Lo que pasa en Las Vegas ¿se queda en Las Vegas? (EN CORRECCIÓN)

Capítulo 21 "Después de tú y yo"

*Antes de comenzar el capítulo, las invito a escuchar junto con el capítulo la canción  "Give Your Heart a Break" Versión español.

Un mes había pasado desde que Samuel y Guillermo hablaron en la nueva casa del castaño y a decir verdad, no fue nada fácil para él enterarse todo lo que había hecho, fue una decepción saber todo lo que hizo a Alejandro. Luego de esa charla no fue nada fácil verlo llegar con Karol a la consulta, el trato con la pequeña no había cambiado ni un ápice, pero la situación era completamente diferente con Willy, su trato era frió e indiferente.

-Se que lo que hizo no fue correcto, pero aun sigue siendo tu mejor amigo Samu— el nombrado levanto la mirada encontrándose con esos ojos, una suave sonrisa adorno sus labios para luego aprisionar un poco el agarre de sus manos entrelazadas.

Por suerte para el castaño no todo en ese mes era malo, aun que había "perdido" un amigo y aun estaba en trámites de divorcio, la persona en frente suyo le devolvía la fuerza que necesitaba para enfrentar eso y mucho más.

Aun que últimamente sus agendas eran muy ajustadas siempre hacían un pequeño lugar para hacer como ahora, disfrutar juntos un almuerzo. El restaurante no era para nada elegante pero eso no significaba que fuera feo, era el punto justo para ellos que disfrutaban que una buena pasta como ese lugar ofrecía.

-Gracias hermoso por escucharme— comento acariciando con su pulgar el dorso de esa pálida mano, su acompañante se sonrojo para luego apretar el agarre. Desde que le había comentado la situación decidió tomar su mano y aun que ahora la comida estaba casi fría por la larga charla no rompió el agarre.

-¿Esta tarde vamos al cine?— invito su sonrojado acompañante evitando mirarlo mientras regresaba a su plato.

-Me encantaría, pero tengo una junta especial. Hoy firmo el divorcio— respondió atrayendo la mirada que tanto le gusta, y es que sus ojos lo volvían loco— creo que en unas horas seré un hombre libre, libre para que estemos juntos— sonrió con complicidad.

_*_

Cuando Alejandro termino de observar toda la oficina ya había llegado a la mesa junto a su abogado. Era la típica oficina con paredes de color monótono, una mesa amplia en el centro con ocho sillas en donde se encontraba su futuro ex esposo junto con su abogado.

Samuel, por su parte lo miraba de forma expectante a cada movimiento que realizaba. Con timidez tomo asiento junto a su abogado y en frente del mayor. A pesar de que pasaron unos meses separados Alejandro seguía siendo el mismo físicamente hablando, su piel pálida, sus ojos negros haciendo juego a color con el cabello, delgado por más que comiera mucha comida seguía sin subir peso. Mientras que Samuel era todo lo contrario, un tez caribeña aun que nunca toma sol, ojos cafés, pelo castaño y unos abdominales que atrae todo tipo de atención además que vestía un costoso traje Armani azul con los primeros botones de su camisa al descubierto.

-Bueno, antes de comenzar es necesario saber si las partes pueden llegar a un acuerdo—dijo el abogado de Samuel.

-Siempre y cuando mi cliente sea beneficiado— contraataco el abogado del de menor estatura.

-Bien, entonces paso a leer las clausulas del divorcio.

La última palabra capturo la atención de Alejandro mientras pensaba si en realidad estaba haciendo lo correcto. ¿Cómo habían llegado a esa situación?

Los recuerdos de cómo todo comenzó empezaron a invadirlo poco a poco.

-Bueno estamos de acuerdo— afirmo el abogado del castaño despertando de sus recuerdos al pelinegro.