-¿De que color es su infierno?
+Rojo tal vez...
¿como es el suyo señorita café?
-Azul, como el mar, el cielo y sus ojos.Como infierno.
¿Como es su cielo señor ojos color mar?
+Verde, me gusta el verde...
¿el suyo?
-Azul como el infierno y sus ojos.En muy poco entendí el infierno, a veces no era rojo, tampoco hervía si no que el infierno estaba en nosotros, era frio, raro,muchas veces vacío.
El infierno eran los Miles de monstruos que llevábamos dentro, todas las penas a medio olvidar.
El infierno se convirtio en muy poco en algo común. El infierno en un punto era muy parecido al cielo al menos para mi... En realidad se convertía en algo efímero, todo era muy estúpido yo encontraba el infierno en cosas hermosas como sus ojos mar y las melodías de piano que le dedicaba en silencio.
Fue mi culpa pero sospecho que fueron sus ojos los culpables del vacío y de mi azul infierno aunque también sospecho que fue culpa de mis tristes ojos negros por lanzarse tan fácilmente al fondo de un profundo mar.
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"Entre Plumas Negras".
Poetry"Para todos aquellos que nos engañamos diciendo que el desvelo es a causa de café"