Violette Parks es una chica de 18 años de edad que se acaba de mudar a una nueva ciudad, es una chica muy linda que los hombres la consideran bastante sexy, pero de que sirve ser sexy cuando el único chico que te gusta no te presta atención.
¡¡Luisa!! -corro y la abrazo, por el impulso nos caímos-
Ella me abraza y nos quedamos abrazadas en el suelo durante mucho tiempo, claramente estábamos emocionadas y pues... Lloramos , como cuando lo hacíamos en el colegio de chiquitas, yo era muy, bueno, SOY muy sentimental. Y era muy fácil hacerme llorar. Recuerdo que mi profesor de tercer grado siempre nos daba charlas que nos hacía llorar. Cuando salíamos del aula Luisa me abrazaba para que dejara de llorar.
Amiga, ¿Qué haces aquí? -le dije cuando ya estábamos sentadas.
Solo quería venir a verte, y creo que te veré por el resto de mi vida porque me vine a vivir -me sonríe.
¿Donde te quedarás? -la miro frunciendo el ceño.
En un hotel -me responde rápidamente.
¿Ah sí? -dudo de ella, sé que no tiene donde quedarse- ¿En cuál?
Emm... Bueno -baja la mirada- Sabes el que está... -se detiene- Ahg, no tengo donde quedarme, ¿Feliz?
Lo sabía -ríe- Tengo una casa para mi sola, puedes dormir conmigo ya que Francisco está en la otra -me detengo- Espera, ¿donde está Francisco?
No lo sé -ríe a carcajadas y yo me uno a sus risas, como extrañaba estos momentos.
Luego de un rato de hablar en el parque ¿Por qué todo ocurre ahí?, en fin. Nos fuimos a mi casa y hablamos hasta las 3 o 4am, entré al cuarto donde duerme Fran pero no estaba ahí. Esto es extraño.
Vamo' a dormi' -le digo intentando calmarme ya que me seguí riendo.
Está bien -ríe.
Nos dormimos, y yo me levanté a las 6:30am, tenía que ir al instituto, que fastidio lo sé. Me fui al baño, me desvestí y me di una larga y relajante ducha de agua caliente, no fue la mejor idea ya que cuando salí estaba prácticamente dormida. Fui a mi armario, elegí un conjunto y me lo puse y amarre mi cabello en una cola alta.
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Salí de mi habitación en silencio con la intención de no despertar a Luisa, fui a la cocina, me hice un pan con mermelada y al dirigirme a la puerta principal me encontré con una nota:
"Hola Vi, me fui y no creo que vuelva, sé que te incomodo, gracias por cumplir mi deseo de besarme, gracias por ser mi amiga, gracias por todo.
Att: Fran."
¿Qué bicho le picó?
Suspiro y salgo de la casa con la carta en mi mano,veo que está soleado y es un día muy lindo, no sé porque pero hoy voy decidida a hablar con Andrew. No sé ni que estoy diciendo, es claro que cuando llegue el momento no lo haré. Cuando llegué al instituto ahí estaba, recostado en los casilleros, como siempre.
Vamos Violette, acércate -dije para mi misma mientras daba pequeños y lentos pasos hacia él-
Hola Andrew -le dije cuando ya estaba cerca de él.
Hola.... -inclino levemente su cabeza.
Violette -le dije embobada por sus ojos.
Sí, Violette ¿Qué se te ofrece? -me dijo subiendo un pie para apoyarlo en la pared.
¿Podemos hablar? -le dije con timidez.
Bueno -se encoge de hombros.
Bien -camino alejándome con él.
¿De qué querías hablar? -mete sus manos dentro de sus bolsillos.
Bueno, yo solo.... -hago una pausa.
Ajá... -alarga.
SoloMÍRAME-le digo mirándolo a sus bellos y perfectos ojos.
En ese momento el baja la mirada hasta mis ojos ya que era bastante alto.
¿Y ahora qué? -sonríe picarón arqueando una ceja.
No lo sé -lo miro- Solo quiero decirte que me gustas, ¿Si?
Que interesante -me susurra y se acerca lentamente hacía mí.
Solo cierro los ojos y me quedo quieta.
Se desvía de mis labios y se dirige a mi oído.
Nos vemos luego Violette -me susurra.
No puedo creerlo -bajo la mirada- Me dejó con las ganas el muy idiota. Idiota, pero hermoso.
