La hija de Scooter Braun {Justin Bieber y tu}

Capitulo cuarenta y nueve.

Observo por la ventana de mi habitación. La tormenta a comenzado llueve como nunca en la vida. Y siento que me corazón se rompe junto con los truenos que caen.




Hace una semana que no se nada de el. De Justin. Prometio que llamaría y no lo ha hecho. ¿Qué hice mal? No lo se.


-¿Estas ahí _______?.


Pregunta mi mejor amiga desde el otro lado de la línea.


-Si Kim, estoy aquí.



Me alejó de la ventana y me recuesto contra mi puerta.


-Por dios ______, no estés así. Aún no sabes que ha pasado. Tal vez el ha estado muy ocupado con el trabajo por eso no ha ido a verte.


-Ese es el problema, ah venido a mi casa a ver a mi padre y a mi no.



Si, como lo ven. Hace tres días Justin vino a casa a hablar con papa. No tengo idea de que, sólo se que los dos estaban muy contentos al salir del estudio. Me vio, y se fue de largo. ¿Cómo mierda quieren que me sienta?¿cómo? El vino, me vio y luego.... sólo me ignoró.


-Oh. -Sabía que Kimberly estaba sorprendida con lo que le acababa de decir. -Enserio dijo eso.



-Si. -Dije en un susurro.



Ella se quedo en silencio unos segundos. Pensando. Y estoy segura que en lo mismo que yo. Mierda como no me sí cuenta antes.


-El sólo quiere ser mi amigo. -Mencione sin pensarlo dos veces.



¿Cómo no me di cuenta antes?. Era más que obvio, tal vez sólo quería besarme por que si. O para jugar un rato conmigo. Pero ya se a de a ver arrepentido.




-Si, es pensado en eso.



-Me siento tan idiota. Enserio.




-Tranquila, le pasa a muchos. ahora sólo trata de ser su amiga, además _______ hay muchos chicos guapos haya.



-Lo se.





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Observamos televisión mi papa y yo. Mientras esperamos que la pizza llegue. Si pizza, por fin. Después de 5 días de comer sólo vegetales y comida casera. Nada de porquerías dijo mi mama cuando vio el refrigerador lleno de dulces y comida rápida.





-Ya quiero que llegue la pizza.




-Yo igual papa, a sido horrible comer puras verduras. -Dije asiendo mueca de asco.





Nos quedamos en silencio, otra vez. Observando como la película iba incrementando en violencia. Demonios, nunca pensé que los indestructibles dos pudiera ser más violenta que la uno. Maldito Silverster y sus ganas de patear culos.




Un fuerte rayo se escucho seguido del timbre de la entrada de la casa. Me levanté y le dije a mi mama que yo me encargaba. Que el se fuera a bañar mientras yo arreglaba todo y el con gusto acepto.




Camine por el pasillo y acelere el paso cuando el timbre fue más constante.




-¡Voy!.





Tome la perilla de la puerta y la gire. Alce la mirada y me encontré con un Justin con sus mejor sonrisa. Se veía tan hermoso. Con sus ojos color miel brillando por algo que yo no sabía.




-Hola.




El me saludo y sonrió dejando ver uno de sis hoyuelos. Lo mire a los ojos, y me decidí a responde lo que creía más propio.




-Si buscas a mi padre, el se acaba de meter a bañar.





El me miro con el sueño fruncido.




-No busco a tu papa. -Se acercó a mi y me miro serio. -Necesitamos hablar.




Yo sólo asentí y cerré la puerta de la casa. Camine hasta una de las bancas del enorme jardín.




-Dime.





El se sentó a mi lado y se toco su cabello. como sí estuviera nervioso.




-Necesito explicarte por que no he venido a verte, y por que no te he llamado.





¿Qué no ha venido? Por dios, a venido dos veces en esta semana y me ha pasado de largo. No necesito que el me lo diga.




-Has venido. -Respondo viendo con el alza la mirada. -Que no le hayas querido ver es muy diferente. Ya comprendo lo que pasa.




El me mira sorprendido: realmente lo esta.




-¿de qué carajos hablas __________?.





Alzo la mirada más. Lo miro a los ojos a punto de llorar. Un estruendoso rayo se escucha muy cerca de nosotros. Pero lo ignoramos. Seguido de el se nota como millones de gotas de agua caen sobre nosotros.





-Ya se que no quieres nada conmigo. -Dejo salir por fin. -No tienes que ignorarme toda una semana, bastaba con decírmelo y te aseguro que te dejaría en paz. -Mis ojos no pudieron retener las lágrimas y lloro. Como una niña. Y agradezco a dios por la lluvia que las cubre. -No tienes que decirlo ya, yo ya lo entendí......




Me levanto de la banca y camino hacia la entrada de la casa. Siento que el me toma del brazo y me voltea.




-¿Piensas que te he ignorado?. -Me pregunta y yo asiento. -¿Qué no quiero nada serio contigo?.




Yo bajo la mirada al escuchar eso. Si, eso es lo que siento. Me digo a mi misma. El me mira, me toma de la mejilla. Y me sorprende lo que viene a continuación. Me besa. Si, me besa. Lento. Dulce. Y sin apuros.





Siento mi cuerpo desvanecerse con ese acto. Me tomo fuerte de sus hombros. No dudo en seguirle el beso. Se siente tan bien. Me siento bien.




La lluvia cae sobre nosotros. Me siento especial. Como en una película romántica. Como las que le gustan a Kimberly. La lluvia sigue cayendo y nosotros estábamos empapados.




Nos separamos por falta de aire. El pone su frente sobre la mía. Aún tengo los ojos cerrados. Me estoy deleitando de las sensaciones que el me produce. Abro los ojos lentamente. Y encuentro a Justin mirándome. Con los ojos brillosos.




-Yo no te estaba ignorando. -Me dice en un susurro. Y yo dejo que el hable. -Yo estaba tratando de hacer algo especial para ti. Toda la semana estuve organizando la mejor cena para ti. Quería que fuera especial. Yo .... Yo quería pedirte hoy por la noche que fueras mi novia.





Sus palabras resuenan en mi mente..... "Yo quería pedirte hoy por la noche que fueras mi novia". Y lloro, lloro con ganas. Que estúpida fui. Y sigo llorando.. de la felicidad.




-¿Enserio?. -Pregunto y el asiente. -Oh que estúpida he sido.




El me abraza y sigo llorando con ganas.




-Hey no llores. No eres estúpida. Sólo un poco desconfiada. ¿Sabes cuanto me tarde planeando todo?. -Yo sólo río por eso. -Y pues tu de desesperada no me dejaste decírtelo bien. Pero aprovechando que ya estamos así..... -Me separa de su cuerpo y dice.- ________,¿quieres ser mi novia?.



Yo sólo sonrió. De esas sonrisas que llegan a los ojos.



-Si Justin. Si quiero ser tu novia. -Grito con niña chiquita, mientras me abalanzo sobre el. Y Justin sólo atina a cargarme y plantarme un beso.