Magnus dormía plácidamente, estaba soñando con unos preciosos ojos azules, cuando el timbre de la casa sonó y lo arrastro lejos de el paraíso en el que se encontraba.
Se arrastro fuera de la cama con el cabello hecho un desastre. Se puso sus pantumflas de gato y su bata de seda roja. Miro el reloj que marcaba las seis de la mañana y grito molesto- quien demonios te crees para interrumpir el sueño del magnifico bane! - nadie contesto, sin embargo el timbre volvió a sonar. Abrió la puerta con brusquedad listo para gritarle al idiota que lo molestaba a media madrugada, pero sus intenciones se perdieron cuando vio a Alec parado en la puerta con una maleta bastante grande.
-oh, Alec cariño, ¿que paso?- como es que Alec sabia donde vivia?, y que significaba esa maleta?.
***
Alec se despertó a la misma hora de siempre. Ejercitó, se bañó, desayunó y salió rumbo al trabajo.
Antes de salir del auto tomo un respiro. Tenia bastante tiempo que no hacia trabajo de campo, y eso lo emocionaba.
Bajo del auto, sacó su maleta y se encamino a la puerta, toco el timbre y esperó. Después de un momento se escuchó -quien demonios te crees para interrumpir el sueño del magnífico Bane!- esas palabras le sacaron una sonrisa, toco el timbre nuevamente.
La puerta se abrió de golpe, y ahí parado frente a el estaba Magnus Bane, con una cara de sorpresa, y un aspecto bastante tierno.
-oh! Alec, cariño ¿que paso?- magnus lo observaba detenidamente. Acaso su padre no le menciono que solicito protección para él.
-Buenos días señor Bane. Vengo en nombre del señor Asmodeus. A partir de hoy estaré a su servicio y juro proteger su vida con mi vida.- Alec pronuncio cada palabra como si de un poema se tratara.
-que se supone que significa eso?- espeto magnus.
-que soy su guardaespaldas, señor.- dijo alec con simpleza.
-esto tiene que ser una broma!
- el sr. Asmodeus cree que su vida podría estar en riesgo....-magnus lo interrumpió
-mi vida esta en riesgo y a mi padre se le ocurre mandar a un niño a protegerme!, ¡genial!¿quien le dijo a mi padre que tengo tiempo de hacerla de niñera?- dio media vuelta y se retiro a lo que Alec supuso era su habitación.
El ojiazul entro a la casa cerrando la puerta tras de si. Abrió su maleta y comenzó a sacar su equipo. Coloco sensores, cámaras inspeccionó cada parte del departamento a excepción de la habitación dónde aun estaba magnus.
Una vez termino su trabajo, Fue al auto y saco su maleta de viaje donde traía sus cosas personales.
***
Magnus cerro la puerta tras de si, aun se sentía en shock, que se termino cuando se miro en el espejo.
-no puede ser!- magnus quería morir en ese momento, su cabello era un desastre y lo peor era que el hermoso de alexander lo vio en estas fachas.
Se tranquilizo - alexander tiene la culpa ¿a quien cárajo se le ocurre llegar a las seis de la mañana?-aunque siendo sinceros, aunque hubiese llegado al medio día, era probable que aun durmiera.
Bueno se arreglaría increíble y así alexander olvidaría que lo vio en fachas.
Magnus se baño y mientras se arreglaba comenzó a meditar en lo que acontecía. Realmente no era malo que alexander anduviera a su alrededor todo el tiempo, de hecho le agradaba la idea, este chico tenia unos hermosos ojos y aunque claramente era un amargado a magnus le gustaba.
Terminó de arreglarse y decidió salir. Tomo aire - no le haría las cosas fáciles a ese guapo invasor de propiedad.
-veo que sigues aquí- dijo aparentando poco interés
- se que esto no le agrada, y creame a mi tampoco- magnus sintió como si lo hubiesen abofeteado. A el si le agradaba tener ahí a Alexander.- pero esto es por su bien, tenemos que ser un buen equipo-se posicionó frente a magnus.- por favor señor Bane coopere!- porque demonios le hablaba de usted?
- porque me hablas de usted?-
- eso es porque usted es mi protegido y el respeto es un factor importante en mi trabajo.-
-pues no me agrada, y si quieres que seamos un buen equipo tendrás que tutearme.
Alec lo medito un segundo- si yo lo tuteo seguirá las indicaciones que le de al pie de la letra?-
-siempre y cuando no me indiques como vertirme, no es por ofender pero comienzo a dudar de tu buen gusto- dijo señalando la ropa de Alec.
Alec movió la cabeza en negación y se le escapo una sonrisa que se esfumo tan pronto como vino- es un trato?- dijo extendiendo la mano.
-es un trato- y le dio la mano para sellar el acuerdo.
Por un momento sus miradas se cruzaron. Y todo a su alrededor dejo de existir.
