Capítulo 23

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El sol llegó muy rápido y con él unas cálidas caricias en mi lomo; abrí forzosamente mis ojos y ahí estaba Marco, observando mi tranquilo descanzar. Fue la noche más maravillosa que  viví hasta hoy; me acurruqué sobre su pecho con una enorme sonrisa en mi boca mientas que el sólo abrió los brazos para recibirme.

―Buen día.―susurró él.

―buen día.

La felicidad era notoria en mi rostro.

―Que deseas desayunar ?―preguntó.

―Cualquier cosa.

―Bien, yo quiero café con tostadas.

―....

―Qué, creíste que bromeaba o algo por el estilo anoche?; Ve a preparar el desayuno.

Era demasiado bueno para ser verdad así que me enderece en busca de mi ropa interior; la encontré en el suelo y procedí a vestirme. No encontré mi ropa de dormir así que tomé lo primero que había por ahí cerca, una playera de Marco que me quedaba con vestido corto.

Me dirigí hacia la cocina a preparar el café y las tostadas; coloque las tazas, las tostadas y la mermelada en una bandeja para regresar a la habitación nuevamente .
Marco estaba acomodando su pantalón y se volteó a verme .

―Ahora sé dónde está mi playera.

―No encontré mi ropa así que me puse lo primero que vi.

―Ah, lo siento por eso. Creo que la desgarre anoche y ahora son simples trapos.

―¿Rompiste mi ropa?; qué eres, alguna clase de animal o qué?

―Creo que anoche perdí el control. Lo siento, no va a volver a...

― ...de toda formas, sólo es ropa. ¿Vienes a desayunar?

Dije para que no se sienta más avergonzado de lo que imagino debe estar sintiéndose ahora. Coloque el desayuno en la cama y comencé a untar mermelada en el pan para distribuirlos entre ambas tazas.

Se colocó una camisa y se sentó sobre la cama para tomar la taza de café caliente seguido de una tostada endulzada.  Pasaron unos momentos de silencio incómodos hasta que me armé de valor y comencé a hablar.

―Quiero preguntarte algo respecto a anoche .

El sólo se detuvo con la taza sobre los labios y la vista perdida en la habitación. Su semblante cambio a pálido esperando la pregunta del rigor.

―...pero creo que tendrá que ser más adelante porque ya es hora de comenzar el día.

Él sólo me observó sorprendido como me alejaba con la bandeja hacia fuera de la habitación. Creo que no es el momento para preguntar nada así que será para la próxima.

Me dirigí a la cocina a limpiar todo lo del desayuno para después ir a mi habitacion a buscar algo de ropa que ponerme. Al salir del baño tras haberme cambiado, Marco estaba en la puerta de la entrada con indumentaria preparado para salir. Me miró a los ojos por unos segundos y cerró la puerta tras de sí.

Corrí tan rápido como pude a abrir la puerta para preguntarle a dónde se iba pero ya no estaba. Me entristece verlo marcharse pero supongo que tenía cosas importantes que hacer.

Para entretenerme mientras espero su regreso me enfoque en la limpieza, había mucho por hacer así que comencé por el living- comedor ; luego la cocina y el baño.  Eran casi las 12 del mediodía así que me puse a preparar el almuerzo para cuando llegue Marco.

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