Entre dos mundos (COMPLETA)

×Caos×

-Ya no sé como hacer que creas en mí, Sky.-dijo decepcionado

-Sí creo en ti, solo te digo que tengo miedo...

-¿Sabes que no te haría daño, verdad?-hizo un último esfuerzo

Separo un mechón de mi pelo que ocultaba mi rostro, levantó mi barbilla.

-Solo dejame espacio¿vale?, si te digo no quiero es no quiero-salí de la cocina y volví al salón, él permaneció en la cocina también cabreado.

Lo que parecía la cena más romántica se sumió completamente en un gran caos.

Pasaron 40 minutos y Ancel salió de la cocina.

-Aquí tienes tu comida-la colocó en la mesa y se retiró.

-Espera...-le dije-quedate, no pretendía hacerte sufrir, necesito conocerte mejor y entonces te demostraré lo mucho que te quiero.

Se sentó pero algo alejado, así que comencé a arrimarme a él y le planté un beso en su mejilla.

-Gracias por soportarme-le susurré.

Vi una leve sonrisa en su rostro pero  seguía notando su cabreo. Se respiraba ira y furia en el ambiente, para tranquilizarlo le abracé y coloqué su mano en mi cintura de nuevo.

-No sé a donde quieres que lleguemos si no quieres dar el paso-continuó.

-¿Otra vez con esas? Tú dices que llevamos cinco meses juntos, cuando en realidad llevamos dos, no sé si entiendes ¡a ver si te entra en la cabeza de una puta vez!

-Pero parece como si lleváramos más tiempo, a ti te pasa algo eso del miedo no es muy propio de ti.

-No, te lo digo en serio...Ahora no tengo ganas de nada.

-¿No era esto lo que quisiste desde pequeña?-se atrevió a preguntar con osadía.

-Tal vez sí...pero no lo veía ver tan rápido y luego llegó él y...

Me atreví a decirlo porque su osadía ,había llegado demasiado lejos. Nadie puede forzarte a hacer algo que no quieres.

-¿Él?

-No dije nada...-quise excusarme- cosas mías...

-No Sky ¿quien es él?-se comenzó a enfurecer

-Olvidalo no es nadie lo juro, solo un amigo.

-¿Me vas a sustituir?

-No he besado ni me he tirado a nadie...

-¿Y enamorado?

-No quiero hablar de esto ahora que estás enfadado, adiós.

-¡¡Contestame!! Te ves con alguien y es mejor que yo ¿verdad?

-No me estoy viendo con nadie a diferencia de ti.-dije pareciendo un dragón echando su letal fuego por la boca. Pero en este caso el fuego eran mis palabras.

-¿Qué pretendes decir con eso? Seguro que tu y ese chico ya estáis saliendo y todo.

-¿Perdona? Yo no soy quien está coqueteando con otras. Yo soy la que me mantengo al margen, me alejo de él y tú eres el único Ancel. Pero...me he enterado de tu traición. ¿Cómo se llama ella, cielo?

-¿Quien te ha dicho eso?

-Tu abuela, le pregunté por ti y ella me dijo como estabas el otro día y al parecer muy bien...-lancé una risa irónica.

-¿Quieres saberlo? Se llama Lisa, es preciosa, inteligente y nada celosa. A diferencia tuya, que me tomas como un vil mentiroso.

-Perfecto, era lo que quería oír ¡me voy!

-Pero al igual que tu y ese chico, es solo una amiga.-dijo.

-No quiero volver a hablar contigo...

-Avisame, cuando me vayas a decir la verdad sobre el chico y tú.-dijo con ironía

Nunca le había visto tan cabreado parecía que todo lo que sabía de él se había esfumado y me sentía culpable en el fondo.  Pero esta era una decisión de ambos y visto su comportamiento de malcriadez no cedería.

Me despedí dando un portazo que no sé como no lo oyeron los demás vecinos y salieron a ver que pasaba. Panda de cotillas...

Eran las 9:30 aún, decidí irme aunque fuera temprano, él se fue para afuera dejando que me vaya. Subí a la azotea y comencé a llorar desconsoladamente.

Pensé en que toda la culpa era mía y de nadie más, que debería confiar más en Ancel, si él me prometía que era la única era la única.

También, en que Nick siempre me trató como una reina y que no debería de haberlo rechazado, es más , si me preguntaréis en estos instantes dejaría a Ancel por Nick.

Así durante una puñetera hora llorando...me había roto en pedazos, no quería el consuelo de nadie, cogí una manta que tenia tendida me abrigué y contemplé las vistas nocturnas. ¿Quien sería esa tal, Lisa? ¿De verdad eramos un jodido amor de verano?

¿10:28?Mamá se estaría preguntando cuando llegaría, era hora de bajar. Volví a tender mi manta y cogí la mochila y bajé corriendo.

-¿Qué tal el trabajo?-preguntó mi madre.

-De diez-le mentí, en el fondo tragaba mis lágrimas y mi ilusión por seguir con Ancel se desvanecía más.

-¿Has cenado?

-Sí, mami¿puedo irme a mi cuarto? Estoy cansada de tanto trabajo.

-Vale, buenas noches-reposó un beso en mi cien.

-Buenas noches...

En realidad quería abrir mi ordenador, ver si ese hijo de su madre se había arrepentido de su comportamiento.

No soy cualquiera que a los dos meses de relación ya te está follando, y...¡¡¡bingo!!!5 llamadas perdidas y 17 mensajes en una hora y media...nuevo récord personal...

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