Capitulo 34
-Jajaja si, ese chico es todo un caso -dijo mi querida amiga Jessy.
Estaba en el almuerzo. La verdad era que Domingo se me pasó muy rápido y bueno, ahora estoy en el descanso.
Mis amigas hablaban de Louis o de Niall. La verdad no lo sabía, porque después de contarles toda mi locura desde la fiesta, hasta la pelea de Louis y yo, han conversado pero no me estaban incluyendo. Parecía que me darían un consejo, pero no estaba segura si me lo darían.
Yo seguía en el mismo momento incómodo hasta que escuché una voz un poco particular.
-¡Harper! -gritó Eleanor con su voz chillona.
Yo sólo la voltee a ver y se dirigía a paso muy decidido hacia mi mesa. Mis amigas sólo dejaron de platicar y observaban la escena serias.
-Tú... -dijo señalando me y creo que todos los chicos de la cafetería estaban observando la escena. -¡Me quitaste mi novio! -dijo a lo que yo sólo fruncí el ceño -¿A que te refieres? -dije confundida. En verdad no lo sabía. -Y, ¿Todavía te haces? ¿Te gusta verme sufrir? -dijo llevándose una mano a su pecho. Ahora que me daba cuenta y la tenía más de cerca, pude ver que tenía un poco de delineador corrido. Había estado llorando. -En verdad, no creas que es payasada mía, no se de que rayos me hablas -dije parando me y tratando de que se tranquilizara. No era que le tuviera miedo, pero no la quería lastimar si se atrevía a golpearme. -Desgraciada -dijo y me soltó una cachetada. -Ahora si, darte por muerta-dije antes de abalanzarme contra ella y empezar a golpearla. Sólo pude escuchar un "Oh Dios mío" de mis amigas y un "pelea" de todos.
Yo sólo la golpeaba y ella trataba de defenderse. Mi hermano me había enseñado a defenderme en casos de estos. Ya sé que es irónico que me haya enseñado eso, cuando es menor que yo, pero en serio me dio buenas clases. Después de golpearla un poco la empece a arañar. Ella me estaba arañando con sus uñas de bruja, así que... ¿Por qué yo no arañarla con mis uñas de gente normal?
De repente sentí unos fuertes brazos tomando me y tratando de separarme de Eleanor. Lo logró se quien fuera. Me había separado de Eleanor y yo sólo trataba de zafarme para poder darle su merecido.
-Ya Sarah, ya le diste todo lo que le tenías que dar, tranquila -sentí la voz de Louis susurrando me al oído. Su voz era reconfortante. Era dulce, pasiva y lo mejor de todo: tranquilizaba.
-¡Eso te pasa por golpearme zorra loca del demonio! -dije y sólo se escuchó un "Uhhhhh" por parte de todos.
-Ya Sarah, ahora sí, tranquila -dijo soltando me ya que había parado de patalear.
-Ok... Pero que conste que ella se lo buscó -dije quitando me los pelos que tenía en la cara.
-Sí, lo tenía bien merecido -dijo risueño. Amaba su sonrisa era como la luz al final del túnel. Era un rayo de esperanza cuando todo estaba perdido, era...
-Harper, Calder ¡A mi oficina! ¡Ahora! -dijo el director llamando nos por nuestro apellido e interrumpiendo mis pensamientos.
-Luego regreso -le dije a Louis.
-Si... -dijo suspirando.
Tomé mis cosas y les dije a mis amigas que regresaría después, ellas sólo me desearon buena suerte.
Caminé por los pasillos solitarios por el receso y me dirigí a la oficina del director. Mientras iba pasando por los salones, traté de prepararme mentalmente para lo que venía. Sabía que Eleanor haría de todo para salvarse de ser castigada. Y que tal vez me echen la culpa a mi, por dejarla como estaba. Así que cuando eso pasara podría reaccionar menos agresiva.
