Capítulo 4

11 2 0
                                    

- Tu eres el chico del callejón.

Era muy alto, aproximadamente un uno noventa ya que me superaba por casi una cabeza. Y yo no era precisamente bajita. Tenía una espalda muy ancha, con hombros fuentes y robustos, seguramente iba al gimnasio todos los días, para poder presumir delante de las chicas guapas. Tenía ojos azules enmarcados por dos pobladas cejas negras y pelo rizado de igual color.

- Steve. Iré poniendo las cosas en mi habitación.

Me quedé a cuadros en ese momento.

- ¿Tu habitación? Éste - dije haciendo un gesto intentando abarcar todo.- es mi piso.

- Tengo ordenes de quedarme a tu lado.

Iba a matar a mi padre, ¿Cómo se le ocurría? Tendría que convivir con un extraño, para poder huir de la policía que investigaba el homicidio, que YO había cometido por SU culpa.

- Vamos a ver, no me hace ninguna gracia esto. Y seguro que a ti tampoco, así que puedes irte tranquilo y no le diré nada a nadie.

Se limitó a ir a "su habitación" e ignorarme. Carlo no podía hacerme esto, pero ya que no iba a irse por su propio pie, y no quería llamar al culpable de todo esto. Habría que aguantarse.

En ese momento caí en la cuenta de un pequeño detalle, solo había visto una habitación hasta ahora.
Subí corriendo las escaleras y abrí la puerta, todo estaba en orden: una cama de matrimonio con sabanas blancas, un armario empotrado, dos mesillas de noche, un escritorio de madera...lo normal.  Sin embargo había dos puertas a la derecha de la habitación.

Una él baño y otra me supongo que sería su habitación. Necesitaba confirmarlo para quedarme tranquila. Golpee mis nudillos contra la puerta.

- ¿Steve estás en TU habitación?- pegué mi oreja contra la puerta.

- Sí, no te preocupes,  no vamos a compartir habitación. - se oyó una pequeña risa, seguramente había soñado ridículo para él. Pero para mi fue todo un alivio.

Mis maletas estaban encima de la cama. Seguro que Steve las había subido. Comencé a deshacerlas, sin poder olvidar que a partir de ese momento y hasta no sabia cuando, tendría que vivir con un amigo de mi padre.

Asesina por accidenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora