The good girl (Camren)

Capítulo 4. Esa es mi chica

Debía ser mi imaginación. Ahora estaba todo claro.
Al entrar en el bus con las piernas temblorosas ante aquel comentario busque a Lauren con la mirada. Ella había ido directo a sentarse junto a sus dos mejores amigas Ally Brooke y Normani Kordei. No hubo una mirada, ni sonrisa dedicada hacia mí. Simplemente tomó el asiento posterior al de Mani y comenzo una charlar con ambas chicas.

-¿Qué esperas subnormal? ¡Ven a sentarte ya! -escuché una voz disfuncionalmente femenina para un timbre de voz tan grueso, supe enseguida que se tataba de mi amigo Ezra, fue entonces cuando me arrastró hasta él asiento junto a el - ¡necesitas ser salvada de ti misma! ¿Te pensabas mirarla todo el camino como una loca obsesiva? -dijo dramático.

- Tal vez...-le sonreí con descaro- no puedo creer lo que hace. Me coqueteó...-ví su mirada incrédula. Seguramente pensaba que era patética. Y lo era -esta vez es verdad...

- Mila, esa que vez ahí...- hizo un ademán con la mirada- es la típica chica popular/reina del baile...Y las reinas del baile no llevan a sus novias lesbis al baile.

-Eres un pesado...-contesté un poco ofendida- jamás he dicho que soy lesbiana.

-Honey, eres más marimacha de lo que yo jamás seré...-dijo alzando la ceja y poniendo su mano en la cintura. Por si no había quedado claro, Ezra era más gay que un unicornio rosado con la bandera LGTB pegada al cuerno - has estado enamora de la señorita perfección durante dos años...Y jamás has tenido novio...Y no -dijo cuando yo estaba apunto de debatirle- el beso de castigo con Austin cuando tenías 11 no cuenta. Todos pasamos por esa etapa de confusión.

- sí, fue terrible- puse cara de asco- talvez lo sea...o talvez sólo soy laurensexual -el rodó los ojos pero finalmente rió.

Al arribar en la escuela mire a Lauren alejarse hacia su aula. Un rato después, Dinah llego a nuestro encuentro.

-Buenos días peques -dijo viniendo hacia nosotros animada- acabo de ver a la reina del baile, hablaba con sus amigas, la bajita y la morena buenona sobre una fiesta de los de último año...- a Dinah le encantaba escuchar conversaciones ajenas, al parecer.

- gracias por esa hiriente información Dinah, una fiesta más a la que no estamos invitados...porque somos oficialmente la escoria de esta escuela. - contesto Ezra. y si, lo éramos de cierto modo.

Tristemente en el Instituto al que asistiamos lo que te colocaba una etiqueta de elite era o tu belleza y destreza social, tus habilidades deportivas o el número de dolares en tu cuenta bancaria. Ninguno de los tres poseía alguna de esas cualidades.

Dinah era hija de una ayudante de cafetería y mitad becada. Ezra pagaba sus propios estudios trabajando los 7 días de la semana. Y yo...bueno mis estudios eran patrocinados por los padres de Lauren. Este era el precio que debíamos pagar por estar en la mejor escuela privada de Miami. Ser inferiores que todos los demás. Eso según ellos.

-Tal vez Camila pueda hacer algo por estas pobres almas en desgracia...- puso sus manos en forma de plegaria y me miró haciendo un puchero-

-Ni lo pienses...no voy a molestar a Lauren.

- ¡Mila! Nunca te pido nada...soy buena amiga. Hasta guarde el secreto cuando vomitaste sobre mí después de besar a Austin hace 5 años...y te sujete el cabello en el  retrete.

- ¿que hiciste que? JAJAJAJA - Ezra solto a reír - Mila, Esta chica merece ir a esa fiesta - añadió, uniéndose a la causa de Dinah.

Los mire y rodé mis ojos.

- Veré que puedo hacer...- ambos chillaron de la emoción - pero ella apenas y me habla, así que ni se ilusionen.

En el almuerzo,  como un mantra me repetí a misma que no debía mirar más a Lauren Jauregui. "Ten dignidad Camila, que no te controle, no pienses en sus ojos...aquellos verdes ojos. O en su cabello...que es tan perfecto" ¡DEMONIOS!