Capítulo 43: Deberíamos Terminar

19.3K 1.4K 400
                                    

Sentado en una fría y helada banca del parque que está a cuatro calles de mi casa, dejo que mis pensamientos fluyan por mi mente, no camina nadie cerca de mí, el frío que hace es horrible. Saco el teléfono de mi bolsillo, Blake ya debería estar aquí conmigo, le dije que el comentario de su Padre para advertirle que él ya sabía todo.

Tratando de que el frío no me congele espero otro par de minutos, cuando mis labios se comienzan a poner blancos por el hielo y susurro insultos hacia Blake por su tardanza, su silueta aparece como un fantasma entre la niebla.

—Finalmente —digo agotado

—Lo siento —saluda él —sentía que mi Padre me estaba vigilando, me di la vuelta por la manzana para comprobarlo.

—¿Y? ¿Lo viste?

—No, se quedó en casa —suspira Blake, su rostro está pálido y débil por el cruel y feroz viento que corre.

—¿Tienes frío? —pregunto, noto que no deja de mover la pierna izquierda —No —responde de inmediato —¿Tú estás bien?

—Si.

—¿Qué más te dijo mi Papá hoy? —pregunta Blake con una voz débil.

—Solo me dijo que sabía que yo dormí en su casa anoche, ¿Cómo es que él lo sabe?

—Seguro revisó las cámaras de seguridad ¿Le respondiste algo?

—Solo le dije que lo sentía, debí pedirle permiso para aquello, obviamente intentando no caerme del susto, no quiero que te haga daño o que...

—Tranquilo, solo puede ver lo que ocurre desde la puerta hacia afuera, adentro no hay nada, de seguro cree que eres mi amigo, Milton y Javier han dormido un par de veces en mi casa —eso me quita un pequeño peso de encima, el que el Padre de Blake no sepa nada sobre lo nuestro me deja tranquilo y sereno, pero aún no dejo de pensar en que tal vez estuvimos bastante cerca de ser descubiertos, aquello no debe pasar otra vez —¿Tú crees que deberíamos terminar? —pregunta Blake con una mueca en su rostro, su inseguridad me deja asustado y triste a la vez, no puedo soportar pensar en alguna respuesta para aquello.

—¿Por qué preguntas eso?

—Porque estás muy asustado, noto que...

—Estoy asustado por ti, no quiero que ese imbécil te vuelva a tocar.

—En algún momento lo sabrá, creo que es mejor prepararme —el comienza a acariciar mi mejilla mientras yo cierro los ojos.

Caminamos lentamente, hablamos sobre cualquier cosa, y cuando llega el momento de despedirse, él me deja hasta la puerta de la casa, me sonríe con confianza mientras nuevamente acerca su rostro para besarme. Deseando sentir sus labios por última vez esta noche le permito que me bese, entonces la puerta de la casa se abre y Alberto nos hace sobresaltar a ambos.

—Alb... Papá —balbuceo.

—Señor Kinnes —responde Blake —¿Cómo está? —Blake tratando de ignorar la situación incómoda en la que estamos le acerca su palma a Papá para saludarlo, mi Padre lo mira y le regresa el saludo.

—No tan bien como ustedes al parecer —dice —¿Ya se despidieron? —Aun no me besa, pero creo que ya sería raro.

—Si —agrego con tristeza —Nos vemos mañana.

—Por supuesto, te amo —no puedo responderle, Papá me está mirando y me siento como un niño pequeño, entro rápido avergonzado a casa, siento el calor de la calefacción, tengo que admitirlo, me gusta aquello. Me acerco a la escalera para comenzar a subir a mi habitación, pero Alberto me detiene.

Tú Eres el PrimeroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora