Mi vida es un giro de 360º- Justin Bieber Y Tu

Capitulo 9:

Capitulo 9:

-DESPIERTA, JUSTIN – dijo mi padre golpeando la puerta

Me levanté de la cama y fui a abrir, no había dormido nada en toda la noche.

-Buenos días – saludé.

-Tengo una noticia para ti – sonrió.

-¿Ocurre algo? – pregunté recargándome en el marco de la puerta.

-Pues, te has estado comportado de forma extraña durante los últimos meses y…

-Papá, no necesito ir a hacer terapia con un doctor o algo así – lo interrumpí – espero que mamá no te haya metido esas ideas en la cabeza.

-No tiene nada que ver con eso, sería una forma de “Terapia” si quieres llamarlo así, está bien…

-Tu punto es… - volví a interrumpir

-Iras a vivir a la hacienda de la familia durante el resto del verano – respondió

-¿¡QUÉ!? –Exclamé – ¡Ni lo sueñes!

Volteé e intenté volver a mi habitación, pero mi padre me sostuvo del brazo.

-No te lo estoy preguntando, te lo estoy ordenando – dijo serio.

-Papá, las personas cambian, yo cambié y…

-Eso es lo que me preocupa – interrumpió – no eres el mismo, ya no hablas con tus amigos, no sé ni siquiera si tienes amigos, sales solo a quién sabe qué lugares, la última vez, cuando Robert vino a visitarnos con su padre no paraste a saludarlos, eres mi único hijo, Justin, no quiero que te pierdas.

-Papá…

-Sé que no quieres ir – volvió a interrumpir – pero es por tu bien y la decisión ya está tomada, lo siento, te irás esta tarde, es mejor que vayas preparando tus cosas y despidiéndote – volteó y se fue.

-Si tan solo me escucharas alguna vez… - dije en voz baja cuando ya no pude verlo.

Volví a mi habitación, tomé algo de ropa y fui a ducharme y a cepillarme los dientes. Como siempre, mi padre había tomado decisiones sobre mi vida sin consultarme. Lancé un sonoro suspiro mientras abotonaba mi camisa. Era mejor empezar a guardar mis cosas y prepararme para el viaje, no tenía ganas de comer nada.

“Alto, de cabellos castaños claros, bella sonrisa, ojos atrapantes, voz seductora, algo torpe, pero a la vez encantador”. Sonreí. Esas palabras habían resonado en mi mente durante toda la noche. ____________ creía que mi sonrisa era bella, que mis ojos eran atrapantes y que mi voz era seductora. Reí. Y también creía que era torpe.

Empecé a sacar mis prendas y a meterlas en una valija. De repente oí que alguien tocaba a mi puerta de nuevo, esperaba a mi madre, ella siempre se preocupaba y debía pensar que la noticia que me había dado mi padre había causado un gran impacto en mí, lo cual era cierto, aunque extrañamente me encontraba tranquilo, parecía que algo en mi interior me decía que todo estaría bien.

Dejé algunas camisas sobre mi cama y me dirigí a la puerta, giré el picaporte y abrí, para mi sorpresa no me encontré con mi madre al otro lado. Era él. Alex Constancio. Mi antiguo mejor amigo.

(Narra ________)

Los rayos del sol poco a poco empezaron a invadir mi habitación, un nuevo día estaba iniciando, poco a poco abrí los ojos y observé el reloj que se encontraba a mi derecha. Marcaba las 6:45. Hora de levantarse.

Tomé una toalla y fui al baño, me cepillé los dientes, me duché y me cambié. Como siempre, había optado por unos jeans, una blusa holgada y unas botas.