Capitulo 18 parte 2

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Después de que me encontrara en mi fresca sudadera de Victoria
Secret rosa y en una camisa con botones simples para no estropear mi cabello después, nos fuimos al salón. Había oído hablar de Bridezillas, y que las novias eran tan nerviosas que vomitaban o lloraban, pero yo estaba tan feliz, que lo único que pude hacer todo el día fue sonreír y reír. Tuvimos la
experiencia más increíble en el spa, tuvimos masajes, manicura y
pedicuras, tuvimos nuestro cabello y maquillaje hecho, y tenía un flujo sin
fin de agua, champan, fruta y platos de queso. Supongo que no les
importaba que Bree y yo tuviéramos sólo diecinueve años.
Todas lucíamos increíbles, y ni siquiera nos habíamos puesto nuestros
vestidos todavía. El maquillaje de todas estaba impecable, Carrie y mamá llevaban recogidos, el cabello rubio hasta los hombros de Breanna tenía
rizos sueltos, con una trenza alrededor de la parte frontal derecha de su
cabello, y el mío estaba justo como lo había imaginado en mi cabeza. Mi
largo cabello castaño con raya al medio, una trenza suelta cayendo a
cada lado, uniéndose en un rodete que terminaba como un moño bajo en
el centro de mi nuca. Después de que todos nos hubieran ayudado a
prepararnos para el día, nos dieran abrazos y nos hubieran felicitado, nos fuimos en el Lexus de Bree al lugar de la ceremonia y recepción.
A pesar de que ellas no estaban encantadas, finalmente me había
salido con la mía y había ayudado con los preparativos de la boda, así
que lo primero que hicimos cuando llegamos allí fue revisar ambas
habitaciones para asegurarnos que todo lucía aún perfecto. La habitación
donde haríamos la ceremonia tenía una iluminación suave, y luces
navideñas dentro de tul que pasaban por ambos lados del pasillo central.
No queríamos que hubiera mucho allí, así que además de los grandes
ramos de lirios blancos, y algunas luces más, eso era todo lo que había. La habitación donde haríamos la recepción era una historia diferente. Más tul
blanco lleno de luces parpadeantes, formaban suaves arcos hasta centro
de la habitación, haciéndolo lucir como si estuviéramos en una gran carpa
más que en una sala. Las mesas tenían manteles blancos, con tules verdes,
dorados y negros encima de ellos. Los centros de mesa con velas dentro
estaban situados uniformemente en el tul. Cada asiento tenía una
pequeña cosa de burbujas para el final, y unos pequeños envases llenos de cosas para hacer chocolate caliente de menta. El DJ instalaba su
equipo, y había mesas en el fondo donde estaría la comida. El pastel de
boda era realmente una pieza única, blanca con remolinos negros y
verde, y las dos capas que le seguían eran cientos de magdalenas, todos
con el mismo tipo de diseño. Nos encontrábamos en una de las


habitaciones del fondo poniéndonos nuestros vestidos cuando
aparecieron los chicos en sus trajes.
—¡Oh por Dios, están aquí! —Corrí hacia la ventana para verlos
caminar hacia el edificio con una gran sonrisa en mi rostro. No sé por qué, pero había estado conteniendo la respiración hasta que vi a Liam aquí. Y lucía asombroso, como el resto de ellos. Papá tenía un traje gris oscuro, con una camisa negra, Konrad y Jeremy llevaban trajes negros con
camisas verde oscuro, chalecos negros y corbatas negras flojas. El amor de
mi vida vestía todo de negro con una corbata suelta verde, y venía con
nuestro hijo en sus brazos. Estoy segura de que se había vestido para el
funeral, pero como no estaba exactamente al tanto de todo lo que
pasaba en ese momento, ésta era la primera vez que había visto a Liam con una corbata, por no decir un traje. Su aspecto robusto con traje hacía que pareciera poderoso y misterioso y oh, tan sexy. Ya me
mordía el labio de tan sólo pensar en sacárselo esta noche. Los
observamos hasta que se metieron en el edificio y me llevó una increíble
cantidad de fuerza de voluntad para no salir corriendo hacia mi casi
marido.
Cuando sólo faltaban veinte minutos, las chicas me ayudaron a
ponerme mi vestido, la liga y mis Converse blancas. No había forma de que usara tacones toda la noche. Mi vestido era simple y hermoso, sin
mangas y ajustado hasta las caderas donde suavemente se agrupaba y
caía al suelo, la parte trasera atada con una cinta gruesa. Observé a
mamá y a Carrie con sus vestidos brillantes en negro y plateado, y a mi
mejor amiga en su vestido verde oscuro hasta debajo de las rodillas. Todas nos abrazamos y besamos en la mejilla antes de que me entregaran el ramo de lirios blancos y rosas rojas con una cinta verde oscuro
sosteniéndolos, y nos dirigimos a encontrarnos con los chicos.
—Guau, hermana. —Jeremy me abrazó gentilmente, con miedo de
arruinar algo, y me besó en la mejilla—. Te ves genial.
—Gracias, Jer, ¡ustedes lucen todos tan guapos! —chillé y acepté un
abrazo de Konrad.
—Te ves hermosa, niña. —Me besó en la mejilla también, antes de
tomar a Bree en sus brazos.
—Gracias, viejo —bromeé y me quedé sin aliento cuando vi a papá
y a Jacob—. ¡Hola pequeño! —Besé su suave cabeza y jugué con sus manos por un minuto antes de que mamá lo tomara para que ella y Carrie
pudieran ir a sentarse.
Jeremy y Konrad las acompañaron hasta sus asientos, y luego
volvieron en busca de Bree. Ella me guiñó un ojo, y cuando la música


comenzó, los tres dejaron la habitación para tomar su lugar en el centro.
Papá envolvió sus brazos alrededor de mí y me abrazó por un momento.
—Te ves tan hermosa, dulce niña. Gracias por pedirme que te
entregue, significa tanto que nos hayas dejado ser tu familia. Te amamos y estamos muy orgullosos de ti y de tus decisiones.
Parpadeé para contener las lágrimas cuando me dejó ir.
—Gracias papá. Significan todo para mí, no habría sido capaz de
hacer nada de esto sin ustedes.
Extendió su brazo y posé mi mano en el hueco.
—Tenemos que ir, ¿estás lista para esto?
—¡Tan lista! —Hice una pequeña danza feliz así que papá y yo
reíamos cuando dimos la vuelta a la esquina y comenzamos a caminar por
el pasillo.
Mis ojos encontraron a Liam al instante, y su expresión hizo que mi
cuerpo cantara. Una gran sonrisa se dibujaba en su rostro, acentuando su
hoyuelo, sus ojos estaban brillantes mientras me observaba caminar hacia él. Si papá no me hubiera estado sosteniendo, me habría ido corriendo hacia él, pero mantuvimos el paso lento, llegando a Liam en segundos,
que se sentían como una eternidad. Cuando papá me entregó, y puso mis
manos en las de Liam, le sonreí ampliamente y continuamos
mirándonos el uno al otro, dejando que todo lo demás se desvaneciera.
Hola. Articuló con los labios.
Le sonreí y le respondí articulando te amo.
Yo también te amo. Me dio un apretón en las manos y me miró con
una expresión que sólo podía describir como pura alegría.
Dijimos nuestros votos, repetimos las palabras después del pastor,
intercambiamos los anillos y cuando preguntaron, dijimos: "Acepto". El
pastor nos declaró marido y mujer, y Liam inclinó mi cara hacia la de él,
capturando mi boca con la suya. En ese momento, en ese beso, nos juramos el uno al otro que estaríamos para siempre juntos y sentí como si mi
vida finalmente estuviera completa. Nos separamos a regañadientes para
enfrentar a nuestra familia y amigos antes de volver por el pasillo y salir de
la habitación. Tan pronto como doblamos la esquina, Liam tomó mi
cara en sus manos y presionó sus labios contra los míos otra vez.
—Te ves increíble, ______ —dijo entre besos suaves—, tan hermosa.
Pasé mis manos por su cabello corto cuando presionó su frente
contra la mía.
—Estamos casados —respiré una pequeña risa—, eres mi esposo.


—Y tú eres mi esposa. —Sonrió y presionó su boca en mi mejilla, luego
mi cuello.  

Taking Chances (Zayn, Liam y Tu)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora