Transcurrió el resto de la semana sin noticia alguna. Probablemente era un conquistador nato y no le interesaba nada mi compañía. Continué con mi trabajo hasta que la señora Johnson volvió de visitar a su familia.
- Muchas gracias por todo Lara, has hecho una gestión impresionante. No he visto nada igual en toda mi carrera.
Me sentía orgullosa de que valoraran tanto mi trabajo. Me costó mucho empezar en él y era un mundo que me apasionaba. Había nacido para esto.
El viernes por la tarde había quedado con Cami para tomar algo y ponernos al día de nuestras cosas. Mientras paseábamos camino a la cafetería, le detallé mis encuentros con Elijah y ella me contó que también andaba un poco enamorada de Klaus. Casualmente hablando de ello, nos lo cruzamos al girar la esquina a nuestro lado.
- ¡Hola chicas! ¡Hola Cami! Estaba a punto de llamarte – Cami se sonrojó. – Esta noche celebramos una fiesta en mi casa. Es el cumpleaños de mi hermana Rebekah, así que espero veros por allí a las dos. – Levantó las cejas pícaro y continuó su camino.
¿Una fiesta? ¿En casa de los Mikaelson? ¿Estarían Elijah y Kol por allí? Tenía el presentimiento de que no era buena idea ir.
- Vamos Lara. No puedes dejarme ir sola. Hazlo por mi.- me rogó.
Desde la cafetería nos fuimos directas al apartamento de Cami, porque yo no tenía nada que ponerme para ese tipo de fiestas. Cami me dejó prestado un vestido rojo precioso y nos arreglamos juntas allí. Me divertí un montón. Estaba encantada de haber hecho una amiga como ella en New Orleans y ya la sentía como si perteneciera a mi familia.
Cogimos un taxi hasta llegar a la casa colonial de los Mikaelson. Nos dieron una máscara al entrar y pasamos al espectacular patio, que tenían adornado para la ocasión. Aquello era increíble, una fiesta por todo lo alto. Cami y yo fuimos a servirnos unas bebidas y apareció Klaus detrás de nosotras.
- Me alegro que os hayáis animado a venir. Cami, ¿me concedes este baile?
Cami me miró angustiada. No quería dejarme allí sola.
- Vamos ve, no te preocupes. Tengo mucha gente para conocer. – La animé y fue a bailar con Klaus.
Aproveché para acabar de servirme la bebida cuando un alguien empieza a rodearme la cintura y a susurrarme al oído.
- Hola preciosa. No sabía que vendrías por aquí.
Me giré y era Kol. Iba muy elegante con una camisa blanca, chaqueta y pajarita. De repente llegan otras dos chicas y se colocan a su lado. Kol levanta uno de sus brazos con la copa y me dice vacilón:
- Si te apetece, arriba hay una fiesta para los vips. Por supuesto estás más que invitada a venir.
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Chica nueva en New Orleans (Elijah Mikaelson's FanFic)
FanfictionLlevaba tiempo queriendo cambiar mi rumbo. Estaba cansada de la rutina de siempre, de los mismos problemas y la misma gente. Por eso, cuando me concedieron la beca para trabajar en New Orleans, para mí fue una auténtica lotería. En dos días salía...