Huyendo del destino.

03.- Huida [Judal]

se acaba de bajar del avión, cansado. Los vuelos así de largo de verdad que eran agotadores, y no había tenido tiempo suficiente para descansar si quiera, odiaba que exigieran tanto en el trabajo, pero bueno. Trabajo es trabajo y pagaban bien.

Camino por el aeropuerto saliendo, un auto esperaba por él, lo vio. Puso mala cara, suspiro, el vapor salía por su boca, estaba nevado en pleno otoño. Que extraño.

Subió al auto y se sentó, saco su celular.

—a ver... según esto iba a Londres... —miraba los mensajes del celular y vio que tenia unos de un tal "Alibaba".

–será su prometido... —rio divertido.— bueno lo plantaron en el altar... es un idiota.

Abrió el mensaje y lo leyó, se sorprendió le daba asco, no le gustaba ese tipo de hombres en lo absoluto, debería responsabilizarse.

Pensó un momento si responderle, pero no. El teléfono comenzó a sonar, era una llamada.

Ren Kouha.

—¿Ren también? Curioso... —miro la foto, no tenia la menor idea quien era. Corto la llamada, miro la cantidad de personas que habían llamado y que ella había cortado.

—que triste por ella...

el auto se detuvo.

—ya llegamos señor...

le dijo el hombre que manejaba, sin siquiera mirarlo.

—imagino que ya te pagaron, gracias.

Se bajo y camino subiendo unas escaleras a lo que parecía ser su casa, abrió una puerta negra y dentro, se encontró con una enorme casa blanca, muy moderna y minimalista. Lanzo su abrigo y maleta en cualquier lugar tirándose sobre el sofá. Un gato blanco con manchas negras se acerco a el para saludarlo y sentarse junto a el.

—melocotón... te extrañe... —le sonreía haciéndole cariño en su cabeza.— bien...a volver al trabajo...

saco una computadora de la mesa frente a el, y la abrió. Miro el celular que había dejado sobre la mesa.

—allá serán... no, no es buena hora...y no me debería importar –dejo pasar un momento.

La curiosidad lo mataba. Trabajaba en la computadora y miraba cada tanto el celular frente a él.

Se estaba volviendo loco.

Si, ya estaba loco de por si.

Tomo el teléfono, y mando un mensaje.

—lo mejor será darle acceso, seguro esta como loca...

+9887*****XX [04:06am]: te daré acceso al teléfono, ya puedes desbloquearlo.

Rio pensando en la sorpresa que se llevaría, apelaba a su curiosidad a que ella respondería. Siguió trabajando esperando una respuesta, si en total...

Lo único que quería era que ella revisara el celular. No creía que pudiese ser peligrosa.

El celular vibro junto a el y le dio un pequeño susto, estaba completamente concentrado en su trabajo.

Kougyoku [04:08am]: ¿qué acabas de hacer? ¿quién eres? ¿qué hiciste con mis cosas?

Se cubrió la boca riendo, le resultaba linda. La gata se acercaba a el haciéndole cariño en sus manos, ronroneándole.

—seguro debió haber visto ya todas las fotos de mi melocotón...

apareció algo interesante en la pantalla de su computadora y se distrajo, no del todo. No podía dejar de pensar en que quería responder el mensaje.