Es solo el inico Parte 2/2

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Narradora:

Las palabras del pelinegro resonaron dentro del pelirrojo, sintiendo como si ese cutter se clavaba justo en su corazón. Movido por aquel sentimiento tan doloroso empujó al más bajo dentro de la cabina cerrando la para luego tomarlo por los brazos. Dado que era la última cabina está era un poco más grande, moviéndose libremente poniendo a Hito entre él y la pared.

El tacto brusco del mayor en sus brazos causó dolor y sangrado por las heridas previas sin mencionar que hiciera caer sus lentes al suelo.

-¡Claro que tiene que ver conmigo! -grito, sorprendiendo al ojos azules- ¡Porque eres la persona que amo y mi novio!

Esas palabras causaron ciertos estragos en el más bajo quien agitó la cabeza, como queriendo evitar algo.
-¡No seas idiota soy u...

Antes de que pudiera terminar unos labios chocaron con los suyos, dejando sus ojos como plato sin saber bien como reaccionar. Aprovechando aquella abertura, Izumi profundiza el beso, aún a sabiendas de lo que esto podría ocasionar posteriormente. Siendo arrastrado por su proprio deseo de monopolizar a Hiro la persona más especial para él, el chico que amaba.
El cuerpo de Hiro se estremecio por completo sacando lo de su shock. Comenzando a forcejear sin éxito alguno, sus brazos estaban muy fuertemente sostenido y aunque tratará golpearlo en la entrepierna su estatura se lo impedía. Dejándolo a merced de aquel contacto prohibido, esos labios suaves que presionaban los suyos y esa lengua húmeda que se movía en su interior. No era su primera ves de eso estaba seguro pero, tampoco es que tuviera mucha experiencia. Lo que provocaba en él sentimientos confusos.

La falta del oxígeno los separó, tan pronto como Hiro pudo abastecer sus pulmones se disponía a gritar por ayuda. Pero no contó con el hecho de que Izumi se lo volviera a impedir. Esta vez el mas alto acerco más su cuerpo delatando sus fuertes palpitaciones y su temperatura.

Todo esto era demasiado para el inexperto Hiro, quien comenzaba a sentirse débil perdiendo ante el insistente beso de Izumi comenzando, de una manera torpe, a corresponder. Acto que fue bien visto por el ojos ámbar quien fue soltado sus brazos al no sentir fuerza alguna en ellos. El aire en sus pulmones escasea de nuevo, separando a la pareja a quienes solo un hilito de saliva aún los conectaba.

Ambos se miraban denotando excitación en sus rostros y respiraciones. Motivado por esto el pelirrojo se volvió a acercar a esos labios brillantes y rosados, los que en esta ocasión se abrieron ante él voluntariamente y no sólo eso; Hiro acentuó el beso agarrándose del cuello de pelirrojo. Las cosas estaban fluyendo de una manera muy normal hasta que Hiro sintió las manos de Izume tocando directamente la piel de su pecho. Bruscamente alejo al ojos ámbar sintiendo su cara ardiendo de la vergüenza.
-¡I-Idiota!
Intento salir corriendo pero como no tenía los lentes no puedo ver la puerta frente a él.

P.O.V Hiro

-No es necesario que llame a su familia, yo soy su novio así que puedo llevarlo.

"¿Novio?"

-Bien entonces iré a notificar lo, cuando despierte podrán irse.

Escuchó el sonido de una puerta y por la voz de la mujer sé bien donde me encuentro. Abro los ojos viendo el techo blanco de la enfermería, siento algo en mi nariz que me molesta.
-Es un algodón para el sangrado.
Me siento en la camilla mirando al borroso Izumi de pie aún lado de la camilla.
-mis lentes
-aquí.
Los tomo para luego colocarlos en su lugar y ahora sí puedo ver bien.
-Te diste tan duro con la puerta que te sangro la nariz y te desmayaste.
Puedo ver como muerde su labio tratando de contener la risa. Bufeo del enojo que me provoca mi torpe acción.
-Juro que si le cuentas alguien sobre esto te golpeare tan duro haya bajo que perderás la memoria.
Alzó el puño mientras veo con fiereza su entrepierna, maldiciendo la con la mirada. En defensa se tapa con las manos retrocediendo.
-No te preocupes Hiro-chan soy una tumba.
-Entonces, me iré.
Me levanto sacando el algodón de una de mis fosas nasales tomando mis pertenencias del escritorio de la enfermera.
-Hiro-chan, espera.
Siento que toma mi hombro obligándome a verlo, continuando con lo que está diciendo.
-sobre lo que pasó -levanto mi puño amenazando- ¡No sobre eso! Sino, sobre tu problema.
Me mira con preocupación en su rostro por lo que suspiro pesado.
-No quiero discutir sobre eso.
-Los novios hablan sobre esas cosas, sino lo haces estas rompiendo el trato y lo que me da derecho hacer tu acosador personal indefinido.
Ahora soy yo el que está siendo amenazado por ese estúpido contrato oral. Ruedo mis ojos con desgano soltandome de su agarre.
-Este no es el momento ni el lugar; ahora debo irme, mi hermano me espera en casa.
-Te acompañare hasta la estación.
-as lo que quieras.

Creí que podría sacarme lo de encima, pero esta vez no funcionó el pretexto de mi hermano. Supongo que no siempre se puede contar con ello, tendré que buscar otro. Caminamos en silencio, el ambiente es un poco denso, no es que me moleste pero tampoco es lo ideal. Extraño enormemente mis días de paz.

-Piensas decirlo?
Rompe el silencio con esa duda ¡Maldita curiosidad humana!
-aún sigue sin ser el momento o el lugar.
-siento que dices eso como si lo usaras de escusa.
-ahora pretendes ofender me.
-No es eso yo sólo...
-sí claro, dices que me quieres, luego me amenazas para que acepte salir contigo y ahora pretendes que confíe en ti y habrá mi corazón dejándome totalmente expuesto. Debes estar loco.
No ah respondido, mis palabras deben haber lastimado su orgullo; lo cual es bueno, de esa mane...
-tienes razón -me a detenido tomando mi mano obligando a que le vea, tiene una cara complicada en este momento- y aún así, quiero saberlo todo; porque eres la persona que amo y justo ahora como tu novio puedo y tengo el derecho de indagar en tu vida sin reproche alguno.

Parece que este tipo no me lo va hacer fácil, si no le doy lo que quiere no me dejara en paz.
-Bien, te dare respuesta a 3 preguntas pero la respuesta puede como no puede ser específica.
-¿Es en serio?
-Lo tomas o lo dejas-me cruzo de brazos- es decisión tuya.
-Esta bien, lo tomo.
-pregunta
-ahora?
-Si no lo haces lo tomaré como negativa, luego no me culpes al no quererte decir nada.
-ok, ok, deja que lo piense un poco.

Su rostro pensativo es algo chistoso, aún así se ve que lo toma muy en serio.
-Bien, la primera ¿Tus padres saben de tu problema?
-sí incluido mi hermano.
-y no hacen nada! -me mira estupefacto
-esa sería otra pregunta.
-No espera, no la respondas- agita sus manos en negación
-Bien. -ruedo mis ojos en molestia
-... ¿Desde cuándo lo tienes?
-ya llevo unos años
-y ¿Por qué lo haces?

No es la primera ves que me haces esta pregunta y no creo que sea la última. Sin embargo, sus ojos, no son como los demás que demostraban curiosidad, preocupación o miedo. Ellos... Parece como si, sintieran culpa.

-Para mantenerme despierto.

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Hola, pues... quiero agradecer a las personas que an comenzado a leer Cutter realmente me hace muy feliz saber que lo leen. También para pedir disculpas por los errores que cometo y para animarles a comentar, pueden comentar si les gustó alguna escena o si no entendieron algo o preguntar (No sé qué, pero de seguro algo se les ocurrirá) o mandar saludos o si quieren que les mande saludos en el capi siguiente o... etc.
Bueno, con todo gracias por seguir esta historia.
Ah! Por cierto, gracias a AngelicaCamposGarcia (Lo estoy escribiendo bien?) Por mi primer voto en wattpad. Mil gracias.

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