Capítulo 18

42 2 2
                                    

Continuación de la escena quenchi que se estaba dando anteriormente...

~~~~~~~~~~~~~~~~

Kaia:

La situación se tornó acalorada y nuestros cuerpos inconscientemente comenzaron muy lentamente a frotarse uno contra otro. De mi parte porque la posición en la que me encontraba era bastante incómoda, en cuanto a él parecía tratar de liberar ambas manos de debajo de su propio cuerpo.

La fricción continuo dejándome su sensual cuello al alcance de mi boca haciendo que lo roce muy lentamente con mis labios de manera muy sensual. El pareció inquietarse bastante provocando que soltara un gemido ahogado, como si no quisiera soltarlo. Viendo que no ponía resistencia continúe hasta llegar a su oreja y, no se si fue imaginación o lo copié de algún lado, comencé a acariciar con mis labios su lóbulo haciendo que soltara gemidos que no llevaban voz sino que eran solamente exhalaciones de aire.

Contra mi estómago sentía algo duro y sabía que no se trataba de la hebilla del pantalón o algo por el estilo porque latía

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Contra mi estómago sentía algo duro y sabía que no se trataba de la hebilla del pantalón o algo por el estilo porque latía. Pequeños cosquilleos bajaban hasta mi pantalón corto, ya había estado excitada varias veces pero nunca de esta manera, recorrí su cuello hasta que por fin llegue a su boca pero antes de besarlo decidí mirarlo a los ojos y de alguna manera pedirle permiso,  quiero estar segura. Su expresión se tornó decepcionada cuando me detuve a verlo.

Nunca estuve con ningún hombre pero eso no quiere decir que soy inocente o que no sabría hacerlo. Acerqué muy lentamente mi boca a la suya esperando a que él pusiera de su parte, si no lo hace es por que no quiere seguir. Dio un salto y atrapó mis labios con su boca, succionando y tratando de mantenernos unidos. Mi mano derecha decidió levantar su remera desde su abdomen y tocar muy suavemente sus pectorales, abdominales y bajar muy suavemente hasta el inicio de su pantalón. Estoy sorprendida, no puedo creer que esta era yo. 

Por lo general soy muy tímida y penosa pero creo que desde el momento que tocó mi cuerpo en su casa en realidad quería quedarme y seguir sintiendo ese calor que me provocó su contacto.

Marco:

¿Ésta es la niña inocente que salve hace unos días? ¿Por qué está haciendo esto? Odio el contacto físico con otras personas, no por nada vivo sólo en medio de un bosque solitario. Estoy sintiendo electricidad por todo el cuerpo pero más específicamente ahí abajo. Desprecio esto que está haciendo pero ¿Por qué mi cuerpo parece querer más?.

Tengo que salir de aquí antes de que todo se salga de control. 

¿Ahora mi oreja? Niña debes detenerte o estoy seguro de que me arrepentiré luego. Estoy asfixiandome de tanto calor que tengo pero no entiendo porque no quiero que se detenga. 


Se detuvo, al fin. Viéndome con esos ojos misteriosos, igual que el bosque, hacen que me descontrole. Su boca es tentadora, cual delicioso pastelillo, acercándose de esa manera hacia mi; Creo que quiero comerlo.

La estoy besando muy desesperadamente como consecuencia de tanta tentación que ella provocó en mi. Su mano se siente bien en mi cuerpo, mis manos aún inmóviles se desesperan por liberarse y poder... tocarla.


Kaia:

Sus labios y su lengua me hacían encender mucho provocando que imaginé cosas que siempre desee hacerle a algún hombre. Separamos nuestras bocas en busca de aire pero en vez de continuar, decidí probar qué clase de sonidos haría si experimento mis fantasías con él. Comencé a recorrer su pecho dejando una hilera de besos y continúe bajando hasta sus bien marcados abdominales, era bastante erótico ver ese espectáculo pero lo era aún más besarlo.

Su respiración se aceleró soltando gemidos ahogados y provocando que tense todo su cuerpo

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Su respiración se aceleró soltando gemidos ahogados y provocando que tense todo su cuerpo. Con ambas manos, luego de pasearlas por todo su torso, las dirigí al comiendo del pantalón donde mi boca buscaba seguir con el recorrido. Mis dedos se colocaron alrededor del botón y lo desabrocharon; acto seguido bajé su cremallera dejando a la vista su lindo boxer color negro y un gran bulto que se asomaba. Cuando estuve a punto de hacerle presión con mis manos oímos unos pasos en el pasillo.

Ambos nos detuvimos y nos miramos con ojos cual huevos estrellados

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Ambos nos detuvimos y nos miramos con ojos cual huevos estrellados. ¿Qué haremos?. Me miró de tal manera que no quería que me fuera pero tampoco podía permitir que nos encuentren en estas condiciones.

―Sostente fuerte de mi cuello.

―Qué?

―Hazlo!―ordenó.

No tuve otra opción que hacer lo que me pidió así que coloque mis brazos alrededor de su cuello lo más firme que pude.

―Ahora respira profundo.

En cuanto hice eso sentí como si me hubiera lanzado de la punta de un edificio y vuelto a subir. Fue una sensación bastante extraña porque era como subir a una montaña rusa pero de todas maneras no se comparaba a lo que estaba sintiendo en este momento.

La habitación donde nos encontrábamos había desaparecido por completo y se veía como si estuviésemos dentro de una burbuja bajo aguas turbias; realmente fue maravilloso ver eso pero el entorno acuoso no duró más de segundo a segundo y medio. De pronto nos encontrábamos en medio del bosque tirados entre pasto, raíces y ramas. Marco intentó desatarse nuevamente pero fue inútil asi que me pidio que busque alguna piedra o algo que pudiera usar para cortar la soga sin obtener resultados. Le ofrecí intentar desatarlo nuevamente pero su rostro se tornó rojo y agitó su cabeza bruscamente en rechazo a mi oferta. Supongo que lo que pasó hace rato tiene mucho que ver con su respuesta.

―Ven, déjame experimentar algo que ocupa mi mente en forma de duda.

«¿acaso tiene que ver con lo que sucedió en mi casa...?»

―Apresúrate y no pienses en bobadas.

Me acerqué a él muy cuidadosamente intrigada por saber que clase de duda tenía.

~~~~~~~~~~~~~~

Bueno, sin comentarios.


July♡



.

El Otro LadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora