Hospital 777 {Wigetta}

Capítulo 3"SonrisaPerfecta".

Narra Guillermo:
El Doctor, bueno, Samuel me colocaba en la camilla para empezar a escanear mi cuerpo, era la primera vez que me hacían algo así, de pequeño ya había estado en el hospital, si, pero era un chuqueo rápido, nada comparado con esto, así que sentía miedo, el primero me hizo lo fácil, me contó los latidos del corazón, yo respiraba y cerraba los ojos y con su mano sobre mi pecho pasaba el estetoscopio logrando escuchar mis latidos.

-Okey, una más, respira hondo -Me ordeno. -Lo hice.

-¡Muy Bien! ahora exhala -Me volvió a decir. -Lo hice.

- Tienes un gran corazón Guillermo. -Me dijo planteando una sonrisa en su rostro.

- ¿En serio? -Le pregunté devolviéndole la sonrisa.

- Si, es que bueno, la mayoría de los pacientes que he tenido son como, no se -ríe- algo más secos y pues.. -enseguida lo interrumpi.

- ¡¿SECO?! -Exclamé entre una risa que salio de mi.

- ¡No, no, no! Quiero decir -Se ponía nervioso.

Al momento que se ponía así, soltaba sus sonrisas y no pude evitar verlo, el definitivamente tenia la sonrisa más hermosa que haya visto alguna vez, sus mejillas se tornaban rosadas debido a reír y tartamudear tanto. Era perfecto. De verlo olvide ponerle atención.

- Pero tu me entiendes, eres un paciente muy valiente aparte -Dijo mirando mis ojos.

- Ay Doctor, es usted muy bueno, jamás me cansare de agradecerle. -Le dije mirando ahora fijamente los suyos.

- ¿Cuántas veces tengo que decirte que me digas Samuel y no Doctor? -Me dijo con una risa saliente.

- Bueno, gracias Samuel, eres genial. -Reí al decir.

Nos reímos un momento, el empezó a escanear ahora lo demás de mis huesos, osea mi cuerpo, sentía como sus manos tocaban mis brazos, mis piernas, mi espalda, mi cuello, mi cara, mis pies, todo, excepto esa cosa que ya saben que es. El dio por terminar, la verdad es que hacia bien su trabajo, yo creó que ha salvado a muchas personas. En ese momento el me paso de nuevo a la silla de ruedas para regresar a la habitación donde yo me encontraba, dejo preparado todo para regresar a ver si mi cuerpo estaba bien, pero mientras estaba llevándome a mi cuarto, por así decirlo.

- ¿Lo vez? No fue nada difícil -Me dijo.

- Tienes... -Me calle al escuchar la voz de una mujer, la miré, no voy a negarlo se ve atractiva, era alta, cabello castaño, pero definitivamente no era mi tipo.

- Samuel -Se acerco a darle un beso en la mejilla.

- Te he dicho que me digas Doctor Samuel por favor, estamos en horarios de trabajo -Dijo bastante serio.