En busca de tus sentimientos

¿odio?

Matt esperó a Mello fuera de su casa para llevarlo a la escuela.
En el camino hablaron de cosas sin importancia hasta que salió el tema de Near.

-entonces, ya lo viste enojado y asustado- dijo Matt.

-si, su hermano me ayudó en ambas- sonrió con orgullo- tiene hermanos gemelos. Uno se llama Lawliet y el otro Beyond. Se pelean todo el tiempo. Near ya está acostumbrado.

-y ¿cómo sabes eso?- Matt sonrió pícaro.

-fui a su casa ayer.

-¡¿QUE?! ¡JAJAJAJAJA!

-¿de qué te ríes, perro?

-¿te invitó o tú preguntaste?

-me invitó. Dijo que me daría un "comodín". Entonces, me invitó a su casa para ver si podía averiguar asustarlo, hacerlo enojar, llorar, etc. Ahí conocí a sus hermanos y también algunos de sus gustos.

-¿uno de esos gustos eras tú? JAJAJA.

-¡¿QUIERES MORIR O QUE?!

-okay, okay. Pero ya en serio, amigo, nunca haz hablado tantas veces seguida de la misma persona. Lo que sientes hacia Near no es odio.

-como si tu supieras que es lo que siento. Si ni siquiera yo lo sé.

-no es odio. Lo demás tienes que descubrirlo tú. No puedo ayudarte.

-¿te he dicho lo fastidioso que eres?

-como más de 1834 en el año.

Pelearon hasta llegar a la institución.
Mello y Matt se despidieron en la entrada tomando cada uno su camino.
El rubio entró a la clase. No le dirigió palabra a Near de lo avergonzado que estaba. Tuvo que admitir que asustarlo y ver que puede tener miedo y enojo se sentía bien pero no del todo. Parecía muy molesto o quizás sólo era porque fue la primera vez que lo vio así. No era lo único que lo hacía incomodar. Ese beso en la mejilla...su sonrisa...y lo que le dijo:

-"no pienso mal de ti como tu crees"

No sabía que decir ni pensar. Realmente, no le creía del todo pero, aunque fuera verdad, primero tenía que averiguar lo que sentía él mismo hacia él. ¿odio? no del todo. ¿envidia? nha. ¿celos? lo mismo. ¿cariño? no, eso jamás. Mello era demasiado orgulloso para aceptar algo como eso. No iba a escuchar al perro. En todos los años que habían sido mejores amigos, aprendió algo: nunca escuchar a Matt. Resumamoslo en palabras de Mello: demasiadas reglas que seguir, demasiadas reglas que romper. Y, seamos honestos, Near tenía orgullo también. Ambos tenían dignidad. El problema era que no conocía a Near tanto como él a Mello así que no podía decir con exactitud si le importaba la dignidad o no.
Mello no entendía por qué le daba tantas vueltas al asunto. Odia a Near y ya. Fin del cuento. Sólo quería verlo de todas las maneras posibles ya que le molestaba esa mirada fría.

-alumnos, hoy quiero decirles que me hiré, al igual que todos los profesores, a una reunión de maestros. Así que, no habrá clases por una semana.

Todos, menos Near y Mello, saltaron de alegría.

-pero...- se sentaron al escuchar esa horrible palabra- tendrán que hacer un proyecto en parejas para cuando regrese.

De saltos de alegría, pasaron a hacer un "boooo". Ni a Mello le gustó la idea.

-las parejas las decidiré yo- avisó el profe.

Pasaron unos minutos en los que el profesor decía nombre de las parejas que serían.

-...y Keehl y River.- finalizó el profesor.

-¡¿PERDÓN?!- exclamó Mello- ¡¿PUEDE REPETIRLO?! ¡O OÍ MAL O DIJO QUE NEAR Y YO ESTAMOS JUNTOS!

-oíte bien, Keehl. Pueden irse.

Mello no podía creerlo. De todas las personas en la clase, tenía que ser su rival. Lo incómodo que sería estar juntos en un proyecto, era inimaginable. Alto! Tal vez, no. Podía ser una gran oportunidad en revelar algo de emociones. Nuevamente, habían quedado solos en el salón.

-supongo que estás pensando en como hacerme soltar alguna emoción ¿verdad?- Mello no se había dado cuenta de que Near lo estaba mirando.

-supones bien.

-¿lo harémos en mi casa?

-no tengo problema.

-vamos entonces.

Salieron del edificio.

-lamento lo del beso en la mejilla- "tenía que tocar ese tema!" maldijo Mello- era lo único que se me ocurrió para que supieras que no te odio.

-no te disculpes- ya comenzó a sonrojarse- y...la verdad, no te odio. Nunca lo hice.

Ese era el claro ejemplo, que sería valorado y recordado cuando hablamos de Mello y sus impulsos.

-¿pero entonces que?

-yo también quiero saberlo.

-hm. Bien, te daré tiempo.

Habían muchas cosas que Mello no sabía. No sabía lo que sentía por Near, por qué le interesaba, por qué intentaba ver sus sentimientos o por qué le habló pero si sabía algo...La sonrisa de Near era única.