Gerard siempre había odiado el papel tapiz de esa habitación en especial.
La mansión estaba decorada al estilo victoriano muy de época, y eso le parecía lo adecuado porque era refinado y siempre daba buen aspecto para sus visitas importantes de negocios.
Pero esa habitación era horrenda.
Según las historias de todos los habitantes, esa mansión perteneció a una familia durante el siglo XIX, la cual terminó extinta casi en su totalidad por el virus de la viruela.
Excepto un integrante de la familia: la hija menor del matrimonio Rosvelt, Bianca Rosvelt.
Esta pequeña murió en su habitación, justo en esa horrenda habitación que Gerard odiaba. La niña fue encontrada en el piso de la alfombra, sin una sola gota de sangre en su joven cuerpo.
Y las historias decían que la niña había sido víctima de un clan de vampiros que habían arrasado con los niños menores de cada matrimonio en el pueblo, cosa que desencadenó la huida de sus habitantes, dejando al poblado de Frail, Inglaterra, abandonado.
Y esas historias le fascinaban al hijo mayor del matrimonio Way, por eso es que el muchacho de ojos verdes y aspecto enigmático había comprado aquella mansión con la incesante fortuna de sus padres, lista para habitar con su, en ese entonces, prometida, Isabel Murán.
La pareja de recién casados se fue a vivir de inmediato a la enorme mansión en cuanto pudieron, comenzando la mejor etapa de sus vidas, en una plenitud y felicidad absoluta.
Por supuesto, hasta que Isabel entró por primera vez a esa habitación.
Gerard había insistido tantas veces a su esposa que la habitación era horrenda y sería mejor que la clausuraran, pero la mujer, cegada en sus caprichos, terminó por hacer su voluntad.
No pasó mucho cuando la pobre Isabel cayó enferma de algún padecimiento extraño que ningún médico llegó a entender, aun cuando la tecnología del siglo XXI era bastante avanzada, según presumían.
Pero nada podía salvar a Isabel, que estaba ya sentenciada a un terrible destino.
Y así la mujer cayó presa de sus fantasías y alucinaciones; fueron meses cansados, terribles y bastante inseguros para el matrimonio, que tuvieron que soportar el desvanecimiento de la mujer cada día con más insistencia, terminando por instalarla en la habitación que perteneció a Bianca, como último capricho de Isabel.
El final de su historia de amor se dio una noche de tormenta, en la cual el viento soplaba tan fuerte que todos esperaban de alguna manera que algo terrible sucediese tarde o temprano. Incluido el matrimonio Way.
Esa noche Isabel fue presa de sus más terribles pesadillas, desencadenando finalmente con la muerte de ésta, al ser encontrada colgada con una corbata que perteneció en algún momento a su marido; precisamente en esa habitación.
Su esposo, devastado por la pérdida de su joven esposa, huyó del lugar, dejando el funeral en manos de los padres de la chica, y tomando como rumbo Nueva York, atravesando el mundo sólo para alejarse del recuerdo de su esposa y el hueco que ésta inevitablemente había dejado.
Pero, por supuesto, hay cosas que nos atemorizan bastante, que nos acosan y persiguen hasta el final de nuestros días.
Y esto era una de esas cosas.
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¡Hola!
Si alguna personita ya había leído esto antes, es porque estaba en mi cuenta de slasheaven, pero no estaba terminada, ahora que pude terminarla, me puse a editarla y resubirla (:
Y si nunca han leído esta historia, quédense, les puede gustar <3
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Isabel | Frerard |
FanfictionAños después de la muerte de su esposa, Isabel, Gerard Way decide volver a su antigua mansión con su ahora esposo, Frank Iero, sin saber la clase de fantasmas que lo acosan. | Frerard |