Frio

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La boca del lobo es un departamento en un edificio estilo moderno. El lobo es de pedigrí; en este momento estoy sentado en uno de los muebles de su recibidor. El lobo fue a buscar los abrigos ya que la nieve está cayendo y está haciendo mucho frío.
-aquí tengo dos, esta es para ti.

Me entrega uno color negro, todo está bien hasta que me lo pongo y me doy cuenta que me queda nadando. Gracias a un espejo en la pared puedo ver lo ridículo que me veo con eso puesto.
-Ni de broma salgo así.
-No se ve tan mal, te hace ver lindo -sonríe colocándose detrás mío poniendo cara de tonto con sonrisa de pervertido.
-No pienso salir luciendo tan lamentable.

Después de todo mi cuerpo no es tan musculoso por lo que parezco como uno de esos niños que por jugar a ser papá se pone la ropa de éste.

-Pero Hiro, estamos en medio de nuestra primera cita.

Protesta con preocupación, parece que este tipo quiere quitarme lo que me queda de dignidad.
-Pues puedes dar por hecho que no pienso salir luciendo así, a menos que sea en un taxi camino a casa.

Cruzo mis brazos mostrando que no estos dispuesto a negociación alguna. Por lo que él suspira resignado.
-Bien, pero continuemos la cita aquí y no pienso recibir un 'no' por respuesta.
-ok- digo desganado.
-¡Genial! -Dice triunfal para luego abrazarme desde atrás pasando sus brazos por mi cintura atrayendo me a él.

Mi cuerpo se tensa y mi corazón comienza andar a mil al sentir su respiración en mi cuello.
-realmente te ves muy lindo con mi ropa puesta.

Siento como deposita en mi piel un beso mientras me mira a través del espejo. ¡Oh por Dios, estoy en peligro! Automáticamente le golpeó con mi codo en su estómago haciendo que me suelte, me alejo de él velozmente y me saco su abrigo tirándose lo en sima. Resguardando me entre los muebles para evitar que me atrape fácilmente.
-¡Ni se te ocurra intentar algo! O..o.. ¡Corto contigo!

Al oír mis palabras se saca rápido la ropa de encima y alza sus manos en son de paz.
-¡No haré nada! ¡No haré nada!

~we don't talk any..~

Suena mi celular y contesto
-Itsuki ¿Qué sucede?..... sí sé que está nevando.... ¡Recogerme! ¡No, yo puedo volver solo!... -miro a Izumi quien parece resignado y entristecido-... regresar, ¿Ahora?....

Pareciera un perro, puedo ver sus orejas caídas y su cola, ponerse así sólo porque me tengo que ir. En serio que parece un tonto perro con complejo de acosador y un devoto amor incondicional. Tan molesto y aún así...
-Regresare luego, Ahora a estoy en casa de un amigo jugando con su tonto perro faldero.
-¡¿Amigo?! ¿Cu…~

Esas fueron sus últimas palabras antes que le colgará. De seguro hará muchas preguntas para cuando vuelva y todo por culpa de la tonta cara de perrito lastimero de Izumi. El cual ahora muestra una gran sonrisa de oreja a oreja.
-¿Y ahora qué?
-preparare un poco de chocolate caliente, y podemos jugar con ps4.
-No soy bueno con esas cosas -¡Qué¡ Soy de los que prefieren ver pelis o leer un buen libro que jugar.
-Entonces yo te enseño.

Finalizó contento con la idea para luego ir a la cocina. Supongo que no se puede hacer nada, después de todo, esta nevando afuera. Me siento mirando el plasma de 40 pulgadas, ahora entiendo uno de los motivos por lo que sus amigos no lo odiaban. Miro al rededor notando un pequeño estante en la pared con algunos marcos, deben ser de su familia. Me levanto acercándome aquel lugar, miro las fotos sin tocarlas; parece que son una familia igual a la mía por el número de personas. En una puedo ver a 5 personas una mujer y tres hombre, uno de ellos es su padre y el otro parece ser su hermano mayor. Ahora que caigo en cuenta, aunque Izume es mi sempai, no creo que sea mayor que mi.
-¿Qué haces?

CutterDonde viven las historias. Descúbrelo ahora