Yuri Plisetsky Y Tu (El amor de mi vida) -En edición-

Capítulo 2

P.O.V (T/N):

Han pasado dos semanas desde que volví de Rusia. Viktor me entrena junto con ambos Yuris.
Yurio retó a mi hermano a un programa corto para ver quien era el mejor y... Viktor me metió en la batalla con la misma condición que el resto, así que actualmente estoy entrenando para ganarle a ambos.

Últimamente he notado a Plisestky muy extraño ... Cada vez que me ve se sonroja y se marcha tras insultarme o algo por el estilo.

Estamos en Ice Castle, habiendo reservado la pista unas horas atrás para poder ver las rutinas y las canciones que vamos a patinar dentro de un par de días.

 — Bien, les traje dos canciones para que patinen Yuri y Yurio. — Viktor se encontraba parado sobre el hielo con sus patines negros, en frente de un equipo de música un tanto mediano del mismo color.

 — ¿Y yo qué? —Pregunté a Viktor algo ofendida, me sentía excluida.

— Tú competirás con una de las canciones más hermosas que hicieron para la película del señor de los anillos.

 Mi canción es : The Fellowship of the Ring Soundtrack-09-Many Meetings

— Si, es mejor que use esa. — Respondí sonriendo no muy convencida.

— Bien, escuchen — Le dio play al reproductor de música.

Una voz angelical acompañada de un bello instrumental sonó en todo el lugar provocando eco.

 — Es hermosa... — Susurré. Las notas abrazaban mis oídos, no podía evitar pensar en que era interpretada por ángeles de ropas blanquecinas. La partitura abrazaba mi corazón, llenándolo de calidez. Me recordaba al amor que se tienen mi abuelo y abuela, tan puro, incondicional... ágape.

—  Se siente tan... delicado... cálido, como una persona que acaba entrar al territorio del amor.   — El pelinegro elevaba su cabeza con los ojos cerrados, en busca de la intención de la canción mientras hablaba.

Yurio se mantuvo en silencio, mirando sus patines con desinterés, no era la canción indicada para él.

— Y esta... — El albino sonrió — Es Eros.

Me sonrojé al instante cuando oí las cuerdas de aquél instrumento durante los primeros segundos, entendí a la perfección el tema de la canción; mi cuerpo daba cosquilleaba, sólo había una palabra definir el propósito de la melodía: seducción.

—¡ Yo patinaré con esta! — Exclamó colocando una mano en su cintura e hizo un gesto con su otro brazo echándolo hacia atrás. Viktor le miró y pareció pensar unos momentos.

 — Entonces Yuri patinará con Eros y Yurio con Ágape. —Todos quedamos boquiabiertos.

—¡¿ Qué?! —Gritamos incrédulos al unísono.

— ¡Si! Será una sorpresa para todos los espectadores, nadie se lo esperará.

Luego de un par de quejas y la expresión de terror de mi hermano; Viktor les  mostró las diferentes coreografías, empezando por la sensual Eros. No parecía muy complicada la secuencia de pasos, sin embargo, no podría decir lo mismo de la sensualidad obligatoria que debías tener si la interpretabas. Sin duda iba  a ser duro para el pobre de mi hermano.