciudad que ella y estaba convencida que solo había regresado para hacerle daño porque esa mujer no la quería así que estaba un poco pensativa cuando Lucía se le acerco y le dijo:
-¿En que piensas Paula?
-En algo que me dijo mi padre hace días.
-¿Te refieres a que tu madre esta aquí y pidió verte?
-Si en eso pensaba y sabes Lucía la única madre que quiero eres tu y esa señora no me interesa.
-Gracias por tus palabras y sabes que conmigo puedes contar siempre pase lo que pase pero ya me dijo tu papa que no lo querías ver ¿entonces porque estas tan pensativa?
-Porque presiento que esa mujer no se va a quedar quieta y solo me quiere hacer daño incluso te lo va a querer hacértelo a ti.
-Nadie te va a hacer daño porque nadie se lo va a permitir y yo sabré ponerla en su lugar.
-Podremos hacer algo para que esa mala mujer se marche de nuestras vidas para siempre.
-Y porque no mejor dejas de pensar en ella y me acompañas a casa de mis padres para recoger a Mónica.
-Mama es que no tengo ganas de salir prefiero quedarme aquí con la abuela.
-¿Estás segura cielo?
-Si además ¿ustedes no tardaréis mucho no?
-Solo recogerla y despedirme de mis papas que se van unos días de viaje además al pequeño comilón que tenemos allí dormido pronto le tocara comer y su baño ¿me ayudaréis las dos?
-Eso no se pregunta mama ya que sabes que me encanta ayudarte a bañarle.
-Entonces voy a hablar con tu abuela para decirle que te quedas aquí con ella.
-¿Te llevarás a mi hermano?
-No, se va a quedar aquí con ustedes.
-Que bien.
-Bueno entonces me voy portate bien princesa que pronto volveré.
Lucía se levantó y dándole un beso a la niña se marcho para volver pronto pero lo que no sabia Lucía que al marcharse iba a venir una visita que nadie allí esperaba y mucho menos querian.
Al poco después de irse Lucía mientras Carmen la abuela estaba en la cocina preparando la merienda de la niña tocaron el timbre así que Paula fue a abrir la puerta y se encontró a una señora que nada más verla no le dio buena espina por como la veía y le dijo:
-¿Qué desea señora?
-Vengo a ver a Alejandro dile que salga.
-Mi papa no esta.
La mujer miraba a Paula de arriba abajo y poniendo una sonrisa en su rostro le dijo:
-Pues entonces voy a esperarlo adentro ¿me dejas pasar?
-No, ya que usted es una extraña así que mejor se marcha de mi casa.
-Mira mocosa tú no eres nadie para decirme lo que tengo que hacer así que hazte un lado y no estorbes.
-Usted no va a entrar en mi casa y yo no soy ningún estorbo.
-Siempre lo fuiste y siempre lo serás así que dejame pasar de una vez.
Cuando iba a darle un empujón para entrar se abrió un poco más la puerta y apareció Carmen la abuela que escucho discutir a su nieta pero al ver a aquella mujer allí se le cambio la cara y le dijo:
-¿Tú que haces aquí?
-Vine a ver a su hijo por algo que solo nos interesa a nosotros dos y no voy a contárselo a una vieja metiche.
-Sigues siendo una maleducada como siempre pero por suerte mi hijo no esta y no creo que quiera verte.
-Mira señora o mejor dicho vieja déjeme pasar porque no me importara nada que todos los vecinos se enteren de ciertas cosas.
Carmen sabia que esa mujer seria capaz de todo por eso la dejo pasar y al cerrar la puerta le dijo:
-Tienes cinco minutos para irte.
-Me iré cuando yo quiera y no cuando tu digas.
Olga observaba todo a su alrededor y pensaba para si misma que todo esto tenía que ser suyo así que se volvió y dijo:
-Veo que le va muy bien a Alejandro y yo me lo estoy perdiendo pero pronto estaré aquí para disfrutar de todo lo que me merezco.
-Tú no eres nadie para disfrutar de lo que no te pertenece.
-Abuela ¿por qué dice esta mujer que se merece disfrutar de las cosas de mi papa?
-Anda vieja didle a esta mocosa quien soy.
-No llames a mi abuela así porque es una falta de respeto.
-Paula mejor que subas a tu habitación cielo.
-Vaya con que te llamas Paula nombre feo para una niña fea como tu y sabes niñita yo llamo a esa mujer como me de la gana.
-No soy fea más fea es usted que viene a mi casa a insultarnos.
-A mi no me insulte mocosa maleducada porque soy tu madre.
Paula al escuchar a esa mujer decir que era su madre se empezó a cabrear y le dijo:
-Usted no es mi madre porque mi madre va a llegar muy pronto y se encargará de echarla de aquí.
-Si soy tu madre mocosa y siempre lo seré así que nadie ocupara mi lugar.
-¿Tú lugar? No me hagas reír señora usted nunca tendrá ese lugar ya que me abandonaste asi que no venga diciendo ahora que eres mi madre.
-Si te abandone porque yo no quería que nacieras pero me obligaron porque si hubiese sido por mi tu nunca hubieses nacido y yo podría haberme quedado con tu padre para disfrutar de todo esto juntos.
-¿Cómo puedes decirle eso a la niña?
-Yo le hablo como me da la gana.
-Dejala abuela las palabras de esta mujer no me afectan pero sabes señora gracias por abandonarme y no querer ser mi madre porque el haber estado a su lado solo me hubiese convertido en alguien como usted.
-¿Y como soy según tu niñita?
-Pues usted es la peor persona que haya visto en mi vida, además es una mujer sin sentimientos que no le importa nadie solamente usted misma.
Alex estaba por llegar a la casa ya que prefería estar con su familia porque presentía que pronto se le iban a presentar problemas pero lo que no se imaginaba es que en su ausencia alguien habia llegado sin ser invitada. Al entrar pudo escuchar como su hija hablaba con alguien pero cuando entro en el salón vio a la persona que menos se esperaba allí y le dijo:
-¿Se puede saber que coño estas haciendo tu en mi casa?
Olga al ver que allí se encontraba Alex se sorprendió que le hablase así y le dijo:
-Vine a ver a mi hija y para hablar contigo.
-A ti aquí no se te ha perdido nada así que puedes irte por donde has venido Olga.
-Pero tengo que hablar contigo.
-Ya me has oído y sera mejor que te largues si no quieres que te eche yo además mi hija no quería verte ya que así me lo dijo el día que te apareciste en mi consulta.
-Has educado muy mal a esta niña ya que me ha faltado el respeto desde que llegue.
-Solo te ha dicho lo que realmente te mereces porque tu le has dicho cosas peores,dijo Carmen.
-No voy a permitirte que vengas a mi casa y ofendas a mi hija como a ti te de la gana así que me alegro que te haya puesto en tu lugar.
-Esto no se quedara así Alex y si me voy porque quedarme en esta casa con esta niñita no me gusta nada además no sabia que tuvieses otro hijo.
-Eso no es asunto tuyo y te vas largando ahora porque sino no respondo.
Olga salio dando un portazo pero pensando en su próxima jugada pero no pudo encontrarse con la tonta de Lucía y lo que menos se imaginaba es que tuviese un hijo con su Alex pero no por eso se iba a quedar quieta y ahora tenia que hablar con Lucas sobre el hijo que esos dos tenían en común y que le diese una buena explicación del porque no se lo había dicho.
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Un Regalo Para Lucía
HumorLucía y Elena se conocieron a los siete años de edad y entre ellas nació una amistad verdadera que duraría para siempre ambas son la una para la otra pero dicha amistad se verá truncada por la muerte de Elena dejando a su bebé a cargo de Lucía. L...