Son Mi Luz

¡Te dije que no podías estar aquí!

JIMIN POV 

¿______ yéndose como si nada luego de nuestro concierto, y sin siquiera despedirse?

Hah, hah. No lo creo. No es algo que ella haría... bueno, quizás un poco, pero no ese día.

Algo no calzaba en las palabras de nuestro hyung, por eso decidí averiguar por mi mismo qué era lo que verdaderamente sucedía.

Al día siguiente luego de que había "desaparecido" -o sea, hoy-  intentamos comunicarnos con ella, pero no había pista alguna de su paradero. Tuve que entablar una conversación con Lee Hyun durante cinco minutos sin partirle la cara. La verdad me impresioné a mi mismo por mi tolerancia.

Pero de vuelta al asunto. No había ni una sola pista de _______ y comenzaba a preocuparme, no era normal que alguien desapareciera de la nada.

Nuestro hyung nos dijo que debíamos volver al trabajo. Que no debíamos preocuparnos ya que era una mujer "adulta", que nos preocupáramos más de nuestro trabajo ya que debíamos dar las últimas prestaciones, luego prepararnos para nuestro nuevo comeback, pero no podía presentarme sin saber que ella estuviera bien, no podía.

Por eso, fingí estar enfermo colocando una toalla prácticamente en llamas bajo mi almohada y pintando mi rostro, dándole un toque pálido parecido al de Yoongi hyung. No veía otra forma de librarme por un momento de mi manager sin que no me estuviera fastidiando.

Al salir del departamento, mi objetivo principal era el estadio y para ser más precisos; las cámaras de seguridad.

Sabía que costaría convencer a los guardias, pero no me iría con los brazos cruzados.

JM: Buenos días... -salude de forma educada haciendo una reverencia de noventa grados ganándome una amplia sonrisa de parte del jefe del departamento de seguridad-.

Al ingresar al su oficina y conversar sobre la situación en la que estaba, su sonrisa lentamente se fue borrando a una expresión más seria provocando un temor dentro de mi al esperar sus siguientes .

"No está permitido, lo siento."

Esas fueron sus palabras antes de intentar echarme fuera de su oficina, pero algo extraño había sucedido. Se había detenido luego de notar que sus compañeros de trabajo se retiraban al ver que ya era hora del almuerzo y nuevamente me tiró dentro su oficina y me obligó a sentarme en su silla giratoria.

XX: Escúchame claramente, ¿entendiste? -se encontraba de pie frente a mi apuntándome con su indice de forma autoritaria. Al instante asentí y me senté con mi espalda recta listo a escuchar sus siguientes palabras-. Tienes cinco minutos para ingresar a la oficina y salir de ahí. No debe haber rastro alguno de tu presencia en aquella oficina, ¿entendido? La grabación del día de ayer esta a un lado del monitor, solo debes reproducirla y buscar la hora exacta donde tu amiga desapareció o salió. No lo sé.

En el transcurso de sus instrucciones, mi sonrisa se iba ensanchando cada vez más provocando que lentamente mis ojos se transformarán en una línea recta. Me levanté de la silla y lo abracé con todas mis fuerzas agradeciendole cada dos segundos.

Al caminar hasta la sala de seguridad, miró hacia ambos lados y abrió rápidamente la puerta donde esperaba obtener alguna respuesta. Me dio una última mirada y cerró la puerta dejándome completamente solo dentro de aquel oscuro lugar.

Encendí la linterna de mi celular para no capturar demasiada atención y me senté frente a los cuatro monitores que se encontraban encendidos. Busque la grabación y comencé mi búsqueda. 

Nada, absolutamente nada. Revise veinte veces aquella cinta, pero nada, no había nada sobre _____, sólo las fans que veía en los fanmeeting. 

Ya se me estaba agotando la paciencia y en un ataque de desesperación, comencé a reproducir los demás vídeos. Minutos y horas pasaban en segundos al apretar el botón del acelerador, buscando y buscando hasta que... 

JM: Bingo... -sonreí victorioso al lograr visualizar la silueta de ____ y comencé a seguirla por todo el video hasta encontrar algo que me llamó la atención-. 

Era ella frente a unas chicas y por lo que sabía de ella, era que no tenía amigas... suena muy triste, pero era la verdad. Salté de mi asiento por el susto al ver que otra chica se acercaba desde atrás y golpeo fuertemente su nuca provocando que cayera al suelo inconsciente. Rápidamente la tomaron y salieron del estadio. 

¿¡Cómo nadie vio eso!?, ¿¡dónde demonios se encontraban los guardias de seguridad en ese momento!? 

¡Sabia que había algo mal!

Luego de guardar el video en mi celular, corrí llamando a todo pulmón al jefe de seguridad olvidando que de hace minutos me había dicho que mi presencia no debía ser notada por los demás. 

JS: ¡Te dije que no podías estar aquí! -exclamó exaltado en un susurró abriendo par a par sus ojos-.

JM: Lo sé, pero debe ver esto. -desbloqueó su celular y reprodujo el video para luego colocar la pantalla frente a él-.

Su expresión se mantenía neutral pero mientras que el video avanzaba, su rostro comenzaba a tornarse serio y sorprendido. Al instante quitó el objeto tecnológico de mis manos y dio un fuerte grito llamando a todo el personal de seguridad. 

FIN JIMIN POV

[...]

Luego de que se iniciara la alerta de la desaparición de _________, la policía, la compañía y los chicos comenzaron a buscarla.

Estaban todos temerosos, suplicando a los cuatro vientos que no le hayan hecho nada aquellas personas, esperando a que solo fuera una broma de mal gusto.

JN: ¿Han sabido algo de ella? -se levantó rápidamente del sillón personal al ver a sus dongsaeng entrar apresurados por la puerta principal-.

JK: Nada de nada. Revisamos casi todo Seúl, y no hay ni un rastro de ella... ¿están seguros que está aquí? -su mirada demostraba desesperación con una combinación de tristeza-. Ts... si sólo pudiéramos rastrear su celular... -musito para él dejándose caer sobre el gran sofá a un lado de Jimin-.

Al escuchar sus palabras abrió sus ojos, pensando en que su dongsaeng realmente era un genio.

¿Cómo no se le había ocurrido antes? Ahora todos los teléfonos celulares tienen un rastreador, en causa de robo.

Se levantó del sofa dejando al menor atrás, confundiendo a sus demás amigos que se encontraban en la sala y salió rápidamente del apartamento, marcando por millonésima vez el número de _________.

JM: Pronto te encontraré... no te preocupes. 

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