Toda mi vida he sido una persona solitaria, mi único amigo desde que yo recuerdo,había sido Ken, él me acompañaba en los momentos difíciles, aunque creo que nunca fuimos especialmente unidos, pues él tenia mucha facilidad de palabra y era bastante popular, así que en ocasiones se olvidaba de mi. Pero jamas pensé que dejaríamos de hablarnos tan repentinamente. Su pérdida me importo poco, pues casi de inmediato llegó Takashi.
No volví a la escuela, tenia miedo de enfrentarme a Ken, y de que todos supieran lo que sucedía entre Takashi y yo.
Una mañana cuando iba a desayunar, me despertó el sonido de un golpe en la puerta de mi casa, me levante de la silla, y abrí apresuradamente, pensé que tal vez era Takashi, ya que no me había hablado desde aquel día que decidimos ser novios.
Abrí la puerta y para mi sorpresa no era Takashi, ni nadie conocido, más bien, eran unos cuantos abogados con una orden de embargo.
-Señor Kazuki?
-si, soy yo
-tenemos una orden de embargo firmada por el dueño de esta propiedad, en la que se especifica que los inquilinos de esta casa no han pagado el precio establecido, y por lo tanto, deberá ser desalojada.
Me puse pálido, no sabia que hacer o que decir, estaba atónito, sabía que este día llegaría, pero no tan pronto, estaba desesperado, así que sin pensarlo me puse de rodillas y comencé a rogarle a los encargados casi llorando.
-por favor, no lo hagan, yo no tengo a donde ir, por favor, sean compasivo
Me ignoraron completamente, y comenzaron a sacar todas mis cosas a la calle, no esperaron a que yo arreglara nada, solo hicieron su trabajo, y cuando terminaron, me sacaron a mi de la casa. Los señores se fueron, y yo me quede llorando en la calle, con todas mis cosas, todo había sucedido tan rápido, que inclusive el plato de comida seguía sobre la mesa.
Estuve bastante tiempo lamentandome, pero no podía quedarme a vivir en la calle, así que no lo pensé demasiado, tomé las cosas mas pequeñas e importantes, y me dirigí a la escuela, era la hora de la salida, y estaba seguro de que Takashi estaría leyendo en el jardín.