Más Allá...

DOS

Lo mejor de empezar el día es, escuchar mi canción favorita en el despertador: The Messenger de Linkin Park, esa tiene mucho sentimiento es perfecta y todo lo que se podría necesitar para empezar el día, obviamente en mi voz no se escucha igual pero me encanta cantarla y despertar a los demás.

—¿Y si dejas que ellos la canten? —Me gruñe Lia.

Hoy sera un buen día y lo se, lo se porque tuve un sueño diferente a los otros días, este fue mas como una predicción, me ira bien en mi presentación final, mis vacaciones irán de lujo cuando me vaya al Caribe y Jazz conseguirá chico, si lo se suena loco pero así fue el sueño. Le contare lo ultimo a Jazz, a ver que dice, mi sonrisa es enorme casi como la de él Grinch.

*****

—¿A que no adivinas? —Gritamos juntas al vernos.

—¡Tu primero! —Exclamo Jazz.

—Ok ok, soñé que la pasaremos genial en el Caribe.

—Eso suena perfecto, es lo que mas hemos esperado este año.

—Y también que conseguirás chico.

Ambas reímos a carcajadas, al punto de que todos voltearon a vernos en el instituto, cuando nos dimos cuenta, escapamos a nuestro rincón solitario.

—Pensándolo bien, creo que haré el intento.

—Esa ni yo te la creo, se seria Jazz, nadie puede contigo ni con tu carácter.

—También tienes razón en eso pero puedo hacer el intento, ¿no crees?

—Ok, intentemos lo, pero ahora cuenta me tu lo que tenias que decir.

—Ah, cierto...ayer estaba revisando en el internet y encontré unos cursos de deportes extremos, estaba pensando que eso es lo que tu necesitas ahora mismo, adrenalina.

—No se, tu tienes unas ideas muy locas, lo voy a pensar, la verdad me agrada un poco la idea pero aun no se.

—Vamos dale di que si, además están de rebaja por vacaciones, solo sera una semana, justo la semana antes del viaje, podremos ponernos al día con los papeles de permiso este fin de semana cosa de el lunes empezar el curso, anda di que si.

Saque mi celular.

-¿Dime donde lo viste?

—Pon "deportes extremos" en Google.

—¿Así de una?

—Si, así no mas.

—Ok ok.

Entre al primer link y la verdad me encanto, lo único malo era que después del curso que contenía: Rapell, Escalada, Ascenso en Cuerda y otras vainas mas hay un viaje de una semana y media para aplicar todo lo conocido en la selva y eso suena muy arriesgado y fascinante.

—Jazz esto se ve mucho mejor que el viaje al Caribe.

—Si, pero...solo haremos los cursos porque después nos broncearemos en las playas caribeñas, además que veremos chicos lindos, grandes y fornidos y de distintos lugares.

—Ok, entonces solo el curso, pero promete que algún día lo haremos completo, ¿si?

—Lo prometo amiga, eso si lo cumpliré, pero después del viaje.

*****

Ese curso, esos seis días serian mi despejo total de todo, de todo en todo sentido, vaya forma de usar la palabra "todo", mi sonrisa es difícil de contener.

Mis papás comienzan a mirarme raro, así que llevo a mi padre a un lugar donde podría estar a solas con él.

—¿Todo bien, pequeña? —Pregunta papá.

—Mas o menos, así como que todo casi bien pero le falta algo para estar perfecto, ¿Me entiendes?

—Si no fueras la pequeña de la casa, diría que estas queriendo decir algo pero para tu mala suerte eres mi hija la que mas quiero por que eres mi ultima bendición y se que quieres pedirme algo, ¿verdad?

Sonreí tontamente.

—Sabias que te amo, te amo porque eres el único que me entiende en esta casa.

—Y tu sabias que si, ¡lo se! —Papá me mostró una amplia sonrisa y me toco la punta de la nariz.

Solo me quede mirándolo no podía imaginar cuanto es que el señor que tenia en frente mio, me mimaba, me adoraba, me complacía y me protegía.

—Deja de mirarme así y dime, ¿qué es lo que necesitas?

—Dinero para tomar unos cursos sobre escalada, ascenso en cuerda y unas materias mas, eso dura una semana y media y quería hacerlo antes de ir al Caribe.

—Deportes extremos, no sabia ese lado tuyo, pero en fin, ¿hasta cuando me das para pensarlo?

—Puede ser... hasta mañana, ¡porfis! —Comencé con la suplica.

—Ok, mañana te doy una respuesta, pero haz me un favor grande.

—¿Cual?

—No se lo digas a tu mama, mucho menos a tus hermanos, sabes como son ellos y en especial tu mama, ¿lo prometes?

—¡Señor, si señor!- Grite con una amplia sonrisa.

—Así me gusta, ahora ve a hacer tu tarea, algo no se, lo que tengas que hacer.

Eso sonó a que ya era un si, mi papá casi nunca me negaba cosas a excepción que este muy fuera de su alcance, a veces es bueno ser la pequeña de la casa, trae consigo muchas ventajas en especial esta de pedir algo y que te lo den sin pensarlo, tal vez debería aplicar eso con los hombres, así ellos también sentirían un poquito de lo que se siente cuando juegan con las chicas, odio cuando se me cruzan los pensamientos, en fin ojala mi papá pueda complacer me esta vez mas, pero volviendo a lo otro voy a pensar seriamente en jugar con los hombres, total así como nosotras sufrimos, ellos también deberían saber que siente.

Agarre rápidamente el celular y le marque a Jazz.

—Hola loca...si al parecer mi papá le dará el visto bueno a esos cursos de deportes extremos...ok, ojala a ti también te den el visto bueno...¿como que conociste a un chico?...¿cuando pensabas decírmelo?...ok, iré en un rato debo terminar mi tarea...bien, nos vemos mas rato.

*****

Me apure en terminar las cosas que me encargó mi mama, para así poder darme una escapada donde Jazz.

Le pedí permiso a papá y salí corriendo en busca del chisme que me tenia preparado la loca de mi amiga.

Al doblar la esquina casi me golpeo con una espalda bastante ancha quise disculparme pero mi día se derrumbo cuando cuando vi ese rostro triste, aunque mas bien, trabajado en tristeza.

—Jenna mi niña, justo estaba yendo a buscarte para que hablemos, tienes que escucharme por favor.