Le rogaba a las mariposas de mi estómago que dejaran de revolotear sin tener el valor de decirles que algún día iban a morir.
Un día descubrí que estaban muertas, tu habías terminado con ellas. Ese día vomité mariposas muertas y entendí lo duro que era el amor.
Todo era tan raro,tu creabas y destruías mis mariposas. Lo más tonto fue que ellas nunca desaparecieron del todo siempre volvían con algún que otro cosquilleo después de una mirada tuya.
Mis mariposas eran tontas porque aparecían sabiendo que iban a morir y cuando volaban lo hacían como si no hubiera un mañana. Ese momento era hermoso, cada vez que me hacías sentir mariposas.
Pero...al tiempo se congelaban y finalmente morían como todo en lo que creía, era en verdad triste pero yo lo había aceptado porque yo era como las tontas mariposas que volaban demaciado alto sabiendo que iban a caer.
Me temo que era imposible no ser mariposas cuando sus ojos eran paisajes.
Me temo que mis mariposas y yo somos débiles contra el hielo de su enorme y triste mirada burlona.
Somos muy frágiles para tantos demonios.
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"Entre Plumas Negras".
Poetry"Para todos aquellos que nos engañamos diciendo que el desvelo es a causa de café"