Bueno, hola! Lo prometido es deuda y como deudas ya tengo suficiente, pensé que mejor empezar a pagar xDD Ok, conté los capítulos que me faltan para terminar, así que después de este serían seis y un epilogo. Les diría que pongan atención a las fechas que se dicen a partir de ahora... título por ejemplo xDDD Y... nada más disfruten el cap.
Capítulo XXVII:
Un 17 de febrero
—Este es muy bonito, milady. —Abi arrugó la nariz desdeñando el sombrero que le enseñaba Nikky.
Llevaban alrededor de una hora rebuscando entre las distintas prendas y aún no hallaban la ideal. Luego de que Will partiera a atender sus reuniones, Abi tomó una decisión. Con Nikky pegada a sus talones, salieron en un rápido viaje al centro de Bath. Ella pretendía encontrar el vestido más bonito, quería que la cena de reconciliación fuese perfecta. Y para ello, ella debía estar perfecta. No solo el vestido indicado, sino también el sombrero, los guantes y los zapatos. Se iba a hacer lo que en su país se llamaba makeover, sabía cómo tentar a su hombre y no iba a tener reparos en utilizar todas sus armas.
—Tiene que ser algo que diga: ¡Tómame! ¡Soy tuya!
La doncella rio entre dientes y se puso en la diligente tarea de encontrar al sombrero parlanchín. Abi dio algunas vueltas en la tienda, todo lo que veía era muy bonito, pero no terminaba de convencerla. La dependienta se encontraba buscando también, al parecer cumplir los caprichos de una marquesa era de interés público. Seguramente si entraba alguien más, también se pondría a ayudarla.
—Esto es sumamente ridículo, se creen que una no tiene nada que hacer.
Ella se volvió sobre su hombro, del otro lado de una cortina de telas de muestra se encontraban dos mujeres.
Abi no tuvo que pensar mucho, reconoció la voz casi al instante. Entonces sintió que la vena de la frente comenzaba a palpitarle, no era prudente que se quedara allí. No quería cruzarse con esa mujer, no en su día especial, no después de que Will parecía querer perdonarla. Regresó sobre sus pasos, evitando que Elisa la viera y tomó a Nikky del brazo para guiarla a la salida.
—¡Milady! ¡My lady Adler!
Abi maldijo para sus adentros, estaba teniendo éxito en su retirada, pero la vociferación de la dependienta fue igual que llevar pirotecnias en el culo. Se volvió a regañadientes y al instante sintió la desdeñosa mirada de Elisa sobre su persona. No se dejó amedrentar, hinchó el pecho y sonrió de la manera más falsa que pudo encontrar.
—Creo que finalmente lo tengo ¡voilà! —La mujer le enseñó un hermoso vestido color rojo burdeos, con bordados en hilo dorado y un prominente escote. En verdad era el vestido indicado, pero frente a la mirada de Elisa, Abi no supo qué decir.
—Tal vez la marquesa, prefiera algo menos... vulgar. —A la dependienta se le borró la sonrisa que tenía y la miró afligida, como si acabara de ofenderla—. Por favor, mueva esos pies y trate de no indignar a la señora.
No supo por qué no dijo nada para defender a la mujer, Abi literalmente se había quedado muda. La señora desapareció con el vestido y ella por un momento creyó ver lágrimas en sus ojos.
—Lady Adler, que placer encontrarla aquí.
Abi salió de su estupor y se volvió para enfrentar a Elisa, se dijo que luego hablaría con la vendedora.
—Buenos días, lady Berenfor.
La dama de compañía de Elisa, se alejó de ellas llevando su atención a unos pañuelos y Nikky se distanció lo suficiente, como para no oír la conversación de las señoras. Para Abi eso era una regla estúpida, pues le confiaba casi todo a su doncella, pero Nikky estaba muy bien enseñada.
ESTÁS LEYENDO
Pide un Deseo (Resubida)
RomanceSi pudieras desear lo que sea, cualquier cosa ¿Que seria? ¿Pedirías la paz del mundo? ¿Un auto nuevo? ¿Mayor inteligencia? ¿O simplemente pedirías que esta vez no salieras decepcionado? Algunos deseos son egoístas, otros demasiado imposibles y los d...