Moneda. -Yuri x Otabek- [YuriOnIce]

Primer parte.

Yuri Plisetsky se había prometido no volverse a romper ese año escolar, no dejarse pisotear por los demás y mucho menos dejarse llevar por aquellas cosas realmente crueles que le dicen.
Yuri iba preparado para todo aquel que lo insultase, ya que, aún que sus movimientos eran de una bailarina, su actitud ante esas cosas ya no lo iban a ser, Lilia (su profesora de ballet) le había enseñado que no debía dejarse ante aquellos que le envidiaban por su forma tan fabulosa de ser y realmente así lo comenzó a creer.
Enredo su cabello en un moño a lo alto de su cabeza y con la barbilla alzada puso un pie dentro de la institución, pero al instante se acobardó. Hizo de sus manos un puño y suspiro pesadamente intentando volver a creer en las palabras de Lilia.
Observo a su alrededor intentando encontrar a alguien a quien conociese, pero fue inútil, solo lograba ver personas desconocidas (que seguramente iban a primer grado) y personas que realmente no le agradaban, comenzando con el alumno de intercambio Jean-Jacques Leroy, o como era llamado JJ.
Colocó los ojos en blanco y se dispuso a caminar al interior de la institución, con la barbilla en alto, fingiendo la confianza que en realidad no tenía. Posiblemente ese pudo ser el mejor momento de su vida, sintiéndose por primera vez una persona confiada, claro hasta que chocó con alguien y todos esos aires de grandeza se desaparecieron. Un sonrojo se formó en las mejillas de Yuri y se dispuso a disculparse, claro que no lo logro porque aquella persona con la que había chocado se había ido. Sin más, sin intentar disculparse (porque aunque Yuri quería disculparse claramente había sido culpa de esa persona).

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Yuri se encontraba (por primera vez) en la cafetería junto a Mila, quien lo había convencido de comer con los amigos de esta. "Es por tu salud mental Yuri, no hablas con nadie más que conmigo y realmente me gustaría pasar tiempo con mi mejor amigo y mis demás amigos" Había dicho y si, puede que Yuri solo la tuviese de amiga a ella, pero realmente no era su culpa, la mayoría en esa escuela no lo bajaba de marica y por eso mismo casi nadie se le acercaba, ya que el acercarte a Yuri baja tu reputación.
Colocó los ojos en blanco y puso una de sus ya muy famosas caras de molestia, no le gustaba para nada el ruido en exageración de la cafetería, por algo el siempre llevaba su almuerzo y comía fuera.
Mila sonrió con diversión al ver la cara que traía Yuri, ella estaba feliz por qué su amigo aceptase ir con ella a la cafetería, porque él era muy importante para ella y no quería verle sufrir más.
Por eso ideó el plan "amigos para Yuri" en donde juntaría a un par de personas para intentar hacerlas amigas de Yuri y así tener alguien que lo defendiese, ya que, aunque el rubio podía responderte de una mala manera aún seguía siendo un chico realmente delicado, que necesitaba protección.

—Mila, ¿podrías ponerme atención por una vez en tu jodida vida? Te pregunté en dónde demonios nos vamos a sentar. - Mila río, porque demonios, yuri era la cosa más femenina que podrías conocer, claro hasta que abría la boca.
—Busca a Otabek, el de nuevo ingreso.- Yuri asintió ante aquella mención y comenzó a buscar al Kazajo, a quien rápidamente encontró en una de las mesas más cercanas a la puerta. Yuri le señaló a mila en donde se encontraba y se dirigieron hacia allá.
Pero de un momento a otro JJ se posicionó frente al rubio, impidiéndole el paso.
— Pero miren, si es la bella dama en la cafetería ¿a qué debemos el honor de encontrarla aquí? -Hablo irónicamente. Yuri hizo todo lo posible por ignorarle y seguir su paso, pero este se lo volvió a impedir.
— Déjame pasar.- Murmuró. JJ era realmente malo cuando se lo proponía y ahora se lo había propuesto, pues claro, nuevo año, nuevas maneras de joder gente y a gente se refería al pequeño niño afeminado que se encontraba frente a él.
— Oh bella dama ¿no le han enseñado el por favor? Creo que le serviría muy bien si quiere pasar.- Mila gruñó y le dedicó una mala mirada, solo logrando que al canadiense se le formara una gran sonrisa en su rostro.
Miró directamente a los ojos a Mila y le reto con la mirada, aún sin quitar la burla en ella. Con movimientos lentos JJ se acercó peligrosamente a Yuri, entrecerrando los ojos. La sonrisa que tenía se ensanchó más al notar el nerviosismo del rubio. Mila quiso interponerse, pero el canadiense se lo impidió empujándola a un lado.
— Mira rubia ¿qué tal si vienes un rato conmigo, contoneas esas bellas caderas y te sientas en mi regazo como una buena damita? - Yuri se encrespó al oír tal aberración. Abrió la boca para poner en su lugar al canadiense, pero se le fue impedido por un estruendo que logró llamar la atención de todos los que miraban la escena.

Otabek Altin, en kazajo de nuevo ingreso se dirigía a ellos con una mirada atemorizante para muchos, en ellos incluidos JJ. Mila sonrío con superioridad al ver la mirada algo espantada del canadiense, tomo de la mano al rubio y empujó a JJ a un lado, para así poder pasar.
Otabek se detuvo al ver a Mila con el rubio caminar hacia su dirección. JJ observó todo con determinación y un rastro de burla apareció en su mirada.
— Vaya rubia me sorprendes, no pensé que fueses la pequeña mascota de alguien. 

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-Mxx
-acabo de cambiar el nombre mehehehe-