Capítulo 8

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Capítulo anterior:  

  ??? — *dulce* Has crecido mucho pequeña. 

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(N/A: lean despacio, si se termina la canción pónganla otra vez o usen otra de su agrado adecuada a la situación)  

P.O.V (T/N):

Volteé bruscamente sobre mis talones para ver de quier se trataba, era una mujer con el mismo color de cabello que yo, con ojos azules como el cielo que estaba sobre nosotras y piel casi tan clara como la nieve.

Esa mujer se me hace conocida, la he visto en fotos que mi abuelo me enseñaba.

Yo — M-mamá? *voz entre cortada*

Mamá — Hola mi pequeña-- dijo con lágrimas en los ojos-- ven acá *extendiendo sus brazos mientas sonreía*

Yo — ¡Mamá! --corrí hacia ella y la abracé con todas mis fuerzas mientras lloraba de alegría-- *voz entre cortada* pensé que nunca te vería

Mamá — Yo pensé lo mismo *llorando*

??? — Veo que ya se conocieron.

Me separé un poco de mamá para ver quién era el sueño de esa familiar voz.

Yo — *susurrando* Abuelo *llorando* Lo siento, lo siento, lo siento, no pude hacer nada *bajando la mirada*

Abuelo — No había nada que hacer pequeña --se me acercó con una sonrisa a abrasarme y yo con gusto respondí-- me alegra poder verte por última vez T/N-chan.

Megumi — Yo digo lo mismo que él.

Me separé de mi abuelo, corrí y literalmente me abalancé sobre Megumi.

Yo — Onee-chan --en todo el trayecto jamas dejé de llorar-- lo lamento mucho *voz entre-cortada* no pude llegar a tiempo.

Magumi — No te disculpes, mucho menos por algo así. No es tu culpa no lograr llegar.

Yo — P-pero...

Mamá —  créeme, no es tu culpa hija *sonriendo* debemos irnos, ya has estado mucho en este lugar...

Abuelo — ... Y puedes morir si estás más tiempo aquí. *acariciando mi cabeza* adiós.

Magumi — Adiós hermanita, Gana el G.P!!! *sacudiendo su mano en la lejanía*

Yo — Lo haré, lo prometo!!! *grité*-- Luego de eso el suelo que estaba bajo mis pies comenzó a brillar con intensidad obligándome a cerrar mis ojos. Cuando los abrí ya no estaba en ese paraíso, sino que estaba recostada sobre una camilla en una sala de hospital.-- *quejido de incomodidad* Q-que pasó?

Olivares — Te desmayaste en el pasillo luego de un colapso nervioso. Ya llamamos a tu abuela, ella está en el pasillo esperándote... Te puedes levantar?

Yo — *levantándome* S-si... *sosteniéndome con la pared* todo da vueltas... 

Olivares — Descuida, se te pasará pronto, estuviste dos días inconsciente.

Yo — Dos días? *impresionada* imposible...

Olivares — Pensamos que había entrado en una especie de coma ya que hay antecedentes de ello, pero al parecer solo fue estrés, nervios y otras cosas *abriendo la puerta* Señora Kamishiro, T/N ya despertó.

Yuri Plisetsky Y Tu (El amor de mi vida) -En edición-Donde viven las historias. Descúbrelo ahora