4 meses después.
Las cosas entre nosotros seguían igual; hablábamos (a veces sólo 5 palabras por día), incluso llegábamos a hablar por teléfono o videollamada.
Un día lo vi, y le sonreí.Pero 4 meses después, oh...
Hacen demasiada diferencia.Quitó su foto de perfil conmigo. Lo intuí desde ese momento. Cosas de mujeres. Histeria, creo que le llaman.
Traté de no darle importancia, pero hice mal supongo.
Esa tarde Marisol me envío una foto. De él. Con alguien más.No estaban haciendo nada, sólo estaban juntos (muy juntos), pero me volví loca. Investigué todo sobre la chica.
Ni siquiera puedo decir su nombre, me siento ofendida aún.No se lo mencioné a Edgar, obviamente no porque no tenía el derecho ni las ganas de hablar de eso con él. Al parecer, sí tenía; porque esa tarde Valeria llegó a mi casa, y conversamos mucho.
Me habló de su nuevo/viejo prospecto, me habló de Omar, bla bla bla.
Y le solté lo de Edgar. No estaba muy segura de si hablarle de él debido a que ellos también son amigos, y muy unidos.Lo único que no puedo creer es que ella ya lo sabía. Ella los vió, juntos. Y no me dijo.
No quiero sonar estúpida ni nada, pero yo fui su amiga primero, yo soy a quién acude, o debería acudir. Es mi amiga, no me puedo quedar sin ella también.Pero al fin y al cabo terminó diciéndomelo.
Esa tarde recordé que hace pocos días habíamos comprado mis amigas y yo una botella de tequila para tomarla, pero ese día no la tomamos; al final decidí abrirla para Valeria y para mí.
Desde ahí todo se fue al carajo.
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Causa y efecto
Teen FictionA lo largo de tu vida te vas a topar con millones y millones de personas. De las cuales, a lo mejor 10 son las más importantes. ¿Por qué importantes? Te preguntarás. Porque esas personas causaron algo en ti. Te cambiaron, aunque no lo admitas en voz...