Dormitorio 105B (Traducción)

Adiós, mi amor

"... lo siento Mingyu. Se suponía que esta sería nuestra primer cita."

"Está bien" sonrió feliz el más alto. "No podíamos evitarlo ¿cierto? No sabía que el Director Kim era tu tío."

"Es una larga historia. Como sea, los enfermos no pueden salir de compras, y él es algo quisquilloso, así que... si terminamos rápido podemos ir a algún lugar."

"Incluso si es hacer compras contigo, está bien para mí."

Los dos se ruborizaron y desviaron la mirada.

Bajaron del autobús tomados de la mano: Jihoon hizo que Mingyu llevara el carrito, para desviar la atención del hecho de que él era muy pequeño para ver sobre las compras. Los dos peleaban literalmente sobre cada producto como un viejo matrimonio, aún tomados de las manos.

"Ah, rayos."

"¿Qué?"

Jihoon señaló hacia uno de los estantes. "Frijoles* enlatados."

Mingyu se mordió el labio. Jihoon acababa de gritarle por tomar productos que él no alcanzaba. "No creo tener permiso de tomarlo ¿o sí?"

"No. No lo tienes."

Mingyu suspiró y tomó a su alfa por la cintura, levantándolo. "¿Así está mejor?"

Jihoon tomó la lata indicada rápidamente antes de que Mingyu lo bajara. "Siempre encuentras una salida ¿no?"

"No te enojes."

"No me enojo. Ven acá." Jihoon dejó un beso en la mejilla de su omega. "Eso es por ser tierno. Idiota."

Mingyu se rio, sonrojado, y siguió moviendo el carrito: los chicos terminaron con las compras rápido, regresaron a casa y dejaron todo en la habitación del director.

"Salgamos" Jihoon tomó la mano de su omega y lo arrastró de nuevo hacia la parada de autobús: en menos de una hora estaban en la playa, caminando de la mano mientras el sol se ocultaba.

La sonrisa en la cara de Mingyu era amplia y brillante - jamás se había sentido tan feliz, estaba en una cita en la playa con su pequeño alfa. Nada podría salir mal si los dos estaban así - juntos. Mientras Jihoon estuviera cerca, Mingyu estaría satisfecho. No importaba si Jihoon no lo amaba, y no importaba si jamás lo besaba en los labios. Jihoon estaba ahí, con él.

En algún punto se sentaron a ver el reflejo del sol ocultándose sobre el agua: Jihoon se acomodó muy cerca de su omega.

"¿Mingyu? Gracias por acompañarme hoy."

"Gracias a ti" respondió el omega, sorprendido. "... ¿por qué me agradeces? Yo quería venir más de lo que tú querías que viniera."

"... creo que pienso un poco mejor cuando estás conmigo. Aún no puedo tomar una decisión, pero todo es más claro cuando estamos juntos. Oh, eso sonó algo gay. Como sea. No importa."

"Jihoon..." dijo Mingyu recargando la cabeza en el hombro de su alfa. "¿Cantarías algo para mí?"

Jihoon sonrió y comenzó a cantar. Cantó una canción de cuna que recordaba escuchar a su madre susurrar - sobre un lobezno cuidando a sus cachorros a la luz de la luna.

Mingyu suspiró, feliz.

"Hey ¿omega?"

"¿Alfa?"

Jihoon giró un poco. "Voy... voy a besarte."

Todo quedó en silencio por un momento, mientras el corazón de Mingyu parecía dejar de latir.