Por Siempre Tú "Más Allá Del Amor"

Capítulo 9: Pérdidas y Progresos

Desconocido: Buenas, ¿el señor Carvajal?

Roberto: Sí, él habla.

Desconocido: Me temo informarle que la señora María ha muerto en un accidente de auto.

Roberto: ¿Qué? No, no puede ser.

Desconocido: Lo sentimos mucho, y...

Antes de que terminara de hablar, cerré la llamada y no logré hacer otra cosa que llorar... Mi nana había muerto, la única que se procupaba por mi.

Alicia: (Sin querer escuché la conversación. Entré a su cuarto y lo abracé; él se quedó dormido a mi lado.)

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Pasó un mes y poco a poco iba superando el no tener a María conmigo. Sofia se mudó otra vez a la casa, no se atrevía a regresar desde la pelea por Alicia. Aún tengo problemas por sus actitudes contra Alicia; odio escuchar cómo Sofia la insulta.

Sofia: ¡Eres una estúpida! Estos papeles no van en ese orden. (Tiré los papeles al suelo y la obligué a ordenarlos de nuevo.)

Roberto: Otra vez esta mujer atrasando el trabajo –pensé–. ¿Ahora qué ocurre?

Sofia: ¡¡¡Amor!!! Esta estúpida no hace bien las cosas, que yo sepa los papeles tienen que ir por color.

Roberto: ¿Pero estaban arreglados cronológicamente?

Alicia: Mire, señor Carvajal, yo los había ordenado como usted me dijo, pero ella quiere que vayan por color. No sé qué hacer, la verdad, me tomó dos horas acomodarlos.

Roberto: Dejen el tiempo de juego, que esta reunión es muy importante. ¿Ali, te sabes el tema completo de la reunión?

Alicia: (Awww, me dijo Ali... – estúpida, te está hablando, reacciona, luego celebras.) Sí, señor, es sobre las exportaciones a Milán.

Roberto: Bueno, la reunión es en 5 minutos y estamos atrasados... Iremos a la reunión y tú te expresarás con ellos, ¿ok?

Alicia: Está bien, señor, pero ¿qué hago con los papeles?

Roberto: Deja eso ahí, que Sofia los recoja, fue ella la que los tiró, ¿verdad?

Alicia: Sí, señor, está bien. (Salí y Sofia se quedó con los papeles.)

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Manejé lo más rápido posible a la empresa.

Roberto: Ali, mira, tienes que exponer. Ellos ya tienen el trabajo, solo necesitan escucharlo, ¿bien?

Llegamos y había muchos empresarios de distintos países.

Alicia: (Empecé a explicar.) Muy buenos días, señores. La reunión de hoy es para tratar los problemas y ventajas de trabajar con los inversionistas de Milán. Aunque no hay problemas, tiene sus contras...

Roberto: (Veía cómo Alicia explicaba, lo hacía tan natural, como si hubiera nacido para esto.) Al terminar, todos nos paramos y aplaudimos. Cuando todos se fueron, me acerqué a ella y la abracé en agradecimiento por el gran trabajo que realizó.

Alicia: Dios, su perfume me encantaba. No iba a desaprovechar esta oportunidad, así que lo abracé más fuerte. En ese momento solo éramos él y yo. Nos quedamos así por minutos, luego llegó la de limpieza y nos pidió disculpas por interrumpir.

Roberto: No, no se preocupe, ya nos iremos.

Mientras manejaba a casa, en todo el camino no dejaba de ver a mi sexy jefe, su manera de manejar, su porte, su estilo, todo era perfecto en él... excepto su estúpida novia. Llegamos y ella se tiró encima como un mono.

Roberto: (Al llegar, Sofia se me sube y me empieza a besar; le sigo el beso y luego recuerdo lo que hizo.) No creas que olvidé la pelea de esta mañana. (La bajé y me fui a mi oficina.)

Alicia: (El no le siguió el beso, awww. Bueno, ya estúpida, a soñar en tu tiempo libre. Sigo a Rober, sí, así le digo yo... ok, no, pero así me gustaría decirle.) Bueno, el caso es que llegué a su oficina. Disculpe, señor, ¿necesita algo más?

Roberto: ¡Sí! Que por favor no me digas señor. En realidad, ya trabajaste excelente hoy, te daré el resto del día libre. Puedes tomar el auto que quieras y puedes comprar lo que quieras, tu tarjeta de crédito está en tu cuarto y ya está tu primer pago depositado.

Alicia: Gracias. Bueno, le voy a tomar la palabra. Voy a ir a comprarle unas cosas a la señora de mi antiguo departamento, sabe, yo le debo mucho.

Roberto: Ok.

Alicia: Bueno, con permiso. A otra cosa, yo voy en taxi. Nunca he manejado un coche como los suyos. Hasta luego. (Cerré la puerta y fui a comprar las cosas. Cuando volví me encontré con la peor escena: a Roberto teniendo sexo con su novia en la sala. Pasé lo más rápido posible y me encerré en mi cuarto.)

Roberto: No me pregunten cómo quedé teniendo sexo porque no sé... Solo recuerdo que estaba viendo Disney y llega Sofia con ropa interior de encaje, comenzó a hacer un baile sensual. Después de horas veo que una sombra pasa corriendo a los cuartos. Sofia quería seguir, pero ya era incómodo... así que lo dejé ahí y me fui a mi cuarto a jugar PlayStation.

En la noche me levanté, ya que no podía dormir, y escuché unos llantos. Era Alicia y no sé por qué, pero me daba vergüenza verla, porque me imagino que ella me vio con Sofia.

El día de mañana era libre para ella.

Me levanté temprano a hacer ejercicios en la sala, estaba todo sudado.

Alicia: (No le voy a hablar, no lo voy a hacer. Mejor voy a ver una película en la sala.) Fui y vi la cosa más sexy de todo el mundo: vi a Roberto todo sudado, solo tenía un pantalón corto, se le veía el abdomen, solo lo ignoré y me dispuse a leer mi libro.

Roberto: ¿Alicia, me puedes ayudar en un ejercicio?