Dormitorio 105B (Traducción)

Gracias al cielo por el lado violento de Jihoon.

"Miren nada más, si es Samsil El Asesino."

"¡Mira tu tamaño! Esperaba a alguien por lo menos tan alto como Mingyu. ¡Eres una cosita tierna!" se burló Kim Samsil. "Está bien, jóvenes. Este niño no puede lastimarme."

"Señor-"

Samsil gruñó. "¡Atrapen a esos malditos niños que andan sueltos!"

Ambos guardias salieron de la habitación: Jihoon sólo los vio irse.

"Así que ¿piensas que no puedo lastimarte?" sonrió Jihoon. "Crees que estás a salvo ¿no es así?"

"Wow." dijo el anciano, inclinándose hacia adelante. "En verdad eres pequeño. No has crecido mucho desde la última vez que nos vimos ¿o sí? Dios, mírate. Y eres un alfa ¿no? ¿El alfa de Mingyu? Eso está mal, muy muy mal."

Joshua gruñó un poco.

"Si hay algo mal aquí, eres tú." murmuró Jihoon.

Curiosamente estaba muy tranquilo, cara a cara con su archienemigo: el chico estaba firme frente a él, en lugar de inclinado, preparado para atacar.

Para los demás, esto era una batalla. Se trataba de resistir. Pero Jihoon estaba en la misma habitación que Kim Samsil. Ya no era sólo control sobre el cuerpo. Sino sobre la mente. Habían vivido juntos en el palacio la mayor parte de los primeros años de vida de Jihoon, y el muchacho había aprendido mucho en ese tiempo.

"Adelante, dime."

"¿Recuerdas cómo solíamos jugar?"

"¿Vas a hablar ya, o~?"

"Ya no eres divertido, joven Príncipe." dijo Samsil mientras tosía y se enderezaba. "Bueno, primero, sugiero que veas dónde está durmiendo tu querido omega."

Jihoon giró a ver a Mingyu de nuevo.

"Es tu cama. Y recuerdas los peligros que la rodean ¿cierto?"

Levantó una ceja. "¿Cloroformo en la almohada?"

Samsil sólo sonrió, agitando su mano para indicarle a Jihoon que podía continuar.

"Alguna pobre criatura que hayas puesto en la cama. Un zorro vivo o un conejo con rabia."

"Casi."

"¿Un panal?"

"¡Exacto!"

"Sabía que olía a miel."

Joshua dejó su pose de pelea, confundido, pero de esto trataba el juego. Jihoon recordaba muy bien qué le pasaba a la gente que no jugaba justo como Samsil lo había planeado.

Si no obedecías las reglas, morías. Era así de simple. De una forma u otra.

"Si fuera tú, tendría cuidado de dónde piso."

"Placas de presión. Lo sabía. No estaban en la escalera."

"Me pregunto qué pasaría si activas alguna de esas placas."

Jihoon se balanceó un poco en su lugar, viendo al hombre en la silla. "¿Qué tanto deseas ver morir a Mingyu?"

"Mingyu ya no es nada para mí. Sin importar si mueres o no, él nunca será el heredero. Y si no es el heredero ¿de qué me sirve?"

"Entonces, hay una bomba bajo la cama."

"Oh, algunas placas la activan, otras no."

Jihoon respiró profundo, sujetando fuerte a su beta. "No te muevas."