-Duff-
-¡Si, si, si! -Grité emocionado
-Recuerdo...
La abracé fuertemente a lo que ella sonrió y también me abrazó. La adoro, la adoro, la adoro.
-Duff... Tengo hambre. Mucha hambre ¿Me preparas algo de comer?
-Claro que si, pequeña
-No me digas pequeña, el que tú seas una jirafa no es mi problema -gruñó a lo que yo solté una carcajada
Caminé hasta la cocina y vi una nota
"Duff, cuida bien a mi hermana pedazo de edificio. Los chicos y yo fuímos ancomprarle baquetas a Steven y guitarras. Vendremos tarde, follen con condón que aún no quiero sobrinos .l. Izzy les dejó Pizza en el horno"
Genial... Saqué la pizza del horno y nos la comimos mientras veíamos una pelicula de terror. Muy mala por cierto.
-Que asco de película. -Dijo ella
-Malísima.
-Tengo sueño...
-Pero... Apenas son las 6:30pm
-Me dormiré ahora... -Susurró
Cargué su liviano cuerpo y la llevé a su habitación, la recosté sobre la cama y la tapé con las mantas
-¿No dormirás conmigo? -Dijo sonriendo pícaramente
-Vendré más tarde, a menos que ruegues que duerma contigo aquí y ahora -le devolví el gesto
-Yo no le ruego a nadie. Pero, tal vez contigo sea la ecepción -abrió sus brazos y me apresuré a atraparlos
Me recosté a su lado y abracé su cintura, ella comenzó a trenzarme el cabello, amo que haga eso.
-Tu cabello está más suave que el mío, eso no es justo -Rió
-No es cierto...
-Si lo es
Abracé más fuerte su cintura y luego de unos minutos me quedé dormido
***
-Buenos días, McKagan -esa voz
-Buenos días -saludé y rápidamente agarré mi botella de Vodka que estaba en la pequeña mesa al lado de la cama y le dí un sorbo. Ese ardor en la garganta que tanto adoro
Rockett me dió un beso en la frente
-¡Tu terapia empieza hoy! -Dije y me paré de la cama de un brinco. Me cambié con un atuendo cómodo y bajé a desayunar. Ella ya estaba lista, Steven me acompañó a dejar a Rockett al hospital. Ella y steven se la pasaron hablando todo el camino. Reían y reían... Hasta que al fin llegamos
***
Rockett llevaba 1 hora en el cuarto con el doctor. Steven compró palomitas de maíz, o Popcorns, como él les dice.
-¿Quieres? -preguntó extendiendome sus palomitas
-... De acuerdo
-Jovenes, no pueden comer aquí -dijo un guardia
Steven le ofreció palomitas para que se callara y aceptó con éstas y un autógrafo de ambos.
-Acabas de sobornar a un guardia... Chocalas -sonreí y chocamos palmas. Luego de un rato Rockett salió y me dió un fuerte abrazo
-Tú -me miró con una pícara sonrisa- recuerdo cuando lo hicimos en el cuarto de Steven -estalló en risas y Steven nos miraba con extrañeza
-Hola, PopCorn -saludó ella
-Hola pequeña PopCorns
-Ni una palabra a nadie -me susurró al oído. Reí internamente.