No me decepciones (Auryn) [COMPLETA]

Capítulo 16

A la mañana siguiente la alarma del móvil de Yaiza empezó a sonar. Esta gruñe y la apaga.

A los diez minutos suena de nuevo y repite la misma acción.

A los siguientes diez minutos vuelve a sonar y Yaiza coge el móvil ¿acaso no era sábado? Entonces vio el título de la alarma: "Casa de Valencia"

– Mierda –gritó dándose la vuelta y cayendo del sofá. – Me cago en la...

Se le había olvidado, y eso que lo había hablado con los chicos ayer, tenía que ir a la casa de Valencia y solo faltaban quince minutos para que vinieran a buscarla.

Miró el móvil una última vez para leer el mensaje que tenía en las notificaciones, Alan le decía que al final no podría ir con ellos. Bloqueó el móvil y se levantó dolorida por el golpe.

Se dio la ducha más rápida de su vida y se cambió con lo primero que encontró en el armario, metió un poco de ropa en una mochila y las demás cosas que necesitaba y bajo a su portal.

– Llegas tarde –dijo David.

Yaiza miró su reloj.

– Llegó tarde por dos minutos idiota –le dio una colleja al moreno y saludo a los demás– ¿Y las chicas?

– No han podido venir, les ha surgido algo en el trabajo –respondió Carlos.

– ¿A Rocío también?

– Si, esta trabajando en algo nuevo y las chicas le están echando una mano. –contesto esta vez Blas.

Por primera vez Yaiza se dio cuanta de que Dani está allí, un poco apartado del grupo, y que había una chica junto a él. Una chica alta, delgada, morena y más o menos de la misma edad que Dani.

– ¿Quien es? –le pregunta a Cris.

– Una amiga de Dani.

– Cristina.

– Vale, vale... –hace una pausa– dice que es su novia.

Una sensación horrible recorrió a Yaiza pero intento disimularlo lo mejor que pudo.

– Aah –dijo intentando parecer indiferente.

Se repartieron en coches como siempre hacían: Blas, Carlos, Álvaro y Yaiza en uno y Cristina, David, Dani y su "novia" en otro.

– ¿Y como se llama la novia de Dani? –dice Yaiza rompiendo el silencio que había desde que subieron al coche.

– Jessica –contesta Álvaro.

Yaiza no volvió a decir una palabra más en todo el viaje, se puso sus auriculares y se concentró en lo música, pero por mucho que lo intentó sus pensamientos solo se centran en una cosa.

Jessica. La novia de Dani. Que rápido la había reemplazado, y con que facilidad.

Cuando llegaron a Valencia, Yaiza se fue a la habitación, Carlos, Álvaro y Blas se fueron diciendo que tenían que comprar algunas cosas y lo más probable era que la parejita feliz fuera con ellos o que buscara un rincón de la playa para morrearse. Que asco.

Cristina le dijo a Yaiza que iba a dar una vuelta con David así que se había quedado sola.

A veces envidiaba a su mejor amiga, se llevaba genial con David y nunca habían tenido ningún problema, cada vez que se miraban se notaba un brillo en sus ojos que reflejaba lo que sentían el uno por el otro. Por supuesto ella se alegraba un montón de su amiga, y no podía imaginarse a alguien mejor que a David para ella, pero cada vez que los veía juntos anhelaba esa sensación de tener al lado a alguien que te hiciera sentir escalofríos cada vez que se acercaba a ti. Anhelaba a Dani.

Unos minutos después Yaiza salió de la habitación para ir a ver la tele al salón donde se encontró a Dani en el sitio que tenía pensado ocupar ella.

– ¿Que haces aquí? Pensé que te habías ido con los demás –preguntó seca.

– ¿Y tu? Yo también pensé que te habías ido.

Yaiza Miró a su alrededor– ¿Y Jessica? –preguntó.

– Fue a comprar con los demás.

– Aah –dijo indiferente por segunda vez en una mañana, y se fue de vuelta a su habitación.

Dani se quedó mirándola mientras desaparecía detrás de la puerta. Yaiza estaba molesta, lo sabía, la conocía demasiado bien como para no saberlo.

Había llevado a Jessica para dejar claro que lo suyo había acabado pero a lo mejor había cometido un error, no soportaba estar mal con Yaiza.

Fue hasta la puerta donde segundos antes había entrado Yaiza y tocó.

– ¿Que quieres? –se le escuchó decir.

– Yaiza quiero hablar contigo.

– Dejame en paz Daniel –si, definitivamente estaba más que molesta, ella solo lo llamaba así cuando se enfadaba mucho.

– Yaiza por favor, es importante –intentó de nuevo.

No contestó pero segundos después se oyeron unos pasos y la puerta se abrió dejando ver a Yaiza.

– Yaiza, no quiero que estemos así –dijo intentando mirarla a los ojos, algo que resultaba imposible ya que estaba mirando al suelo.

– ¿Tu eres tonto? –le espetó Yaiza alzando la voz–. No, no quiero estar bien contigo, por si te refieres a eso. No quiero tenerte a mi lado solo como amigo porque no lo soportaría. Puede que lo nuestro no fuera importante para ti pero yo fui tan idiota como para enamorarme, ¿y sabes que? Por desgracias sigo enamorada de ti, pero se que tu no así que déjame en paz y sal de mi vida de una puta vez porque no hay cosa que más me duela que tenerte a mi lado recordándome a cada momento que estuvimos juntos mientras que tu ya has encontrado a otra que me reemplace y encima vienes aquí con ella para restregármelo por toda la cara.

– Yaiza... –no pudo acabar la frase porque Yaiza ya había cerrado la puerta.

Segundos después la puerta principal se abrió y Carlos, Blas, Álvaro y Jessica entraron, esta última fue hasta Dani y salto a sus brazos.

– Hola amor –dijo mientras Dani seguía con la mirada clavada en la puerta– oye Dani, ¿pasa algo?

– No no, lo siento.

...

Cuando David y Cristina volvieron, comieron todos juntos en la mesa del porche mientras hablaban de cualquier tontería. Dani casi no abrió la boca y no dejaba de mirar a Yaiza que en cambio, no le dirigió la mirada en toda la comida porque no tenía valor para hacerlo, no después de todo lo que le había soltado.

Después de comer se empezaron a preparar para ir a la playa, Yaiza se encontraba en el baño poniéndose un bikini mientras se maldecía por no haber comprado un bañador mientras. Se miró al espejo del baño y la única palabra que le salía era horrible, no pensaba salir así.

Se puso una camiseta gris que le quedaba un poco por encima de las rodillas y salió a la playa donde todos los demás ya estaban colocando sus toallas. Su atención se centró en Jessica, que estaba riendose por a saber que mientras le daba la mano a Dani y entrelazaba sus dedos con los de él.

Su cuerpo era precioso, tenía la barriga plana y unas curvas impresionantes, el bikini rojo que llevaba le quedaba a la perfección.

Era mucho más que ella, por algo la había dejado Dani, no podía compararse con esa chica.