Entre dos mundos (COMPLETA)

Destapando la verdad

Revisé el móvil una...y otra...y otra vez...y...nada, ni un sólo mensaje de Nick. Solamente, llamadas perdidas de Ancel ,que no iba a responder.

¿Acaso estuve tan ciega?¿Como pude fijarme, solo en un maldito físico?

Creo que sabia lo que quería hacer ,era huir, evadirme de todo mal que pudiera herirme...

Lía y yo organizamos una excusión a la capital para ver a una amiga que dejaría nuestro instituto para irse a vivir allí.
Lo pasamos genial y conseguí despejar mi mente, un día solo de chicas donde podríamos ver tiendas y tomar unos deliciosos batidos de frutas.

Creo que este seria el momento, contarle a Lía lo que me había ocurrido con Nick en aquel viaje, lo que había pasado en la noche de graduación y las incómodas clases a su lado...

Nunca quise hablar de esto con nadie ,pero la opinión de Lía me sirvió mucho es más ,me abrió los ojos .Sus consejos siempre me ayudan a tomar un mejor rumbo ante estas situaciones.

Este fue su consejo: ante estas situaciones lo mejor es guiarte por tu corazón, solo conozco bien a Nick, así que mi favorito siempre será él. Lo conozco bien, nunca te haría daño.

Sus palabras resultaron ser un rayo de esperanza en este sobrio bache que me invadía.

1 de Julio...
Me disponía a quedar con una vieja amiga de la primaria llamada Andrea, organizó una vuelta por la ciudad. Me vestí con un pantalón vaquero y una ceñida camisetita negra, me deshice de mis gafas dado que aunque no viera por unas horas no iba a morirme.
Al regresar a casa, a eso de las 9 de la noche, encontré a mi peor pesadilla sentado en el mismo muro que siempre...era Ancel. De repente, se levantó y me comenzó a hablar.

-Sky,te he llamado varias veces ¿acaso estás molesta?

- Porque mi amigo me prometió venir a mi graduación y al final ni se presentó, nooooo....-dije con ironía- ¿que esperabas?me prometes venir y lo cancelas en el último momento.

-Quería irme con mis amigos...-se excusó

-Me parece bien que quieras vivir tu vida...ahora,¿dejas que me vaya?

Me fui hacia mi casa y me agarró del brazo.

-Veo que te pillo de malas, hablaremos mañana.

Le solté con fuerza, queriéndole dar un manotazo en la cara.

-Ya veremos...

2 de Julio.

No quería salir de casa, él me estaría esperando en el mismo lugar. Él quería una explicación de porqué tenia ese comportamiento, no podía confesarle mi amor por él... O tal vez sí...
Soy demasiado tímida para esas cosas y solo lo haría si estuviera 100% segura.
Estuve la semana siguiente en el sur, el lugar donde podía despejar mi mente.
Esperaba volver y no verle más hasta el siguiente verano, y ya el siguiente se me ocurriría otro plan para no verle.

Pero no fue así...

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17 de Julio

Volver de las vacaciones y encontrarse a Ancel.¿por qué?
Supongo que tendría que afrontar esta situación. Me vestí con los mismos tejanos y la camisetita (porque a eso no se le puede llamar camiseta) , retiré mis gafas de nuevo y planche mi pelo.

Salí a la calle y allí estaba, cogí aire y....

-¡Se puede saber donde estabas!-Ancel gruñó como nunca.

-Me...había ido de vacaciones...-me excuse

-¿Y no me lo pudiste haber dicho? -gruñó con más fuerza

-Todo fue repentino, y una decisión de mis padres- mentí

-Bueno, quería saber ¿por qué estás tan molesta?-se relajó

-A ver...esto no es fácil de decir...-mis manos sudaban y mi voz temblaba- ¿recuerdas el día que nos conocimos?Desde ese día estoy enamorada de ti, cuando no pudiste venir a mi graduación me lo rompiste completamente en pedacitos... si me rechazas ahora lo comprenderé,sé que no soy tu tipo, que no soy exuberante y preciosa como Cait...

-No sé que decir Sky...-se quedó pálido- A mi también me gustabas...desde que nos conocimos también.

-¿Gustabas? Estás hablando en pasado, por lo que entiendo que ya no...

-No he dicho eso solo necesito pensarlo un poco...

Nos quedamos en silencio, mi mirada se hizo para abajo, pensando que lo que me quedaba de dignidad la tenía Ancel en sus manos.

-Creo que me voy ya.-dije

-Te acompaño -insistió

Al abrir la puerta del edificio con la cerradura me tomó de mi sudada mano. Me puse roja como un tomate y el calor invadía mis cachetes, no pude ni mirarle a los ojos. Llamé al ascensor y subimos en completo silencio, fue entonces cuando llegamos a mi piso el 6°....