El Vlog De Will #PP2016

Demo de historia.

Saludos! Aquí Will, y vengo a decirles algo fabuloso, tuve una idea de historia, fue genial y por fin escribí un capítulo, así que necesitó su ayuda: Por favor lean mi historia y ïiganme que les pareció para mejorarla y algún nombre para el título. ¡GRACIAS! ¡MERCI!

¡SIN MÁS PREÁMBULO, AQUÍ VA!

Solté un gran bostezo mientras me estiraba, tomé mi llave y abrí la puerta de mi casa. Estaba realmente cansado, lo que más quería era llegar a mi casa y tirarme en la cama para siempre. Observé el lugar, estaba ordenado como siempre, mi gran casa de 2 pisos llena de muebles y mesas hechas de roble. El sofá se veía cómodo, pero me mantuve enfocado en mi objetivo principal: La cocina. Me dirigí a mi segundo lugar favorito de la casa, mi santuario de la salvación, mi cocina. Llegue a la cocina y abrí un cajón, tomé una cuchara y sostuve con fuerza el bote de mantequilla de cacahuate (Qué? Creyeron que diría, Nutella?). Después de eso, caminé por las escaleras hacia mi habitación. Tomé mis lentes que había dejado en el computador, nadie que me conociera podía saber que usaba lentes, acabaría con mi reputación. Entendí mi computadora y mientras esta cargaba, yo decidí escuchar algo de rock, me sentía inspirado al ver mis posters, My Chemical Romance empezó a tocar en mi habitación. Mientras cantaba la letra de "Welcome To the black parade" empecé a revisar mis mensajes. Eran por lo menos 100 de todo tipo, invitaciones a fiestas épicas ,mensajes de amigos, cartas de amor de chicas y chicos (no quiero saber más detalles), y algunos regalos geniales que me daban por ser yo: Nataniel Cortés, el chico y galán más popular de la universidad. Pero al llegar a mi casa me convertía en alguien más, un solitario jugador de videojuegos y amante de la cultura de Japón, en otras palabras: Un friki. Con solo pensarlo moría de vergüenza, pero qué más da? La vida es corta y creo que lo mejor es disfrutarla.

Inicié a jugar en mi computadora, una vez que empezaba, no me podía detener. Y así iniciaba mi tarde... y mediatarde... y noche... El reloj de mi computadora marcó las 8:50 aún tenía tiempo para una partida de videojuegos en mi consola. Durante un momento pensé en algo aterrador: La tarea. Luego recordé que era popular y cualquiera podría pasarme la tarea. Ventajas.

Ni remotamente podía imaginar que mi vida iba a cambiar por esa chica...

Mi corazón latía rápidamente, en el videojuego, mi equipo entero dependía de mi para ganar, era su mejor jugador. Apunté mi pistola hacía uno de mis rivales y matarlo fue un juego fácil, mi puntaje iba por las nubes, cuando uno de mis peores temores se hizo realidad: Se fue la electricidad. Mis ojos se quedaron cegados durante un momento debido al repentino cambio de iluminación. Sentí escalofríos, la temperatura había descendido mucho, ¿O solo era mi imaginación? Desconecte mis auriculares, me levanté del suelo y pensé en voz alta.

-Bien, ahora tengo dos opciones-Me dije a mí mismo- Una es viajar hasta la fuente de la electricidad y volverla a conectar, la otra es aceptar mi responsabilidad de ir a la escuela y dormir ahora... La respuesta es bastante obvia.

Me estaré un poco y tomé una linterna, la entendí y apunte a toda mi habitación, el lugar bajo la luz de la linterna se volvía bastante aterrador. Escuché pasos en las escaleras, sentí escalofríos y tuve que reprimir un grito de niñita asustada.

-Tranquilo, Nate-Me repetía a mi mismo- Solo es tu estúpida imaginación, has jugado demasiado. El frío era exagerado, entraba por mis pies y recorría mi sistema, estornudé y sentí que acababa de revelar mi imaginación a alguna especie de asesino serial... Asesino... Esa palabra reportaba en mi cabeza una y otra vez, me recordaba a tantas cosas, dentro de los juegos, yo era un asesino a sangre fría. Pero ahora que la posibilidad de que hubiera alguien así en mi casa hacía que temblara de miedo. Pero no me rendirá fácilmente, yo era Nataniel Cortés, la estrella beisbolista de la preparatoria. Además también era "Natástrofe", un jugador de videojuegos de alto nivel. Apreté mis puños valientemente y abrí las puertas, mi corazón latía a mil por hora, inconscientemente tomé mi bate de béisbol favorito, ahora me sentía ligeramente más protegido, bajé por las escaleras lentamente, volteando por todas partes y apuntando con mi linterna los lugares sospechosos, a pesar de que no veía nada, quería volver a mi habitación y esconderme debajo de mi sábana, pero si realmente había un asesino ahí, esa acción era como decir "Hey! Soy un blanco fácil. Ven por mí". Bajé las escaleras y corrí con todas mis fuerzas hacías la puerta, durante un momento tropecé con mi bate de béisbol, fue humillante. Pero finalmente, alcancé el generador de electricidad, estaba apagado, o bien, se había apagado solo, o un asesino lo hizo. Deseé que fuera la primera opción. No sé como, pero hice que volviera a funcionar el generador. Mi casa se volvió a iluminar y sentí que el miedo me abandonaba lentamente, en la luz no había nada que temer. Volví a mi habitación lleno de confianza, estaba riendo, la sola idea de pensar que había un asesino serial en mi casa era ridícula. Estaba frente a mi habitación cuando noté algo realmente extraño, la puerta estaba entreabierta. Recuerdo claramente haberla cerrado, mi corazón volvió a latir demasiado, apreté mi bate con fuerza y abrí la puerta. Solté un grito había alguien en mi habitación, la luz de la Luna hacía brillar su cabello de color ¿Blanco? Combinaba con sus ojos de color azul. En pocas palabras era bella, creía haberla visto antes, probablemente en la escuela. Mi mente quedo clara, no había nada que temer, no era ningún asesino serial, solo era una chica, en otras palabras, uno de los riesgos de ser popular: Las admiradoras locas. Ya me había pasado antes, era fácil manejarlas, solo le tenía que dar lo que quería, Cumplidos, un poema, una canción, o algún regalo. Ellas cumplían su sueño y yo seguía siendo popular. Pero está chica hizo algo que las demás no habían hecho, entrar a mi habitación. Ese era el Tabú para los visitantes en mi casa.

La chica estaba jugando en mi consola, traía mis auriculares puestos y se veía adorable jugando así, era bastante linda la chica, solo tendría que seguir mi protocolo de admiradora loca.

-Entonces, quien lo diría.- Su voz era algo aguda y suave, pero lenta, como si fuera nueva hablando español-El chico más popular de la escuela es un friki. Eso es lindo.

Sonrió un poco y dejó el mando de la consola, miré la pantalla, y su puntuación era casi tan buena como la mía, se quitó los auriculares y me mostró su sonrisa, era algo aterradora.

-Bien, me descubriste-Dije y reí un poco-, y ¿Qué quieres, chica? Si quieres te puedo dar un autógrafo.

Mostré mi mejor sonrisa matadora, galantemente levanté mis cejas y mis dientes blancos formaron una sonrisa.

-No estoy interesada en eso, quiero algo más que eso.

-¿Quisieras una cita?- Le pregunté, dudando.

-No,- Bajó su cabeza y su cabello cubrió sus ojos. Debía ser una chica tímida, eso era genial.- Quiero tu corazón...

-Wow, eso en serio es romántico.- Reí nervioso.

-¿Crees que es una metáfora?- Levantó su cabeza y dejó ver un rostro aterrador, sus ojos estaban completamente abiertos y su boca formaba una sonrisa de media Luna.- Yo, voy a matarte.

La chica sacó un cuchillo de su bolsillo, y me apuntó con él.

No entendía nada, excepto una cosa: Yo iba a morir