Gracias.
Gracias por las lágrimas, por hacerme sentir una mierda, alguien tan miserable e insignificante en tu vida, quien siempre te dio lo mejor de ella, sin esperar ni obtener nada a cambio, nunca supiste valorar lo que en realidad era nuestra amistad. De un día a otro cambiaste, cambiaste y yo no pude hacer nada. Te extraño y no creo que haga falta que lo diga, mi mirada lo dice todo, está llena de dolor, pero vacía al mismo tiempo.
Pero no me tengas lástima, no me hables por obligación, si me vas a hablar que sea porque en realidad te importo, porque en realidad me quieres.
La máscara que me protegía se rompió, tu fuiste la única persona que logró hacerlo, me dañaste de una manera que nunca nadie lo había hecho. Muchas personas a lo largo de mi corta vida me han herido, pero quizás el hecho de que tu eras una persona especial para mí lo cambió todo. No logro odiarte por más que lo quiera, aún en el fondo de mi ser te sigo queriendo; pero logré entender que tu presencia en mi vida me hacía daño.
Perdón por aburrirte, por causarte mil molestias; perdón por no ser una gran mejor amiga, perdóname por quererte tanto y preocuparme por tí; perdóname por aparecer en tu vida. Perdón.
↪Una desconocida.
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¿Por qué?
Ficção Adolescente«La vida es un círculo vicioso. Cuando menos lo esperes todo tu mundo a color vuelve a ser gris.»