Mentiras y Secretos

Alegría Interrumpida

-¿Dónde está?- preguntó Rosalie en cuanto llegamos a Forks. Al ver a Anthony sentado en la carreola que llevaba, corrió hacia él para cargarlo y abrazarlo, verla actuar así me recordaba mucho a Alice, pero no me sorprendía en lo más mínimo porque su debilidad siempre habían sido los bebes.

-¿Cómo está mi sobrino favorito?-

-Rose, él es tu único sobrino- comenté mientras reía y ella solo hizo como si no hubiera escuchado nada, aunque note una leve sonrisa asomarse por la comisura de sus labios.

-Me alegro que llegaran con bien- nos recibió Esme mientras entrabamos a la casa y me abrazo –Bella cariño, te ves muy bien, ni pareciera que estuviste embarazada-

-Es cierto Bells, ya no pareces una bola con patas-

-¡Emmett!- lo regañaron todos y yo solo hice una mueca de disgusto porque sabía que tenía razón, embarazada lucía como ballena.

-¿Qué?-

-Amor, eres un insensible- comentó Rose mientras le daba una leve palmada en su brazo.

-¿Insensible? Yo solo digo la verdad- paso un brazo por su cintura y agregó- Pero así me quieres ¿no es así?- se sonrieron y se besaron por un momento hasta que Edward los interrumpió aclarándose la garganta.

-Pues entonces tengo que decirte que estas bastante ciego cuñado, porque la verdad es que Bella lucía realmente hermosa embarazada de Anthony- tomo mi mano para acercarme a él y beso mi frente.

- A mí me parece que el ciego es otro- susurró Emmett haciéndonos reír a todos en la sala.

-Bueno cambiando de tema-agregó Esme - ¿Ya están listos para el gran día?- escucharla mencionar la boda aún me causaba mucho nerviosismo, más ahora que la fecha estaba tan cerca, pero al voltear a ver a Edward y ver el brillo en sus ojos por la mención del evento, supe que no tenía nada que temer, estábamos destinados a estar juntos ahora y siempre.

-Estamos más que listos mamá- contestó con tono de orgullo en su voz y no pude evitar sonreír.

-Alice va a llegar el viernes con las cosas que faltan- comenté y Esme pareció entusiasmada por la noticia.

- Excelente, porque hay unos detalles que quiero hablar con ella-

Después de eso, nos fuimos a comer y Edward y yo decidimos ir a visitar a Charlie. Era bastante interesante verlo interactuar con Anthony, ya que generalmente era alguien muy serio y que no mostraba mucho afecto, pero en cuanto veía a su nieto se transformaba en otra persona. Mi hijo era el único que lograba derribar por completo las barreras de Charlie.

-¿Y qué piensan hacer cuando se gradúen de la Universidad? ¿Se van a regresar a Forks?- preguntó mi padre con interés mientras jugaba con Anthony que estaba sentado en su regazo. Yo sabía que le interesaba saber la cercanía que tendría con su nieto después de que saliéramos de la Universidad.

-Todavía no sabemos papá, pero estamos considerado irnos a vivir a Seattle para estar lo más cerca posible de la compañía Masen- le dije con sinceridad.

-Cierto, olvidaba que Edward ya es todo un empresario- miró a mi novio con mucha incredulidad.

-La verdad es que no Charlie, aun me falta mucho por aprender para poder considerarme uno-

-Yo pienso que el hecho de ser dueño de una empresa ya es un gran avance, no muchos logran eso ni aunque trabajen toda su vida- se rió levemente ante su propio comentario.

-En eso le doy la razón, soy muy afortunado- acarició mi mano y me sonrió con ternura. De repente, su celular comenzó a sonar y al notar que el número era desconocido, se disculpo para salir de la sala y poder atender la llamada.