Capítulo 44

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Subí al avión; el cual era privado. Acompañada de Andrés y dos hombres más.

Eva tenía bastante planeado todo, e incluso se podría decir que todo su plan le salió a la perfección.

Mi nuevo destino sería Alemania, ¿qué haría en un país en el cúal no conozco nada ni mucho menos a nadie? En cuanto el idioma, sabía algo de alemán así que eso era lo menos que me preocupaba.

Iba mirando por la ventanilla, mientras que los otros tres hombres charlaban, anda a saber de que, seguro de otros secuestro que habran hecho, quien sabe.

Luego de unas largas horas de vuelo, llegamos. Me llevaron a un apartamento y Andrés le pidió a los demás que lo esperaran en el auto.


-Bien, este será tu nuevo hogar, no se por cuanto.

-¿Ustedes viviran conmigo?- pregunté tratando de entender. El rió.

-No, nosotros nos volvemos. Para hacertela simple, te vas a quedar sola acá, y te la vas a tener que arreglar sola también. Ahora sin nada más que decir, me voy- le quería decir tantas cosas, pero tenía un nudo en la garganta que me lo impedia. Andrés se fue y yo me quedé mirando por varios minutos la puerta. No reaccionaba, no me salían las palabras, nada.


(...)


Llegó la noche, quería salir, necesitaba salir. Me pusé un abrigo y salí a caminar, pensando en hacer algo para que todo esto se termine.

Llegué al centro de la gran ciudad de Dortmund, había un gran árbol de Navidad, las luces de este prendian y apagaban, era hermoso.

Y ahí fue cuando recordé de que en tan solo un día sería navidad, me senté en una banca, no pude contenerme y empecé a llorar.

La primer navidad que estaría lejos de mis seres queridos y la primer navidad en la cual iba a pasar con Paulo... y con mi bebé.


-¡Ey! ¿te encuentras bien?- preguntó una voz masculina. (ahre hagamos de cuenta que hablan en alemán(?)

-Sí- dije sacando rápidamente las lágrimas de mi mejilla.

-No me mientas- se sentó al lado mio- A ver... mirame a los ojos- me dijo. Dudé por unos segundos en hacerlo, pero terminé mirandolo porque él me insistió, y ¡oh por Dios!- Estuviste llorando- paso su pulgar por mi mejilla- ¿se puede saber por qué una chica tan linda está llorando en está época del año?- preguntó tiernamente con una sonrisa.

-¿Se puede saber por qué el gran Marco Reus me está consolando?- pregunté, todavía estaba asombrada de que fuera él. Marco solo rió.

-Porque no me gusta ver a las personas tristes. Ahora respondeme mi pregunta ¿por qué llorabas?


Mi mente quedó en blanco pensando en que responderle, no daba decirle "me secuestraron, amenazaron y me trajeron acá para que nadie más sepa de mi" sonaba muy estúpido.


-¿Y bien?- dijo él para que yo le responda.

-Yo... yo... extraño a mi familia, solo eso- mentí, aunque por otro lado era cierto.

-¡Oh!- dijo el sorpresivo y luego soltó una leve risa- tranquila... ya pasará.


Seguimos hablando, y luego él se ofeció llevarme a mi "nuevo hogar".

Quedamos en que el me vendría a visitar mañana, ya que me pidió mi número de celular pero le tuve que decir que se me había perdido el celular.

Eva me lo había sacado, me sacó todo lo que me pertenece; incluido Paulo.




                                            


¡Feliz Navidaaaaaaaaaaad! 🎄💜

Como regalito de Navidad les voy a subir otro capítulo dentro de un ratito 😁😁






Destino [Paulo Dybala]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora