XXII

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Me bajo del auto y miro a mi alrededor. Estamos en la entrada del paintball de los White, pero eso no es lo que observo. Lo que observo es al otro lado, donde comienza el bosque. No es que me asuste el bosque, pero la verdad es que no mucha gente se internaba por allí, y, ádemas, ya estaba oscureciendo.

-Si se les acerca un oso haganse los muertos-dice Michael.

-¿Osos?-pregunta dándo un paso atras Bekah.

-Está bromeando- miento.

-¿Y si nos teletransportas Colin?-propone esperanzada.

- Lo haría pero no conozco el lugar al que vamos. Y si no lo puedo visualizar, bueno... no me podré mover ni un centímetro.

-Rayos-dice mi amiga- Esta bien; vamos.

Empezamos a caminar y pronto estamos rodeados de árboles, sin vista alguna del viejo paintball. El sonido del viento entre las hojas es terrorifico. Como si una anciana decrépita estuviera cantando una canción de cuna de terror.

-Este lugar me da escalofríos-admite Michael- ¡Hey! Veo algo.

Miro al lugar al que apunta y efectivamente veo una cerca brillante, rodeando lo que parece un simple edificio gris.

-Shhh-sisea Colin.-Nos escuchan y estamos muertos.-Al notar mi mirada se corrige- Atrapados digo...

Nos acercamos sigilosamente a la cerca y desde ahí observamos. No pareciera que hay nadie ahí.
Lo único que indica que el lugar está habilitado es un reluciente auto negro que se me hace vagamente familiar.

-¿Bueno y que hacemos ahora?-pregunta Bekah.

-Primero hay que asegurarnos de que no nos vean. Maddie, las cámaras.-indica agitando su castaño pelo hacia las cámaras que se encuentran en lo alto de los postes del pequeño estacionamiento del edificio.

-¿Yo qué? Oh, entiendo- digo comprendiendo lo que quiere que haga.- Será mejor que se alejen chicos.

Estos me obedecen y se alejan un buen metro de mí. Apunto con mis manos hacia las cámaras y cierro los ojos para concentrarme. Me mantengo así hasta que mis manos empiezan a sentir esas características hormigitas y a despedir pequeños destellos de luz.
De repente un rayo sale disparado y da de lleno contra las cámaras, que caen hechas pedazos y echando humo.

-Bueno y yo que te decía inútil- murmura Michael impresionado.

-Karma- respondo sacándole la lengua.- ¿Colin tienes suficiente fuerza como para hacernos aparecer dentro de los límites de la cerca?

-Creo que sí-responde. Mira a Bekah y le ofrece la mano. Ella la toma con fuerza. Trato de no mirar, pues me recuerdan a James.
Cada uno se agarra de Colin y cerramos los ojos. O tal vez solo los cerré yo, porque debo admitir que no me gustaba teletransportarme mucho.

-Puedes abrir los ojos-me dice Sam a mi lado- Aunque creo que es mejor que no lo hagas...

Nerviosa, abro los ojos. Sam tenía razón. Lo que veía ni me gustaba para nada.
Un largo pasillo oscuro tenía como jaulas hechas pedazos en todos lados. Casi como si fuera un establo para caballos.

-James...-llama Michael susurrando. Bekah lo mira burlona.-¿Qué? Había que intentarlo...

-Chicos-nos llama la atención Sam.- ¿No será esa puerta del fondo?

Dirigo mi mirada hacia el fondo del pasillo, donde se encuentra una puerta un poco más moderna que las otras, no está hecha de madera roída, si no que de un metal oscuro.

-Supongo que solo hay una manera de averiguarlo...-dice Colin.

-Colin Ezequiel Willams detente ahora mismo- dice Bekah.- ¿En que estan pensando? No podemos llegar y abrir la puerta misteriosa y mágicamente recuperar a James... Necesitamos organizarnos o algo.

-A veces no mecesitas organizar hermanita- dice Michael sonriendo- Necesitas desordenar. Ah y Colin, ¿Ezequiel? ¿Enserio?

-Culpa a mi madre no a mí- refunfuña el susodicho.

-¿Vamos a ir o qué?- pregunto impaciente. No puedo quedarme quieta a discutir cuando James podría estar ahí dentro siendo torturado e investigado.

-Oh ok...- se resigna Bekah- Lo haré solo porque es James... Y yo no abandono a los amigos.

-Bien dicho-dice Sam. Michael sonríe a modo de confirmación.

-Entonces vamos...-digo. Nos acercamos lo más discretamente posible a la puerta y cuando estamos frente a ella miro a Colin. Este asiente y yo abro la puerta. Colin y yo, que estamos en el frente, entramos primero,seguidos de los demás.

Lo primero que veo es a uno de los minions de espaldas a nosotros, arrastrando lo que parece ser un chico de nuestra edad, hacia un calabozo de metal parecido a los del pasillo.

-Hey tarupido- dice Michael. El hombre se da vuelta, y saca un arma de su pantalón- ¡Trágate esta!- le tira una cosa que no alcanzo a ver, la cual cae a los pies del hombre. No pasa nada, asi que el hombre nos mira burlón y vuelve a subir la pistola.

-Manos arri...-se detiene cuando el artefacto de Michael empieza a lanzar destellos rojos hacia todos lados. Es un petardo.
En la confusión del minion, Colin se acerca y de un puñetazo lo deja tirado en el suelo.

-Wow. Por primera vez tus bromas sirven de algo Michael.-digo impresionada ahora yo.

-Karma.-responde imitándome. Sonrío y miro al hombre que yace inconsiente. A su lado el chico prisionero levanta la cabeza.
Sus ojos verde azulados son cubiertos por sus rubios rizos. Aunque tiene la cara manchada y varios moretones, debo confesar que es atractivo.

-¿Como te llamas?-le pregunto ofreciendole la mano para levantarlo.

- Nicholas Rivers-responde.- Te tomaría esa mano pero tengo las mías amarradas...

-Oh, perdón- digo notando que sus manos están atadas en su espalda. Intento desamarrarlo pero la cuerda me quema.- Auch.

-Ah, asi que tienen poderes ¿ah?- pregunta pasando la vista por todos mis amigos.

-¿Como lo sabes?-pregunta Colin.

-La cuerda solo quema a los Kraftvoll. Está hecha de Bimsstein- al ver nuestras caras confundidas se ríe- Al parecer ustedes no saben nada de nada.
¿Hay alguien que no tenga poderes?

-Yo-dicen Sam, Michael y Bekah.

-A ustedes la cuerda no les quemará...

Sam se acerca y desamarra la cuerda sin contratiempos. Nicholas se levanta y se sacude. Lleva una vieja chaqueta con chiporra y unos desgastados jeans, pero a pesar de todo, sonríe como si nada.

-Bueno y ¿quienes son ustedes?-pregunta. Nos presentamos y le contamos la situación. Supongo que no hace mal hablar con un extraño cuando este sabe que tienes poderes sobrenaturales.

-Oh, no sabía que hubiera alguien más aquí...-dice serio- Creí que los habían matado a todos.

Doy un grito ahogado y Bekah me pone una mano en el hombro.

-¿Tienes idea de donde podría estar?- pregunta Colin angustiado.

-Claro. Los hombres siguen ordenes de alguien detrás de esa puerta.-la apunta y observamos. Es exactamente igual a la primera, asi que nos movemos todos juntos hacia esta. (Incluido el tal Nicholas)

Entramos y vemos un estudio muy oscuro, alguien está sentado en el escritorio al medio de la habitación, pero no lo alcanzo a identificar, al menos no hasta que se enciende la luz.

-¿Abuelo?-decimos Colin y yo al unísono.

***

Holis! Espero que les haya gustado el capítulo, en especial el nuevo personaje...
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*Este cap está dedicado a una fiel lectora @Ly_Stef29

Se despide @MMWhite2000✌

(Nicholas Rivers en multimedia)

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